El secretario xeral de Emigración analiza la situación actual de la diáspora gallega

Antonio Rodríguez Miranda: “El medio millón de votantes del CERA muestra la fortaleza e importancia de la Galicia exterior”

Los gallegos están llamados a las urnas el próximo 18 de febrero y el resultado depende también de los que residen en el exterior, que superan la cifra de los 476.000. El dato, según el secretario xeral de Emigración, Antonio Rodríguez Miranda, es significativo de la “fortaleza e importancia de la Galicia del exterior” en el futuro de una comunidad autónoma que vela por la situación de los más necesitados y diseña programas pioneros para facilitarles el retorno. La cita de febrero es la primera en la que pueden concurrir a unas ‘gallegas’ tras la derogación del voto rogado.

Antonio Rodríguez Miranda: “El medio millón de votantes del CERA muestra la fortaleza e importancia de la Galicia exterior”
7.Entrevista Miranda 1
Antonio Rodríguez Miranda lleva desde 2011 al frente de las políticas de Emigración de la Xunta.

Pregunta. Los gallegos en el exterior están llamados a las urnas el próximo 18 de febrero para participar en las elecciones autonómicas y, en esta ocasión, sin necesidad de rogar el voto. ¿Cabe por ello esperar que se produzca un incremento en la participación?

Respuesta. Sin ninguna duda. La eliminación del voto rogado era una demanda histórica que hemos defendido siempre para que los gallegos del exterior pudiesen, realmente, ejercer un derecho fundamental como es el del voto. 

Hoy puedo decir con orgullo que hemos sido impulsores y partícipes de un cambio que ya está mostrando muchos mejores resultados. Basta con ver las generales de julio, donde la participación de los residentes en el extranjero creció de modo exponencial gracias al nuevo sistema. 

P. En las autonómicas de 2020, el recuento del voto rogado concedió al PP un diputado más con respecto a los que obtuvo en la noche electoral. ¿Puede que la formación de gobierno en Galicia llegue a estar en manos de los que residen fuera?

R. Casi medio millón de personas del exterior pueden votar el próximo 18 de febrero. En concreto, 476.514 personas integran el Censo Electoral de Residentes Ausentes (CERA). Esta cifra supone una parte muy importante de ciudadanos con derecho al voto en los próximos comicios, y es una muestra más de la fortaleza y de la importancia de esa Galicia exterior que tanto nos ha dado y a la que tanto cariño tenemos, pues han sabido llevar por todo el mundo las bondades de nuestra tierra.

El futuro de Galicia está en manos de todos los gallegos, los que residen en Galicia y también los que residen en el exterior.

Es cierto que el voto exterior se cuenta una semana más tarde y por ello si el resultado electoral queda muy ajustado el domingo 18 por la noche, al contar el voto exterior podría variar el reparto de algún escaño, pero del mismo modo que lo haría si los votos de la ciudad de Ourense o de Santiago se contaran días después.

P. Como responsable del departamento de Emigración de la Xunta, ¿qué le sugiere el hecho de que Galicia marque la pauta en políticas destinadas a los emigrantes y de que el presupuesto de que dispone para paliar sus necesidades esté muy por encima del de las restantes comunidades autónomas?

R. Es la muestra más evidente posible de la importancia y el peso de esa Galicia exterior. Decía Neira Vilas que sin el relato de la diáspora nuestra historia estaría coja. Y así es. Nuestra emigración es una parte fundamental de lo que somos; y el peso y la importancia de la Galicia exterior suponen, en cierta medida, un reconocimiento a lo que fue, lo que es, y lo que quiere ser nuestra tierra. Porque los más de 500.000 gallegos que viven en el exterior representan la mejor muestra posible de constancia, dedicación y voluntad para prosperar, y un claro ejemplo de integración en un mundo global que, con sus facilidades de comunicación y movimiento, ofrece hoy, en la tercera década del siglo XXI, un reto y una oportunidad que se sustentan sobre la base de esa misma emigración: el retorno.  

Para acompañarlos en todo ese camino, este año el presupuesto para la Secretaría Xeral de Emigración asciende a casi 21 millones de euros, lo que supone un incremento de cerca del 10% y, efectivamente, es el más representativo de toda España, incluso per cápita solo en la última legislatura hemos aumentado el presupuesto en más de un 60%.

P. La Estratexia Galicia Retorna está siendo imitada por otros gobiernos autonómicos e incluso la consejera de Acción Exterior de Cataluña anunció recientemente la implantación de la Estrategia Catalunya Exterior. ¿Encontró la Xunta en su Estratexia la 'piedra angular' para favorecer la vuelta a casa de los que se encuentran en el extranjero?

