El Centro Asturiano de Mendoza celebra su 95º aniversario con unos festejos multitudinarios

El mes de noviembre siempre es una verdadera fiesta para los asturianos de Mendoza. Y noviembre de 2009 lo ha sido aún más porque la casa regional asturiana, una de las más dinámicas y veteranas de las 91 que existen repartidas por todo el mundo, celebró su 95º aniversario con unos festejos multitudinarios que congregaron a decenas de personas. Entre los alicientes, no faltaron la deliciosa gastronomía típica del Principado, la buena música y el afán de confraternizar unidos por la pasión hacia el Principado. Porque 95 años con tan buena salud no se cumplen todos los días.
El gran festejo de los 95 años de la casa regional argentina se realizó en las instalaciones del propio Centro Asturiano de Mendoza, donde estuvieron presentes destacados presidentes de los distintos centros españoles, además de una gran cantidad de socios y demás personas amantes de la cultura asturiana que quisieron celebrar tan destacada fecha.
El acto principal de las celebraciones en la casa regional consistió en un gran almuerzo asturiano, donde socios y amigos del Centro Asturiano de Mendoza disfrutaron de una exquisita comida y de grandes sorteos.
Además, como no podía ser de otra manera, ‘El Ruxideru’, el conjunto de baile y banda de gaitas del Centro, brindó un maravilloso espectáculo con la música tradicional como protagonista junto a ‘El Ruxiderín’, el grupo infantil asturiano, su hermano pequeño, que se llevó todos los aplausos del respetable por su destacada actuación.
Pero quizá el momento más especial y emotivo tuvo lugar cuando se entregaron las medallas de reconocimiento a aquellos asturianos o descendientes de asturianos que han mantenido y siguen mantiendo vivas las raíces asturianas en su familia.
Medallas entregadas por familiares
Esas medallas fueron entregadas por miembros de ‘El Ruxiderín’ a sus respectivos familiares. Así, Agustín, María Belén y Lucas Silva Quercetti le entregaron tan merecido galardón a sus abuelos María Elena Sánchez y Carlos Quercetti; Juan Martín y María Giualiana Trifiró Quinteros le dieron este reconocimiento a su bisabuela, Maruja Rodríguez; y Belén Robustelli Pérez Vega se lo entregó a su tía Sabrina Agüero, miembro de ‘El Ruxideru’ y nieta de Ángel Pérez Vega, el pintor de la Vendimia.
Por su parte, Josefina Castillo Suárez le dio la medalla a su bisabuela, Carmina de Suárez; Joaquín y Nicolás Manescau le entregaron este reconocimiento a sus abuelos María Isabel Sánchez y Manuel Noval (ex presidente), y, al finalizar, Manuel Manescau le entregó a su abuelo Manuel Manescau la medalla, una entrega muy especial porque ellos son descendientes de españoles y asturianos por opción, lo cual tiene una carga simbólica añadida.
Y después de tanta emoción, continuaron los festejos y comenzó el esperado baile, donde todos los asistentes disfrutaron no sólo de música española, sino los temas del momento.
Este encuentro estuvo inundado de anécdotas, recuerdos, exquisita gastronomía y música para el deleite, lo que hizo de esa tarde un momento inolvidable en el que todos se sintieron como en Asturias.