Homenaje en Gernika a ocho mujeres valientes que emigraron a Australia a principios de los años 60
Se llaman Norberta, Mercedes, Basi, Amparo, Simo, Edelmira, Milagros y Nieves. Son ocho mujeres valientes que emigraron a Australia a principios de los años 60 del pasado siglo. Lo ha recordado Gorka Álvarez Aranburu, director del Gobierno Vasco para la Comunidad Vasca en el Exterior, en su alocución a estas homenajeadas y sus familias, en compañía de las autoridades vascas y españolas presentes en el homenaje que se les ha rendido en Gernika.
Estas ocho mujeres de gran arrojo son las representantes de las más de 700 ciudadanas españolas jóvenes (entre ellas un grupo mayoritario de vascas) que emigraron a Australia en 13 vuelos, para trabajar como empleadas en el servicio doméstico. La operación se denominó ‘Plan Marta’, se llevó a cabo entre 1960 y 1963 y era producto de un acuerdo entre el gobierno franquista de España y el de Australia.
Pero, como ha señalado Gorka Álvarez Aramburu, “el plan tenía truco”: El objetivo real era que esas mujeres jóvenes, católicas, hacendosas y de comportamiento intachable se emparejasen y formaran familias con los ciudadanos españoles (la mayoría de ellos también vascos) asentados en Australia desde unos años antes para trabajar en los campos de caña de azúcar (la ola más fuerte de emigración española masculina a Australia fue entre 1956 y 1959. El Gobierno franquista buscaba bajar el paro y obtener divisas, el gobierno australiano de entonces buscaba mano de obra acostumbrada a “trabajar duro” y poblar el país con gente blanca).
Huyendo de una realidad asfixiante
Álvarez Aranburu ha traído a colación el recientemente celebrado 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, reconociendo la labor de estas precursoras, y recordando que algunas de ellas “huían de una realidad que les oprimía como mujeres y no les dejaba vivir libremente”, ha indicado.
El director para la Comunidad Vasca en el Exterior ha explicado asimismo las principales claves de este fenómeno migratorio vasco a Australia, consistente en que hace unos 60 años en torno a 2.500 vascos y vascas (procedentes sobre todo de las comarcas de Busturialdea y Lea-Artibai, en el entorno de Gernika) llegaron en varias oleadas al estado australiano de Queensland, a las plantaciones próximas a la ciudad de Townsville, para trabajar en las explotaciones agrícolas de caña de azúcar y tabaco. Pasado algún tiempo fueron estableciéndose también en Melbourne y Sídney. Precisamente estas tres ciudades australianas han participado en el homenaje.
Rescatar estas historias del silencio
Gorka Álvarez Aranburu ha alabado el trabajo, para “rescatar esta historia del silencio, que es el peor enemigo de la memoria”, de la donostiarra Natalia Ortiz. Residente en Sídney desde hace 28 años Natalia Ortiz (cuya tesis doctoral fue sobre emigración española y su retorno) ha recuperado esta historia, de la que solo hay testimonios orales de personas cada vez mayores (como estas ocho mujeres) en el documental titulado ‘El avión de las novias’ y trabaja ya en un libro al respecto. Para este libro ha recopilado hasta ahora más de un centenar de testimonios, de los cuales en torno a un 60% son de mujeres de Bizkaia, Gipuzkoa y Nafarroa. Para ello cuenta con la colaboración de Euskal Australiar Elkartea, la asociación de personas retornadas de Australia.
El propio Gobierno Vasco, ha revelado Gorka Álvarez Aranburu, está trabajando con la Asociación Euskal Australiar Elkartea en un proyecto para recuperar la memoria de los emigrantes vascos a Australia, mediante la realización de entrevistas que se depositarán en el Archivo de la Diáspora Vasca.