R. La Estratexia Galicia Retorna es la culminación de un esfuerzo conjunto que se sustenta en lo que hablábamos: en situar a la Galicia exterior en el lugar que realmente le corresponde y en ofrecerle algo que es de justicia, la posibilidad de volver a casa. 

Porque efectivamente el retorno tiene, en primer lugar, una base legal, sustentada, entre otras normas por nuestra Constitución española, y por el propio Estatuto de Autonomía de Galicia, que confiere a las personas gallegas de la diáspora ese derecho. 

Pero la apuesta por el retorno va más allá y atiende, hoy en día a la necesidad de encontrar soluciones al reto demográfico que tenemos por delante, porque a nadie se le escapa que Galicia, como el resto de occidente, viene experimentando en las últimas décadas un importante proceso de transformación social. 

Además, el retorno posibilita también la mejora tanto de la competitividad y productividad del tejido empresarial como de las condiciones laborales y la calidad de vida de nuestra tierra. 

La Galicia de la emigración del siglo XX hace posible la Galicia del retorno del XXI porque hemos mantenido los vínculos con los gallegos del exterior y, por ello, hoy la Galicia próspera que hemos construido entre todos los puede acoger y quiere hacerlo.

P. Alrededor de 28.000 personas retornaron a Galicia al amparo de la primera Estratexia Galicia Retorna. Solo en 2022 volvieron a su comunidad de origen en torno a 8.000. ¿Cómo está resultando la experiencia para los que se acogieron a la propuesta?

R. Sinceramente, muy gratificante. Por suerte, la inmensa mayoría de retornados a los que tengo la suerte de tratar me transmiten un enorme agradecimiento. 

Pero es un agradecimiento que va mucho más allá de la ayuda que algunos hayan podido recibir para volver a casa, y que se hace extensible al hecho de volver; es decir, a la posibilidad de descubrir o redescubrir su tierra o la tierra de sus antepasados, de vivir Galicia con todo lo que esto significa –con nuestra cultura, nuestra lengua, nuestra gastronomía, nuestra forma de ser gallegos–, de ofrecerles, en definitiva, una oportunidad en un marco inigualable de estabilidad económica, seguridad y calidad de vida en el que puedan impulsar sus proyectos personales y profesionales. 

Sin duda el acompañamiento que se le ofrece en el proceso de retorno resulta fundamental para facilitar la integración en Galicia.

P. La segunda Estratexia duplica las medidas y el presupuesto de la anterior. ¿Qué balance hace de ella después de su primer año en funcionamiento?

R. Esta segunda Estratexia nos permite reforzar la apuesta por el retorno sobre la experiencia acumulada durante los seis años de desarrollo de la anterior. Un período durante el que se han cumplido con creces los objetivos previstos, facilitando la vuelta a casa de más de 28.000 personas gallegas a través de distintas acciones que han permitido crear y consolidar un ecosistema propio del retorno.

Para mejorar estos resultados, la nueva Estratexia suma 50 millones de euros en medidas específicas, y otros 400 millones en transversales, entre todos los departamentos autonómicos, para facilitar la vuelta a casa de otros 30.000 gallegos, más del 60% menores de 45 años. 

Hasta ahora, hemos desarrollado distintos programas de actuación, como las becas BEME, de la que acabamos de poner en marcha la octava convocatoria y que nos permitirá traer a Galicia a otros 250 profesionales universitarios; o el programa de retorno emprendedor, para el que destinamos un millón de euros con ayudas de hasta 10.000 euros para facilitar la puesta en marcha de nuevos negocios. 

Y todo ello sin olvidar otro tipo de ayudas que seguimos impulsando y facilitan la vuelta a casa, como la tarjeta Benvida para los retornados con hijos pequeños; o las ayudas extraordinarias para gastos de retorno, con un máximo de 6.000 euros para atender las necesidades de las personas que han regresado y necesitan un respaldo económico en los primeros momentos. Solo en 2023 hemos ayudado a 900 familias, cerca de 4.000 en esta legislatura.

P. Tras la pandemia, su departamento ha recuperado los programas que permiten a los gallegos del exterior un contacto directo con la realidad cultural y social de Galicia. ¿Cómo está respondiendo la colectividad a la reactivación de estas iniciativas?

R.Siempre hemos tenido claro que nuestros centros representan la esencia de la galleguidad, y que nuestra labor consiste en estar a su lado, acompañándolos en todo aquello que puedan necesitar. Unas necesidades que, durante la pandemia, fueron absolutamente distintas. 

Durante este período, las entidades y casas gallegas repartidas por el mundo fueron ejemplo de humanidad, de compromiso con los más necesitados, y de capacidad de servicio: garantizando, en primer lugar, su pervivencia, y siendo capaces de readaptarse al escenario que les había tocado vivir. 

