Solidaridad sin Fronteras homenaje a la emigración española en París
El pasado sábado, día 4, Solidaridad sin Fronteras organizó un acto de homenaje a la emigración española en París que contó la presencia del presidente de esta institución, Dime Aw, así como el consejero de Trabajo Migraciones y Seguridad Social, Daniel Jesús Solana; la presidenta del Casal de Cataluya, Montse Pacheco; y el consejero de la Casa de España en la Región Parisina, Pedro Iniesta.
Durante el encuentro se hizo un recorrido sobre la emigración española desde los años 1960 y se habló de algunos de los problemas más comunes de los emigrantes a su llegada a París como las trabas administrativas, el idioma, la vivienda y el sistema educativo. Esta emigración poco a poco fue organizándose en asociaciones, creando una red de ayudas y de actividades culturales, así como de clases de español, hoy en día conocidas como ALCES (Aulas de Lengua y Cultura Española). “Muchos de ustedes son testigos de estos hechos y actores por este motivo este homenaje”, aseguró Dime Aw.
En su intervención, Daniel Jesús Solana agradeció el trabajo de las asociaciones para conservar los “orígenes, vuestra cultura, tradiciones, gastronomía y dando ayuda a los nuevos emigrantes”. “Gracias a todo esto –dijo–nosotros también fuimos mejorando y progresando”.
Solana aseguró que las “asociaciones permitieron que los que llegaban se integraran, que se sintieran menos solos, les ayudáis a encontrar trabajo, vivienda, les dais clases de español y francés, los recibís en vuestros locales y compartís experiencias, juegos, música, baile y gastronomía española de las diferentes regiones de España”.
Tras recordar que Francia es el segundo país, tras Argentina, con más españolas, ya que cuenta con 300.000 inscriptos, a los que habría que sumar los que no se registran, Solana explicó que actualmente la emigración es diferente, ya que está “más preparada” y “acuden menos a las asociaciones, ya que todo lo hacen por redes sociales, pero vosotros seguís ahí manteniendo y trabajando en vuestras asociaciones por vuestra cultura, tradiciones como lleváis haciéndolo desde hace tantos y tantos años. Por eso hoy desde mi Consejería os doy las gracias de todo corazón”
Por su parte, Pedro Iniesta se mostró orgulloso de “participar en el movimiento asociativo y en este caso aunque estemos lejos, no significa estar desarraigados de nuestro país y de nuestras raíces gracias al gran trabajo realizado por la emigración española y a la cual hoy rendimos homenaje”.
La presidenta del Casal de Catalunya resaltó su propia experiencia cuando llegó a París con diez años y aseguró que “se han hecho muchos homenajes y reconocimientos y hay que seguir haciéndolos”. “De los exiliados de la guerra de España –continuó– se habla mucho, pero de la nuestra que llegamos en los años 60 y principios de los 70 (La Generación de la Cazuela), así nos llamaban, esta emigración que llegó para mejorar su vida y la de sus familiares en España porque allí la cosa estaba muy difícil, de esto poco se habla”. La emigración que llega después de 1980 ya no es igual que la precedente, ya que se encuentran con asociaciones, con escuelas, con cursos de idiomas. Montse Pacheco contó la anécdota de una profesora suya de francés que no era capaz de pronunciar su nombre y le decía si no se podía llamar María como todas las españolas y explicó que acudió, “como miles de niños y niñas, a las clases de español ahora llamadas ALCES, salía de las clases de francés y dos veces por semana me iba a la asociación de mi barrio a las clases de español y gracias a estas clases pude obtener el bachillerato español y también el francés. Las ALCES son una riqueza increible que hay que seguir protegiendo y defendiendo y se lo debemos al movimiento asociativo, a vuestro trabajo, por eso este homenaje”.
