Sólo conozco partidas, no sé del retorno. Lo que busco está delante de mis ojos. Se trata del pasado, de un pasado que avanza a medida que recorro paisajes, aldeas, mares, puentes romanos. Siento que ese pasado que contemplo cambia mi itinerario, modifica mi sueño. Todo dura o nada permanece en la mirada del poeta que descubre la diáspora en un tiempo incierto. Siento que reconozco en estas escalinatas el pazo del Illobre y un castro que recorro en silencio.