Hoy nuestros centros han retomado su actividad, no en el mismo lugar que la dejaron, sino en una situación mejor gracias a su esfuerzo y perseverancia. Y se han vuelto a sumar, como antes de la pandemia, a las Escolas Abertas, a los Obradoiros, y nuestros jóvenes o mayores han venido a disfrutar de su tierra con Reencontros o los Conecta con Galicia, que actualizamos a ese Conecta co Camiño para disfrutar de la experiencia xacobea o del voluntariado.

Todas estas iniciativas nos permiten acercar la Galicia territorial a esa otra Galicia exterior, poblada por miles de descendientes de gallegos que mantienen firme el vínculo con nuestra tierra.

Solo durante 2023 han participado más de 400 personas en algún programa.

P. Teniendo en cuenta la importancia que en Galicia van adquiriendo las políticas orientadas a los emigrantes y retornados, ¿sería posible que el departamento que se ocupa de estas cuestiones vuelva a adquirir el rango de consellería?

R. No creo, sinceramente, que eso sea decisivo. Lo que de verdad importa es atender de modo íntegro y completo las necesidades y demandas de nuestra colectividad, para facilitar, en la medida de lo posible, tanto su vida en los países de destino, como el regreso a casa en los casos en los que quieren retornar. Y ahí, Galicia, está cumpliendo, y eso es algo que me llena de inmenso orgullo. 

Cada año subimos los presupuestos de la Secretaría Xeral, que este año ascienden a casi 21 millones de euros, lo que supone casi duplicar los recursos en la legislatura. Un incremento que refleja, más allá de la organización administrativa, el compromiso continuo de la Xunta de Galicia con los emigrantes y sus comunidades gallegas en el exterior.

Eso es reflejo del compromiso de nuestro presidente. Qué más pueden pedir los gallegos del exterior que quién se ocupa directamente de ellos es el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda.

P. Después de 11 años en el cargo, ¿se ve nuevamente al frente del departamento de Emigración de la Xunta si el PP vuelve a ganar las elecciones gallegas?

R. Yo me veo trabajando por nuestra Galicia exterior hasta el último día que esté en este cargo, tal y como he hecho hasta hoy y en cualquier otra responsabilidad política que pueda tener en el futuro. Le puedo asegurar que cada uno de estos años he sido absolutamente feliz, contrayendo una deuda de gratitud con los gallegos y gallegas del exterior que nunca podré saldar. 

Como responsable político mi cargo se renueva cada jueves, y cada semana por tanto renuevo mi compromiso siempre a disposición de lo que nuestro presidente considere más adecuado para trabajar por los gallegos del exterior.

“Me gustaría que la nueva ministra cambiara el relato de las casi nulas políticas de emigración de Sánchez”

La continuidad de Pedro Sánchez al frente del Ejecutivo tras el 23-J introdujo caras nuevas en el equipo de Gobierno. En lo que respecta a las políticas migratorias, el presidente decidió prescindir de José Luis Escrivá al frente del ministerio y puso en su lugar a Elma Saiz. 

P. ¿Qué espera de la nueva ministra en lo que a las medidas de emigración y retorno se refiere? 

R. Me gustaría esperar lo mejor por el bien de todos los españoles que residen en el exterior. Pero atendiendo a las prácticamente nulas políticas de emigración impulsadas por el Ejecutivo de Pedro Sánchez durante los últimos cinco años, tengo pocas esperanzas.

Le voy a dar un dato: el año pasado, mientras que el Ministerio de Inclusión subió su presupuesto un 13%, y la Secretaría de Estado más de un 28%, la parte de emigración subió cero. Me gustaría que la nueva ministra pudiese cambiar este relato, pero, observando la trayectoria política del actual Gobierno, no sé si tendrá capacidad de maniobra.  

P. El Gobierno y los consejeros generales trabajan en un nuevo reglamento de españoles en el exterior. ¿Le han pedido consejo en alguno de los asuntos que aborda? ¿Qué aportaciones le gustaría realizar al mismo?

R. En el último pleno del Consejo General de la Emigración abordamos este reglamento, que el propio ministro Escrivá calificó de “denso”. 

Creo que el reglamento aborda cuestiones de interés general, como las ayudas sociales a emigrantes que estén atravesando situaciones de especial dificultad, o la mejora de las condiciones en que España acoge a los retornados. 

Estos son aspectos en los que el Gobierno gallego lleva años trabajando. Por ejemplo, sólo en la última legislatura destinamos más de 13 millones de euros a ayudas económicas individuales de carácter social, llegando a más de 7.000 familias gallegas cada año, especialmente afectadas por las dificultades de esta época. 

