La sociedad ‘A Nosa Galiza’ celebra el II Encuentro Europeo del Folclore Gallego

La sociedad gallega ‘A Nosa Galiza’, de Ginebra, celebró hace escasos días el ‘II Encuentro Folclórico en la Diáspora y para la Diáspora’. El grupo de jóvenes de la Sociedad fue el responsable de la exitosa organización y celebración del evento. Al igual que el año anterior, fueron invitados diversos grupos de Europa y Suiza pudiendo así participar, y no en su totalidad, ‘O Feitizo de Berna’; ‘Follas Novas’, de Frankfurt’; y el grupo anfitrión, ‘A Nosa Galiza’, de Ginebra, al completo. Isaac Rodríguez fue el responsable de la presentación del evento.
El conductor de este acto agradeció el interés por compartir en la diáspora unos momentos de fiesta y de fraternidad. Asimismo, destacó el esfuerzo realizado por los diferentes grupos tanto por su trabajo como para poder asistir al evento. Isaac Rodríguez también subrayó la presencia del Centro Gallego de Frankfurt y añadió la experiencia vivida en un viaje a Holanda de lo que solamente encontró como aspecto negativo la larga distancia.
En lo que se refiere a los grupos participantes en este encuentro, ‘O Feitizo’, de Berna, es un grupo numeroso y, aunque no pudieron asistir todos, los mejores sí estuvieron y ofrecieron al público un amplio repertorio de sus canciones y bailes tradicionales, aunque sorprendieron con gasopea, un baile de gran dificultad por sus extremos cambios de ritmo y para el cual llevaban un mes ensayando con intensidad.
El numeroso grupo anfitrión, ‘A Nosa Galiza’, deleitó a los asistentes con un variado abanico de modalidades de baile y cantareiras tradicionales, utilizando vestimentas adecuadas a cada situación como los típicos zuecos de madera o las ropas de aguas tan necesarias en el equipaje de todo marinero.
Son muchos miembros los que componen el grupo de Ginebra, pero entre todos ellos cabe destacar la figura de un joven bailarín, Daniel Loreiro Rodríguez, que con sólo diez años y cuatro de experiencia en el mundo del baile tradicional sorprendió por su seguridad, desparpajo y salero. Este niño, nacido en la emigración y cuyas aficiones son, además de bailar, jugar al tenis y los animales, explicó que había entrado en el grupo por vocación propia y que seguirá bailando hasta que “se muera”.
Mientras, el grupo ‘Follas Novas’, de Frankfurt, participó con cansancio por el largo camino recorrido, con diversas dificultades por falta de miembros del grupo, debido a sus lesiones pero, con ilusión y el buen humor que les caracteriza en cada actuación, permitiéndose incluso, con unas simples botellas, latas y cucharas componer un rap.
Todos los grupos ofrecieron lo que mejor saben hacer para expandir la cultura gallega en el exterior y el numeroso y participativo público asistente al evento estuvo en todo momento aplaudiendo al son de la música, bailando y cantando.
La sociedad ofreció, a su vez, una cena de fraternidad en la que jóvenes y no tan jóvenes disfrutaron de una noche tan especial con el fin común de fomentar la cultura gallega en todo su ámbito.
El grupo ‘Leilía’ puso el broche final ofreciendo un repaso a las viejas raíces con el fin de acercarlas a nuestros días utilizando viejos y populares cantares, así como dichos recogidos por las aldeas de Galicia e instrumentos tan básicos e inesperados como unas simples cucharas, un bote de pimentón, unos tradicionales sachos de labranza o incluso una antigua ‘tixola’ (sartán). Asimismo, agradeció el esfuerzo e interés que los gallegos realizaban en la emigración y reconoció que había que aprender mucho de todos ellos porque, en muchas ocasiones, los que estaban en Galicia no valoraban la riqueza de una tierra tan fértil.