Carmen Cervantes: “Con el PP se homologarán más títulos y se fomentará la entrada de talento”

Pregunta. ¿Cuáles son los problemas que detectan en el colectivo inmigrante?
Respuesta. Van cambiando con el tiempo. Los que surgen en los cinco primeros años son distintos de los que se detectan cuando pasan 10 o 15. Los flujos también son distintos y coinciden con las fugas migratorias que se originan en otros países. La mayor cantidad de desplazados se registró en el año 2000 con la llegada de casi 900.000 personas (ecuatorianos y bolivarianos), y desde hace cinco años, debido a la implantación de regímenes totalitarios y cambios de gobierno en Latinoamérica, que han generalizado fugas desde Venezuela, Argentina, Colombia o Perú. El PP siempre ha trabajado mucho por los migrantes. Prueba de ello es que la gran regularización en España, y primera, se hizo en el gobierno de Aznar. Pero también hay proyectos sociales para el colectivo que han sido gestionados por el PP.
P. ¿Cómo resulta la integración de los distintos grupos de inmigrantes?
R. En España, la integración es mucho más fácil que en otros países de la UE. Además, es distinta para los procedentes de Hispanoamérica que para los que llegan de otras partes del mundo, porque nosotros tenemos el mismo idioma, el mismo Dios, la misma cultura, y porque realmente venimos de una misma raíz, un mismo tronco y nos unen muchas cosas. Con la gente de África nos une la música, el folclore, la comida, y luego están los asiáticos, que también tienen cabida aquí y se distribuyen por todo el territorio. En ese sentido, España no es como Francia, por ejemplo, donde la práctica ha sido excluirlos, creando nichos.Tanto es así que las segundas y terceras generaciones de inmigrantes no sienten que son franceses ni parisinos. Por el contrario, aquí se les integra y ellos se van distribuyendo por distintas ciudades y a nivel de toda España.
P. ¿Cómo se siente la persona que emigra?
R. El inmigrante sabe lo que significa luchar contra la burocracia, la adversidad, porque el que emigra mantiene a dos familias, la de su país de origen y la que crea en el lugar en el que se asienta. Nuestros hijos han nacido aquí; muchos han salido y luego han traído a los hijos por agrupación familiar, o a sus padres, con esfuerzo y sacrificio, y algunos, cuando las circunstancias han cambiado en sus países de origen, han decidido volver. Pero, en general, España da oportunidades para esa integración.
Qué duda cabe que los primeros años son los más difíciles, porque vienes con tus circunstancias: extrañas el clima, la comida, la familia, el paisaje. Esos son los primeros factores que afectan en los primeros años si la emigración es por elección, como es mi caso, y lo que más buscas es estabilidad económica, laboral y jurídica. Si emigras, porque te persiguen en tu país de origen y tienes que salir con lo puesto, como ha pasado en Nicaragua, Venezuela, Cuba o Bolivia, entonces hablamos de una migración forzada, que es todavía más difícil.
P. La inmigración se ha convertido en punta de lanza entre los partidos, que tiene visiones distintas sobre lo que se debe hacer al respecto. ¿Cuál es la posición del PP?
R. Los que lo hemos vivido sabemos que emigrar es duro, es de valientes. Lo perciben así también muchos que se van a estudiar a otro sitio, que también son emigrantes. Unos y otros saben de lo complicado y difícil que es integrarse, porque, cuando te vas, dejas tu país, tu tierra, a tus amigos y todos tus recuerdos. Ahora, por los escándalos y los casos de corrupción, España se encuentra en un punto complejo. Pero nosotros, en el PP, estamos aquí para que esa integración sea real, para que sea factible, humanizando realidades, y para que vayamos derribando muchos dogmas y no caigamos en populismos. Porque el populismo es como el humo, es efímero, te sirve para la pancarta o para vender, pero cuando necesitas gestión real, de éxito, y políticas que ayuden a integrar y a que la población siga adelante, el PP siempre ha estado ayudando a gestionarlo, y no solo con la pancarta, ni con el dogma, sino de manera real.
P. ¿Cómo se materializa esa ayuda real de la que habla?
R. Con gestión. Hay más de 100.000 expedientes en espera con profesionales que se encuentran en un limbo jurídico, y nosotros estamos trabajando y llevando en este momento al Congreso y a los departamentos correspondientes de las distintas autonomías planes para ellos. Porque en España, se necesitan médicos. Sanidad reconoce que hay 20.000 expedientes de médicos pendientes de resolución y 40.000 por tramitar, y si se hubieran tramitado con las garantías necesarias, no habría ningún problema. Lo que se necesita es que se ejecuten los expedientes, para que esos profesionales adquieran su código profesional y puedan trabajar. Esa es una parte de la gestión y eso es lo que estamos ahora reivindicando, junto con las asociaciones de profesionales.