Y sobre el retorno, como le comentaba antes, tenemos en marcha una nueva Estratexia Retorna que nos permitirá traer de vuelta a casa a más de 30.000 gallegos en los próximos tres años. Por ello estoy convencido de la importancia de estas cuestiones. Pero más allá de un reglamento, lo que hace falta son soluciones, aplicaciones prácticas, programas e iniciativas que permitan materializar sobre las personas las previsiones de la norma.

“La creación de una circunscripción propia requiere reformas constitucionales y este no es el momento propicio para hacerlas”

El Pleno del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior, celebrado en Oviedo a mediados del pasado mes de noviembre, se reafirmó en su reivindicación de reclamar, entre otros asuntos, una circunscripción propia para los residentes en el extranjero.

P. ¿Cree factible la propuesta de los consejeros?

R. La creación de una circunscripción propia requiere, en primer lugar, reformas constitucionales. Creo que el ambiente político no es propicio para una reforma constitucional cuando están dirigiendo las decisiones del Gobierno de España quienes pretenden romper la unidad en torno a nuestra Constitución española.

Centrémonos en lo importante y posible en este momento que es atender las necesidades de los españoles del exterior, y en eso, por parte del Gobierno del Estado, hay mucho que mejorar.

P. De todas las conclusiones a las que se llegó en ese Pleno, ¿cuáles considera las más importantes o a las que se debe dar mayor prioridad? 

R. Durante la reunión de Oviedo pudimos abordar numerosos temas de interés que atienden a las demandas de los residentes en el exterior.

La recuperación de la nacionalidad, la asistencia jurídica a las víctimas de violencia de género o el desarrollo de un plan de retorno integral, iniciativas para atender situaciones de necesidad, en especial de los mayores, o la recuperación de los programas para ayudar a los centros españoles fueron algunas de las cuestiones con mayor proyección. Pero también la escasez acuciante de medios que produce un deficiente funcionamiento del servicio exterior en la atención a los españoles con tiempos insufribles y dilaciones de años en la resolución de homologaciones de títulos universitarios extranjeros por parte del Estado.

“Los que residen fuera saben que Feijóo, como Rueda, conocen y se preocupan por sus problemas”

El resultado de las elecciones generales del pasado 23-J supuso un traspiés para el PP y también para las aspiraciones de llegar a La Moncloa de su líder, Alberto Núñez Feijóo. 

P. Como responsable de Emigración de la Xunta, ¿cómo encajó ese resultado electoral?

R. Alberto Núñez Feijóo ganó las elecciones el pasado 23 de julio. Y no sólo eso, en apenas 15 meses al frente del Partido Popular, obtuvo 47 escaños más que en las anteriores generales, incrementando en tres millones el número de votantes hasta superar los 8 millones de votos, una cifra que ningún candidato ha alcanzado desde que en el 2015 se multiplicaron los actores políticos en nuestro país.

Sobre esta base, la sensación es agridulce, pero estamos convencidos de que desde el trabajo, el respeto constitucional y la defensa de la libertad conseguiremos seguir aumentando esa base amplísima de españoles que creen en el proyecto político de Alberto Núñez Feijóo. 

Además, el PP ganó las elecciones entre los españoles del exterior y en el caso de Galicia tuvo un apoyo superior al 50% de los electores.

Los ciudadanos del exterior saben que Feijóo conoce la España exterior y siempre ha sido su preocupación. Lo mismo ocurre con el presidente Rueda que vive la realidad de los gallegos del exterior acompañándolos, visitando cada país. Solo en el último año ha estado en los países que acogen al 80% de los gallegos del mundo.

P. Si el PP hubiera tenido el respaldo suficiente para gobernar tras esos comicios, usted parecía el político mejor posicionado para llevar las riendas de los asuntos relacionados con la emigración y el retorno. ¿Qué medidas le hubiera gustado adoptar?

R. Nunca me ha gustado hacer suposiciones. La realidad es que sigo al frente de la Secretaría de Emigración, en donde he sido y soy muy feliz, y en donde llevo más de una década pudiendo trabajar para toda esa Galicia exterior, disfrutando del calor, del afecto y de la amistad de decenas de miles de gallegos que residen por todo el mundo y a los que nunca podré devolverles tanto cariño.

Y, como el primer día, trabajamos con cercanía, pero intensamente para desarrollar las medidas necesarias para un mejor bienestar de los gallegos del exterior en cada momento.

Galicia es pionera en sus políticas de cara a los ciudadanos del exterior, y esas son las adecuadas para ayudar a todos los españoles, porque son específicas, responden a sus necesidades y ya sabemos que funcionan.