El consejero por Canadá también pide un acuerdo respecto a los permisos de conducir

Pablo Ruisánchez: “Hemos transmitido al embajador la necesidad de abrir un Consulado General en Vancouver”

La demarcación consular de Toronto cuenta por primera vez con un Consejo de Residentes Españoles (CRE) del que forma parte Pablo Ruisánchez Ortega, quien también representará al país en el Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior (CGCEE). En esta ocasión, Montreal no consiguió formar Consejo, pero “desde el nuevo CRE de Toronto queremos continuar con el buen trabajo llevado a cabo por el Consejo de Montreal desde su constitución en 1995”, asegura Ruisánchez.

Pablo Ruisánchez: “Hemos transmitido al embajador la necesidad de abrir un Consulado General en Vancouver”
Pablo Ruisánchez. CRE de Toronto
Pablo Ruisánchez, representante de Canadá en el CGCEE.

Los miembros del CRE no habían participado nunca en este órgano consultivo, pero “muchos hemos tenido experiencias previas en organizaciones de la sociedad civil, asociaciones o entidades sin ánimo de lucro”, explica el presidente, quien afirma que están “muy animados en dar lo mejor de nosotros mismos en beneficio de los emigrantes españoles en Canadá”.

Pregunta. ¿Qué motivos les llevaron a constituir el CRE?

Respuesta. Posiblemente, cada miembro y cada lista tenían motivaciones distintas a la hora de presentarse. En todo caso, a todos nos movió el llenar un espacio de representación ciudadana que había estado vacío por muchos años. Queremos ser una herramienta útil en la defensa de los derechos de la comunidad española en Canadá, así como un actor que contribuya en fomentar la creación de espacios de encuentro para la colectividad española.

P. ¿Cuáles son los objetivos de este Consejo?

R. Entre nuestros principales objetivos, se encuentran la mejora y la accesibilidad de los servicios consulares, así como la presentación de información de interés para la comunidad de una forma clara y unificada. En este sentido, hemos mostrado nuestro apoyo al plan de digitalización de los servicios consulares y hemos transmitido al embajador la necesidad de abrir un Consulado General en Vancouver. Ambas medidas contribuyen al acercamiento de los servicios consulares a la ciudadanía.

Como otros muchos CRE, una de nuestras principales demandas es la derogación del voto rogado. Hemos remitido un documento con propuestas a la Subcomisión del Congreso desde la perspectiva de nuestra demarcación. En este documento se recogen aspectos como la derogación del ruego del voto, la ampliación de plazos, tanto de envío de papeletas como de escrutinio del voto CERA, así como la apertura de mesas electorales en otras ciudades además de Toronto, debido a las enormes distancias geográficas de nuestra demarcación.

Por último, otro de nuestros objetivos principales es conseguir la firma de un tratado internacional entre Canadá y España para el reconocimiento del permiso de conducir. En la actualidad, los españoles que emigran a Canadá deben obtener un permiso de conducir canadiense a los pocos meses de llegar, realizando los oportunos exámenes. Con el canje de permisos en Canadá, como ocurre en el caso de otros países europeos como Alemania, Bélgica y Francia, no sería necesario examinarse de nuevo. Ya hemos transmitido esta demanda al embajador y buscaremos todas las vías posibles para conseguir un cambio sustancial para los nuevos emigrantes que vengan a Canadá.

P. ¿La baja participación en el proceso electoral (un 1,30% de los españoles en esta demarcación) cree que le resta legitimidad a la hora de representar a toda la comunidad?

R. En absoluto. Creo que las dos listas que se presentaron a las elecciones del CRE hicieron un gran trabajo que resultó en la constitución del primer CRE de nuestra demarcación. Hay que tener en cuenta que nuestra demarcación consular es una de las más grandes del mundo, cuya población española se encuentra repartida en un territorio de más de 7,9 millones de kilómetros cuadrados, que las elecciones se celebraron durante la pandemia, con restricciones y confinamientos, y que los consejos de residentes son los grandes desconocidos de la emigración española actual, en especial de una demarcación en donde nunca había habido un CRE. No obstante, no somos conformistas y esperamos que este sea el primero de muchos CRE en nuestra demarcación y que la participación aumente elección a elección.