P. ¿Se compromete el PP, si llega al poder, a agilizar la homologación de títulos en un plazo razonablemente corto?
R. Nosotros estamos trabajando en iniciativas que Feijóo conoce, que se han llevado al Senado y a las comunidades autónomas en las que gobernamos. Todos saben que en nuestro partido estamos comprometidos con el proceso de homologación de títulos, porque son expedientes que están ahí desde hace años. Con el PP, se homologarán títulos y se harán trámites para poder tener talento en España, porque el PP tiene equipos para poder hacerlo y agilizar todo lo necesario el proceso. Será complicado, porque hay muchos expedientes en espera, pero será de las primeras cosas que yo, como secretaria nacional de Migraciones, llevaré al equipo del presidente Feijóo.
P. Como inmigrante, ¿qué le parecen las políticas de Trump respecto a la inmigración?
R. Todo lo que hace Trump es consecuencia del populismo, de políticas de choque, de ataque. Estados Unidos se ha creado con migrantes, que son su motor. El país es grande por la unión de todos los que están ahí, incluso los llegados de fuera, que se sienten americanos, porque contribuyen al desarrollo de ese país norteamericano.
Los casos de gente con antecedentes penales por delitos de sangre, obviamente, deberán ser juzgados como cualquier otra persona, sea de ese país o no, pero en este momento, por parte de Trump,hay un proceso en el cual hay mucho de persecución del colectivo inmigrante.
Trump apuesta por el populismo, y su idea es sacar a todos los inmigrantes del país, porque se cree que esa es la solución. Y no, esa no es la solución, porque el problema es que en Estados Unidos necesitan de esas personas para cubrir diferentes tipos de oficios.
P. Algunos partidos ven la inmigración como un problema. Sin embargo, para el PP, parece más una solución.
R. Es una oportunidad y aprovecharla nos compete a nosotros, al PP, que apostamos por una migración ordenada, regularizada. Si estás en un momento irregular, administrativamente hablando, como ocurre actualmente en España, es muy difícil poder hacer esa regularización y la gente muy vulnerable corre el riesgo de caer en las mafias, la trata. Desde los países de origen hay que promover que la emigración sea legal, porque es muy difícil dirigir a las personas cuando se encuentran en un proceso de situación administrativa irregular.
P. ¿Cuál es la línea que separa la postura de Vox y la del PP a este respecto?
R. La postura de Vox es populista, la cual rechazo. En el PP somos responsables, porque somos un partido de gobierno real. En cambio, Vox no es una alternativa de gobierno y lo saben, y por eso venden humo y adoptan unas políticas que saben perfectamente que no se pueden aplicar. Pero nosotros hablamos con responsabilidad, porque somos la elección, y el colectivo del que hablamos sabe que lo que nosotros digamos lo vamos a cumplir.
Feijóo quiere llegar a esa mayoría de consenso para poder gobernar en solitario y tener estabilidad. Porque España necesita estabilidad y lo que está pasando con el Ejecutivo actual es que van decreciendo las instituciones al tiempo que crece la división. Ese emblema que se tenía antes de respeto hacia las instituciones se está perdiendo y es muy difícil volverlo a recuperar. Va a costar años, y nosotros, los inmigrantes, lo decimos con conocimiento de causa, porque también lo vivimos en nuestros países de origen. Lo vivimos con Rafael Correa en Ecuador, y sabemos lo que promueve el grupo Puebla, que es dividir. Zapatero y Sánchez son del grupo Puebla (Sánchez se reunió con ellos el pasado verano) y están poniendo en práctica aquí sus políticas de división y enfrentamiento entre los propios españoles: entre el bueno y el malo; el rico y el pobre; el inmigrante y el no inmigrante. Están llevando el manual aquí y, obviamente, partidos como Podemos son del grupo Puebla y no lo esconden. Los primeros que estuvieron en la toma de posesión de Maduro eran ellos, estaban allí, son sus socios, sus equipos, sabemos cómo son y, lamentablemente, eso es lo que están trayendo a España.
P. ¿Qué papel ha jugado la Secretaría Nacional de Migraciones en el reciente Congreso del Partido Popular?
R. El PP nos ha dado un espacio real para que se pueda visibilizar nuestro trabajo. Hemos tenido la oportunidad de poder invitar a gente, a asociaciones de residentes, de partidos políticos hermanos relacionados con las migraciones. Hemos fomentado la participación y visibilización de nuestro trabajo con un estand donde han estado representados nuestros delegados y secretarios autonómicos. Hemos estado con las autoridades. Hemos conversado y también hemos tenido un encuentro en la plaza de la Constitución, para que cada comunidad autónoma pudiera transmitir su mensaje y pudiera decir qué es lo que quiere hacer, para llevar a cabo un trabajo conjunto y coordinado. Hemos logrado también que se creen los consejos de nuevos españoles, para que estos tengan una participación permanente y activa en las decisiones y que cada colectivo tenga su voz en este consejo de migrantes, lo que, por otra parte, está dentro de los Estatutos del PP.