El PP recupera fuerza en Castilla y León y puede gobernar en Salamanca, Burgos, Segovia y Valladolid

El vaivén del recuento electoral dejó algunas cosas muy claras en provincias como Salamanca, Soria, Ávila y Zamora, mientras que otras han quedado a merced de los acuerdos que los líderes de unas y otras formaciones consigan cerrar en las próximas semanas. Todo parece indicar que, después de ocho años, Valladolid vuelve a manos del PP, gracias al acuerdo que se vislumbra con Vox, que pasa a ser la tercera fuerza por esa capital de provincia. En Valladolid ganó el PSOE en número de votos, aunque por escaso margen (sacó una ventaja de 758 al PP), y aumentó un punto el porcentaje con respecto a las pasadas municipales, pero la subida de más de 6 puntos que experimentó el PP hace que gane dos ediles y se igualen a 11 los representantes de ambas formaciones políticas. El apoyo que Vox pueda prestar a Jesús Julio Carnero (exconsejero de Presidencia de la Junta y candidato del PP a la alcaldía) será determinante para que este se haga con el mando en Valladolid, puesto que los 11 ediles que consiguió, sumados a los tres de Vox, le darían la mayoría absoluta y superaría a los 13 que el candidato socialista, Óscar Puente, obtendría con los que le pueda aportar la coalición TLP (IU-Verde, Equos y Alianza Verde).

Al igual que en Valladolid, el PP está cerca de arrebatar la alcaldía al PSOE en Burgos y Segovia, en esta última provincia, veinte años después de haberla perdido. El PP, con su candidato, José Mazarías, al frente, se impuso en Segovia con una subida de más de 11 puntos porcentuales y 12 concejales (3 más que los que logró en 2019) que, sumados a los dos que obtuvo Vox o al concejal de Ciudadanos, le proporcionarían la mayoría suficiente para alzarse con el poder. El PSOE, por su parte, perdió el mismo nímero de concejales que ganó el PP (se queda con 7), mientras que IU obtuvo 2 y Podemos AV logró solo uno. Con esas cifras se esfuma la posibilidad de que la alcaldesa y candidata socialista a revalidad el cargo, Clara Martín, pueda volver a la alcaldía.

Burgos fue de las pocas provincias castellanas y leonesas en las que el PSOE mejoró los resultados de la pasada cita municipal. Sin embargo, los doce ediles que logró el pasado domingo la candidatura liderada por Daniel de la Rosa, no parecen suficientes para que pueda volver a dirigir el ayuntamiento burgalés. Los 11 concejales que logró el PP, junto con los 4 de Vox superan los 14 de la mayoría absoluta estipulada para esa provincia, por lo que, todo apunta a que será Cristina Ayala (PP) la que tome las riendas del municipio.

Salamanca es la única capital de provincia de Castilla y León en la que el PP obtiene mayoría absoluta. Con 14 concejales salidos del recuento de las urnas el pasado domingo, Carlos García Carbayo revalida la alcaldía en la capital salmantina, en esta ocasión, sin necesidad de contar con el apoyo de ninguna otra fuerza política, como le ocurrió en 2019, que recibió el respaldo de Ciudadanos. García Carbayo incrementó en más de un 6,5% el porcentaje de votos que cosechara entonces e incrementó de 11 a 14 el número de concejales. El PSOE, que bajó en respaldo más de 3,5 puntos, mantiene los 10 de la convocatoria anterior, mientras que Vox entra en el consistorio con 3 ediles. Desaparecen del mismo Ciudadanos y Podemos.

En Soria se impone el PSOE

Salamanca es tan hegemónica del PP como Soria lo es del PSOE, ya que es en esta capital de provincia donde los socialistas consiguieron el pasado domingo la única mayoría absoluta en Castilla y León. Se trata de la cuarta mayoría consecutiva que Carlos Martínez Mínguez logra para su partido en la mencionada provincia, donde mantiene los 12 concejales, pese a bajar un punto porcentual en el respaldo ciudadano. El PP, por su parte, con una subida de siete puntos, pasa de 6 a 7 ediles, pero la suma con Vox, que obtuvo dos, es insuficiente para que puedan alcanzar los 11 de la mayoría absoluta.

Otras capitales de provincia, como León o Palencia, aguardan por el resultado de los pactos para definir el signo político de sus gobiernos municipales. En el caso de León, al igual que sucedió en Burgos, el PSOE también mejoró resultados: subió tres puntos en el porcentaje de votos y aumentó en uno el número de concejales (pasó de 10 a 11), pero UPL (Unión del Pueblo Leonés) tiene la llave del Ayuntamiento, al pasar de dos a cinco concejales. El actual alcalde, José Antonio Díez, que está pendiente de revalidar la alcaldía, quedará a expensas de los acuerdos a los que UPL pueda llegar con el PP, que obtuvo 7 ediles (subió 1) y Vox, que entra en el juego municipal con dos representantes.

Palencia, por su parte, está también pendiente de los pactos. Las combinaciones pueden ser entre PSOE y ¡Vamos Palencia!, toda vez que la formación que lidera Miriam Andrés obtuvo 10 diputados, 3 menos de los que requiere la mayoría absoluta. Los tres de ¡Vamos Palencia! serían determinantes tanto para ella como para el PP, que con los 8 que obtuvo, más los tres de Vox, podría desbancar a la candidata socialista del consistorio.

Por lo que respecta a Ávila, todo apunta a que será Por Ávila (XAV) el partido que forme mayoría para mantener el Gobierno en esa capital de provincia. El candidato de la formación política, Jesús Manuel Sánchez Cabrera, que logró 11 concejales, necesitará pactar con el PSOE, que obtuvo 4 (dos menos que en 2019) o con Vox, que obtiene representación en la cámara al conseguir tres ediles. El PP logró siete, uno más que hace cuatro años.

Por último, Zamora continúa siendo la única capital de provincia de toda España en la que IU obtiene la alcaldía. Será el tercer mandato de Francisco Guarido, quien, pese a perder respaldo (pasó de 14 a 10 concejales) es el que más se aproxima a la mayoría absoluta, con el apoyo del PSOE, que obtuvo 3. Los 8 del PP, sumados a los 2 de Vox y los 2 de Zamora Sí son insuficientes para auparse a primer puesto en el consistorio.