Opinión

Cuando se habla de ostracismo o destierro, generalmente pensamos en la Antigua Grecia, donde era común este tipo de pena que el Estado podía imponer a una persona por haber cometido un delito o una fechoría, o porque su presencia era considerada perniciosa o peligrosa para el resto de la sociedad. La pena era considerada tan grave que se ubicaba inmediatamente debajo de la pena de muerte, de hecho, el incumplimiento de la pena de destierro se sancionaba con la muerte.
El indio norteamericano sólo recuperó una parte de la dignidad mediática que se merece una vez que su cultura y patrimonio han sido reducidos a escombros y digeridos por el imperialismo. A los pueblos árabes les sucede algo parecido: sólo se libran de la quema aquellos que se convierten en colonias, organizan carreras de coches que publicitan el menguante petróleo y patrocinan equipos de fútbol.
Para nadie fue una sorpresa la avasallante victoria del Partido Popular (PP) en las elecciones generales españolas del pasado 20 de noviembre. Con una nueva mayoría absoluta en el Parlamento (la mayor alcanzada electoralmente en su historia) el PP se apresta a gobernar tal y como lo exigía la UE: un gobierno “fuerte” para que aprobara un programa económico austero y unas reformas fiscales muy probablemente draconianas.
Viendo la película ‘Bajo el sol de Toscana’ nos vino a la mente Curzio Malaparte, ahora que nadie lo recuerda. Entre los escritores de nuestra juventud, él marcó nuestro hálito como nadie. Era la época en que uno conocía poco del mundo, nada de la vida y muy escasos matices de uno mismo.
Porque, de verdad, me dolió profundamente lo de “los chistes de gallegos”. ¿Los bajísimos índices de alfabetización y de cultura media que abrumaron a nuestra castigada población, unidos a los primarios instintos promovidos para su provecho por el frívolo engranaje consumista o los gobiernos demagógicos, habrán sido responsables de que los sectores menos iluminados de nuestra sociedad se hayan rebajado a solazarse en una
Además de 5 millones de desempleados, no entiendo por qué les llaman parados, hay 17 millones de personas en activo. Las elecciones que ganó el Partido Popular (PP) casi podríamos decir que no fueron ganadas sino perdidas por José Luis Rodríguez Zapatero.
Sr. Mujica CordanoPresidente da República Oriental do UruguaiMoi prezado don Xosé:Antes de pídolle desculpas pola utilización dunha vía non protocolaria para comunicarme con vostede.
La máquina de escribir en su versión más primitiva fue con la patente lograda en 1829 por William Austin Burt, la cual era toda de madera –capaz de escribir una carta tras otra–, infaustamente desaparecida por mor de un incendio en la oficina de patentes de Washington en 1836.
Por esas raras paradojas a que nos tiene acostumbrados la historia de la humanidad, una de las salsas más famosas de las utilizadas en la alta cocina francesa nació lejos de París, del otro lado de los Pirineos, por los caminos que cuatrocientos años después recorrería Ferrán Adriá, ya en tiempos de supremacía de la gastronomía española sobre la francesa.
Casi todos sabemos –no sólo los periodistas y los políticos, también la mayoría de la gente– que la tecnocracia no existe, por mucho que nos digan que los tecnócratas que están sustituyendo a políticos electos en Europa son máquinas de gestionar científicamente el patrimonio de la gente.
En abierta franqueza, Carlos Fuentes nos ha ofrecido unas páginas con retazos de una autobiografía interior llamada ‘En esto creo’. En ella va recorriendo el abecedario de la vida misma.
No es fácil comprender nuestros días. Todo se mezcla; todo. Tal vez siempre fue así, tal vez el ser humano jamás terminó de aprender, de sentir, de intuir. Por eso necesita de líderes, de reyes, de dioses, de banderas. Tiene miedo de estar solo, de sentir latir su corazón, de intentar ser libre. De no depender de nadie. Libre como los vientos y los pájaros. Libre como un poema, como una estrella fugaz entre las olas.
Podría haber sido un lío de faldas que todo el mundo sabe que la carne es débil. Pero el bienparecido y atlético yerno del rey de los españoles, Iñaki Urdangarín Liebaert, está resultando ser uno más de la larga lista de ladrones de cuello blanco de la sociedad española.
En medio de la vorágine provocada por la crisis griega y la dimisión de Silvio Berlusconi como primer ministro italiano, Alemania y Francia, el eje geopolítico sobre el que gravita la UE, están explorando una reorganización radical de la Unión Europea para hacerla “más pequeña e integrada”, en un esfuerzo para asegurar el futuro de la moneda común.
En nuestro libro de cartas ‘Patricia y el escribidor’ hay como una observación, soporte o advertencia de Fernando Pessoa –el mejor poeta portugués contemporáneo– del cual ya dice mucho al no haber usado para exponerlo con soltura ninguno de sus heterónimos famosos.“Todas las cartas de amor son ridículas.
La barra de la esquina está comentando que los productos chinos invaden el Uruguay. Discuten un poco sobre si el achinamiento es una enfermedad curable o incurable. Creen que son las grandes coimas a gobernantes corruptos las que les abren de par en par, puertas y ventanas.Pocho: A mi me parece –desde mi ignorancia– que los consumidores son los más favorecidos con la invasión de productos ‘Made in China’.
“La máquina de escribir es el sonido del siglo XX. Seguramente así lo entendió el compositor francés Erik Satie cuando en 1917 y en colaboración con el polifacético Jean Cocteau compuso su ballet Parade incluyendo en su instrumentación el sonido de una máquina de escribir.
Se puede censurar con mentiras, desviando la atención, sacando de contexto, eludiendo el origen de los hechos… pero no hay mejor censura que borrar del mapa mediático la propia existencia de la noticia. Con poco de esfuerzo, podemos descubrir la corrupción de los políticos o la desvergüenza de la familia real.
Como es sabido, sin la papa, el pimiento y el tomate no entenderíamos la cocina, como diría Don Álvaro Cunqueiro, Cristiana de Occidente. Sin embargo, esos y otros alimentos de origen americano demoraron muchísimo en ser aceptados para alimento humano (no queda muy claro si en la península Ibérica los primeros que consumieron el tubérculo infernal que conocemos como papa o patata fueron los cerdos o los presos de la cárcel de Sevilla).
Las ‘civilizadas’ ministras españolas, de Asuntos Exteriores Trinidad Jiménez García-Herrera, y de Defensa, Carme Chacón Piqueras, anunciaban después del linchamiento y sodomización de Muamar Al Gadafi, que éste “había desaparecido” (en lugar de decir que había sido asesinado) y que ahora comenzaba una época de “libertad”.