José Manuel González y Lino Durán califican el programa de ‘Reencontros’ como “sensacional” y “excelente”

Desde Brasil llegaron José Manuel González Martínez, conocido como Pablito, y Lino Durán Durán para participar en esta edición de ‘Reencontros con Galicia’, un programa que califican de “sensacional” y “excelente” porque, aunque ellos vienen en la modalidad de pago, “da la posibilidad de viajar a los menos favorecidos”.

José Manuel González y Lino Durán califican el programa de ‘Reencontros’ como “sensacional” y “excelente”
Brasil. Lino Durán y Pablito 2
Lino Durán y José Manuel González, Pablito, durante su estancia en Galicia.

Los dos están muy implicados en las instituciones de la colectividad. Lino Durán fue dos veces director social de la Casa de España de Río de Janeiro. Pablito, por su parte, fue dos veces secretario de la Casa de España de Río de Janeiro y cuando se fue a Niteroi fue presidente del Club Español de esta ciudad. Hay que recordar que en ambas instituciones más del 90% de los socios son gallegos.

Para Lino Durán, el programa ‘Reencontros’ “es sensacional porque la da la oportunidad a los gallegos que estamos en el exterior de venir a Galicia para ver cómo fue su desarrollo y su evolución”.

Pablito apunta en esta línea y añade que “este programa de la Xunta es muy interesante porque permite que las personas celebren su pasado. Es muy importante llegar y poder ver dónde vivían tus abuelos”.

Lino Durán

Este pontevedrés se fue a Brasil en 1962, con 16 años, para reunirse con su padre que había emigrado 11 años antes. “Nosotros vivíamos en Aguasantas, una parroquia del ayuntamiento pontevedrés de Cotobade”, pero “mi padre resolvió llevar a la familia toda para Brasil porque aquí había muchas dificultades”.

En todos estos años pudo venir en algunas ocasiones a España, pero no tiene previsto retornar definitivamente. “No tengo motivo para venir porque la familia toda vive allí”, asegura Lino Durán.

José Manuel González, Pablito

La historia de Pablito, el nombre con el que todo el mundo le conoce, es similar. Su padre se fue a Brasil en 1952 y cuando ya estuvo establecido le siguió el resto de la familia.

“Yo soñaba con ir a Brasil y finalmente nos fuimos en 1958, cuando yo tenía 14 años”, cuenta este gallego nacido en la aldea de Vilachán, en el ayuntamiento de Ponte Caldelas. Cuando llegó a Brasil su padre tenía restaurantes y él pudo estudiar. Se casó con una española y tiene dos hijos.

En el año 90 regresa a Galicia y se establece en Pontevedra con su familia, pero volvieron a Brasil en el 93. “Nos fuimos –explica– porque mis hijos no se adaptaron mucho a vivir aquí”, así que ahora no se plantea retornar.

Pablito explica que siempre estuvo vinculado a las instituciones de la colectividad y que como presidente del Club Español de Niteroi entre 2006 y 2016 tuvieron que hacer importantes cambios para recuperar la entidad. “Tenemos que agradecer a la Xunta de Galicia, especialmente a Antonio Rodríguez Miranda, que nos ayudó a salir de la crisis y ahora está completamente saneado y es un club muy bueno” que cuenta con numerosas instalaciones deportivas como tenis, gimnasio y piscinas.  

En cuanto a la situación de la Casa de España de Río de Janeiro explica que “está en buenas condiciones, tiene una directiva competente y está todo saneado”.

En todo caso, expresa la dificultad para mantener a las instituciones de la colectividad en el exterior. “Es muy difícil porque los costes son muy grandes y todo es muy caro”. Además, subraya, “cada día hay menos socios porque unos vienen de vuelta y otros mueren”.

En referencia a la implicación de los hijos y nietos reconoce que es baja porque “tienen su ambiente natural en otros sitios”, así que el futuro pasa porque “los gobiernos mantengan los lazos y ayuden para que aquellos pocos que están, continúen”, concluye.