Una entidad de principios del XX que llega al siglo XXI sumida en deudas
El 2 de mayo del año 1907, por iniciativa de un grupo de emigrantes gallegos residentes en la capital argentina, se creó el Centro Gallego de Buenos Aires que, con el tiempo, se convertiría en una de las instituciones de la emigración más emblemáticas. En junio de ese mismo año, en un local alquilado en la calle Estados Unidos nº 1056, se comenzaron a dictar clases nocturnas de alfabetización para adultos. Un mes más tarde, el 21 de julio, se aprobaron los estatutos y se eligió a Roque Ferreiro como primer presidente.
10 años más tarde, con los fondos obtenidos mediante una suscripción popular, se compró un inmueble en la calle Belgrano 2189.
Mientras avanza la construcción del nuevo edificio –planteada por etapas–, en 1934 el número de socios era ya de 48.000; un año más tarde la nómina societaria alcanzaba los 50.000 inscritos y en 1941, 70.000, de los que 41.000 eran españoles y 28.000 argentinos.
Al calor de la efervescencia cultural gallega que vivía la Argentina de la mano de intelectuales y artistas como Alfonso Castelao, Luis Seoane, Rafael Dieste y Ramón Otero Pedrayo, entre muchos otros, desde 1945, la institución sumó a sus objetivos la promoción y difusión de la cultura gallega.
Dentro de este nuevo perfil, entre los años 1957 y 1967, se celebraron las Jornadas gallegas que contaron con participación de reconocidas figuras como la actriz María Casares; el profesor Ángel Battistessa, designado presidente de la ‘Academia Argentina de Letras’; del doctor Albert Sabin, premio ‘Nobel de Medicina’ y de los escritores Álvaro Cunqueiro y Jorge Luis Borges, entre otros.
Capacidad para 370 pacientes
En la actualidad el sanatorio, ubicado ente las calles Belgrano y Pasco, ocupa 22.000 metros cuadrados, distribuidos en seis plantas y dos subsuelos. Tiene un sector de internación con capacidad para 370 pacientes, 8 quirófanos y 60 consultorios externos.
Ofrece servicios en clínica médica, hematología, alergia, cirugía cardiovascular, endocrinología, neumonología, neurocirugía, cardiología pediátrica, cirugía general, cirugía de mano, gastroenterología, ortopedia, psiquiatría y medicina nuclear, entre otras especialidades.
10 años más tarde, con los fondos obtenidos mediante una suscripción popular, se compró un inmueble en la calle Belgrano 2189.
Mientras avanza la construcción del nuevo edificio –planteada por etapas–, en 1934 el número de socios era ya de 48.000; un año más tarde la nómina societaria alcanzaba los 50.000 inscritos y en 1941, 70.000, de los que 41.000 eran españoles y 28.000 argentinos.
Al calor de la efervescencia cultural gallega que vivía la Argentina de la mano de intelectuales y artistas como Alfonso Castelao, Luis Seoane, Rafael Dieste y Ramón Otero Pedrayo, entre muchos otros, desde 1945, la institución sumó a sus objetivos la promoción y difusión de la cultura gallega.
Dentro de este nuevo perfil, entre los años 1957 y 1967, se celebraron las Jornadas gallegas que contaron con participación de reconocidas figuras como la actriz María Casares; el profesor Ángel Battistessa, designado presidente de la ‘Academia Argentina de Letras’; del doctor Albert Sabin, premio ‘Nobel de Medicina’ y de los escritores Álvaro Cunqueiro y Jorge Luis Borges, entre otros.
Capacidad para 370 pacientes
En la actualidad el sanatorio, ubicado ente las calles Belgrano y Pasco, ocupa 22.000 metros cuadrados, distribuidos en seis plantas y dos subsuelos. Tiene un sector de internación con capacidad para 370 pacientes, 8 quirófanos y 60 consultorios externos.
Ofrece servicios en clínica médica, hematología, alergia, cirugía cardiovascular, endocrinología, neumonología, neurocirugía, cardiología pediátrica, cirugía general, cirugía de mano, gastroenterología, ortopedia, psiquiatría y medicina nuclear, entre otras especialidades.