Opinión

Nuestra Señora del ‘Santo Milagre do Cebreiro’

Nos hallamos en la iglesia de Santa María do Cebreiro: una de las más célebres de Galicia por el Santo Milagro. El ‘Santo Graal’ o ‘Grial’ de nuestra amada Tierra. Perteneciente al ‘concello’ de Pedrafita o Pedrafita do Cebreiro, presenta una altitud de 1.
Nuestra Señora del ‘Santo Milagre do Cebreiro’
Nos hallamos en la iglesia de Santa María do Cebreiro: una de las más célebres de Galicia por el Santo Milagro. El ‘Santo Graal’ o ‘Grial’ de nuestra amada Tierra. Perteneciente al ‘concello’ de Pedrafita o Pedrafita do Cebreiro, presenta una altitud de 1.300 metros sobre el nivel del mar, dentro de un eje de montañas ya en el límite de la Galicia Oriental y en la divisoria de las aguas para el Cantábrico y para el Sil-Miño, que arrastrando áureas arenas viajan con destino al océano Atlántico. He aquí el ‘Santo Milagre’ que el relato tradicional nos ha legado para la posterioridad a manera de mística religiosa y poesía pura.
Un fraile del monasterio se encontraba “celebrando misa” un día de abundante nieve. Un vecino de Barxamaior –muy devoto de la Virgen y de oir misa–, peleando con tanta dificultad al quedar casi atrapado por la nieve de los caminos, alcanzó la puerta de la iglesia tras haber consagrado el oficiante. El cual, al escuchar el ruido de los zuecos, giró su cabeza para ver quién era. Entonces pensó: “¿Quién será este hombre que con un día de tanta nevada llega hasta acá para contemplar un pedazo de pan y un poco de vino?” Cuando volvió la cabeza hacia los elementos consagrados, con enorme asombro vio que la hostia que estaba en la patena era carne y que del cáliz caía a borbotones la sangre. Merced a los “corporales” intentó tomar y contener la sangre, de los que todavía hoy se conservan restos, al igual que de la carne.
Esta narración oral prosigue asegurando que la imagen presente en altar bajó la cabeza como signo de adoración. Pronto murieron el fraile y el feligrés; fueron introducidos en el lado derecho, en unos nichos abiertos en el muro de la iglesia, en el que fueron descubiertos durante la postrera reforma que en ella se hizo. Ahora bien, ¿en qué fecha aconteció este ‘Santo Milagre’? Lo que sí se sabe es que, cuando los Reyes Católicos pasaron por este lugar, aún estaban allí mismo el cáliz y la patena. Ello motivó a la Reina a realizar donación de las cápsulas donde se guardan, en un gran bloque de granito bien acoplado al altar de la capilla donde perviven los sepulcros de los protagonistas del Sagrado ‘Milagre do Cebreiro’. Asimismo se conservan las dos piezas del oficio del altar –la patena y el cáliz–, en el cual podemos leer la siguiente inscripción: “Hoc sacratur quo cuntis vita parat”.
¡Quién sabe si la leyenda que inspiró a Richard Wagner fue la del Cebreiro! Desde luego, este Milagro es el ‘Santo Grial’ de Galicia. El licenciado Molina, al visitar el recinto, anotó la versión anteriormente contada, transcurridos cuatrocientos años. Testimonios de fe del emperador Carlos V. Además del escritor Molina, nos han dejado huellas del relato el ‘Peregrino Curioso’, el Padre Yepes y Laffi, el peregrino que –antes de referirnos el ‘Milagre’– afirma que la raíz del monasterio está en un ermitaño francés entregado a la penitencia, quien decía misa cada mañana, a la que asistían los vecinos del lugar llamado Malafacua o ‘A Faba’, cuando podían ir. Se mantiene la devoción a la ‘Virxe dos Remedios’, antigua imagen del siglo XII o XIII, ahora en la capilla del sur. Templo parroquial de origen prerrománico, amplio e irregular, de tres naves, cubierta a dos aguas, con grandes ‘laxas’ de pizarra sobre armazón de madera. ¿Sus fiestas y afamada romería? Los días 8 y 9 de septiembre.