“Hace cien años, para atravesar el viajero la América del Sur desde el ángulo noroeste hasta el Atlántico, había de pasar a caballo las gargantas de la Cordillera. Allí se elevan hasta 6.000 metros páramos cubiertos de nieve; la transición del litoral fértil y del rico valle de Magdalena a los elevados glaciares es maravilla del explorador o del artista que recorra, como Humboldt, el Nuevo Mundo, y motivo de temor para el aventurero ávido de arrancarle sus riquezas”, escribe el gran historiador de prosapia alemana Émil Ludwig en su reconocida obra Bolívar. El caballero de la gloria y de la libertad, editorial Losada, S.A., Buenos Aires, 1958, tercera edición. Escrita por encargo del Gobierno de Venezuela y traducida por Enrique Planchart.