P. ¿Qué medidas cree que se pueden tomar para contar con una participación más elevada?

R. Lo primero es darse a conocer. Hemos creado una página de Facebook (https://www.facebook.com/cre.torontocanada) en la que publicamos con asiduidad noticias que son de interés para la comunidad española en Canadá. Asimismo, ahora estamos trabajando en la creación de una página web (www.crecanada.ca), que sirva de punto de información y de contacto.

Queremos convertirnos en una herramienta útil para la comunidad y creemos que este trabajo constante contribuirá en el aumento de participación en futuras elecciones.

P. ¿Cuál es el perfil de la colectividad española en esta demarcación consular?

R. En Canadá, como en muchos otros países, se asentaron diferentes grupos de emigrantes españoles en las últimas décadas. Por ejemplo, hay muchas personas que vinieron en los años 60 y 70, para trabajar en Canadá y acabaron creando sus familias aquí. También hubo un importante flujo migratorio de jóvenes emigrantes con alta cualificación después de la crisis financiera de 2008, así como un buen número de expatriados de empresas españolas con proyectos en el país. Además, es reseñable, el importante número de ciudadanos españoles nacidos fuera de España, en especial, en América Latina, que emigran a Canadá.

Las principales ciudades canadienses cuentan con clubes o asociaciones de españoles. Sin embargo, desde el CRE observamos que la mayoría de estas organizaciones están teniendo dificultades en atraer a las nuevas oleadas de emigrantes o a las nuevas generaciones de españoles nacidos en Canadá. Una de las prioridades de este CRE es contribuir a fomentar las relaciones entre los distintos miembros de la comunidad española.

P. ¿Cuáles son las principales demandas de la colectividad?

R. La colectividad española demanda, sobre todo, la mejora de los servicios consulares y de otras oficinas españolas en Canadá. Asimismo, la ciudadanía española que vive lejos de la sede consular demanda tener acceso a los servicios consulares sin tener que desplazarse 4.500 kilómetros o costearse el precio de un vuelo y/o alojamiento en Toronto para poder realizar un trámite como la renovación del pasaporte.

Además, hay un interés creciente en la comunidad por tener acceso a cursos de español para descendientes de españoles. La oferta pública o subvencionada por el Estado español en nuestra demarcación consular es prácticamente nula. Sin embargo, muchos padres estarían interesados en que sus hijos tuvieran una educación continuada en español, que les ayudara a conocer sus raíces y aprender más sobre su cultura.

P. Canadá sólo cuenta con Aula de Lengua y Cultura Española (ALCE) en Montreal, ¿cree que la colectividad de Toronto podría estar interesada en tener un Aula de este tipo?

R. Como ya se indicó anteriormente, una de las prioridades de este CRE es conseguir que la enseñanza de español y de las otras lenguas cooficiales sea accesible a los descendientes de españoles en Canadá. Creemos que las aulas ALCE son un recurso educativo que podría satisfacer la creciente demanda de estudiantes de español, pero sabemos que la aprobación de nuevas aulas requiere un proceso burocrático lento y complejo. Por ello, no estamos cerrados a otras alternativas como ayudas al estudio, becas o creación de escuelas complementarias. En todo caso, al estar en una demarcación tan grande, el establecimiento de cursos presenciales debería estar repartido por todo el territorio de esta demarcación.

P. ¿Cómo es la relación del CRE con el consulado?

R. La relación entre el CRE y el consulado es cordial. Tenemos una línea de comunicación directa con el cónsul actual, Marcos Vega Gómez, así como con el nuevo embajador, Alfredo Martínez Serrano. Desde el CRE queremos seguir trabajando en esta relación, dado que somos conscientes de que ambas instituciones son fundamentales para conseguir beneficios para la comunidad española.

P.  ¿Desde la implantación del voto rogado es posible votar desde Canadá o en la mayoría de ocasiones es una tarea casi imposible?

R. Lo definiría como una tarea casi imposible. No solo porque existe un gran desconocimiento de cómo solicitar el voto, sino porque los plazos son cortos y, en muchas ocasiones, la documentación electoral no llega o llega fuera de plazo. Estamos expectantes ante las recientes noticias sobre la evolución de la tramitación de la proposición de ley en el Congreso. Estudiaremos al detalle el texto que surja tras las enmiendas presentadas para ver cómo se adecua a la realidad de la comunidad española en Canadá.