FINALIZARá EL 25 DE NOVIEMBRE CON UN DEBATE SOBRE LA SITUACIóN ACTUAL EN ESPAñA

La historia del Centro Cultural Español de Frankfurt, recogida en una exposición

La historia del Centro Cultural Español de Frankfurt, fundado en 1961 por emigrantes españoles, está documentada en una exposición que puede visitarse diariamente, a partir de las 18.00 h., en el Club Voltaire, un lugar de encuentro histórico en el centro de la ciudad, cerca de la vieja Ópera.

La historia del Centro Cultural Español de Frankfurt, recogida en una exposición
Una de las imágenes recogidas en la muestra.

La historia del Centro Cultural Español de Frankfurt, fundado en 1961 por emigrantes españoles, está documentada en una exposición que puede visitarse diariamente, a partir de las 18.00 h., en el Club Voltaire, un lugar de encuentro histórico en el centro de la ciudad, cerca de la vieja Ópera.

La exposición finaliza el próximo 25 de noviembre con un programa especial y forma parte del proyecto ‘Stadtteil Historiker’, iniciado por la fundación ‘Stiftung Politechnische Gesellschaft’ y acompañado científicamente por la fundación ‘Gerda Henkel Stiftung’. A través del proyecto, que cuenta con el apoyo de numerosas entidades locales, se facilita a ciudadanos interesados el investigar de forma voluntaria la historia de personas, familias, empresas o instituciones de los barrios de Frankfurt, con el fin de mantener o recuperar su memoria para la posteridad.  

Una historia poco documentada

Lourdes Guerra, española, y Lála de Brito, portuguesa, que se habían conocido trabajando en una antología de textos biográficos de inmigrantes en Frankfurt, viendo que la inmigración no estaba representada en ninguna de las actividades realizadas hasta entonces en el marco proyecto ‘Stadtteil Historiker’, decidieron aprovechar la oportunidad que éste ofrecía para recuperar, por su importancia, la historia del Centro Cultural Español (CCE), con el que sobre todo Lála de Brito había estado muy relacionada y sobre el que apenas existía documentación. Lourdes Guerra fue quien presentó la idea a concurso y solicitó participar con ella en el proyecto. Su propuesta tuvo buena acogida y en enero de 2011 pudo comenzar con el trabajo de investigación, en colaboración con Lála de Brito, coautora de la documentación. Ambas realizaron entrevistas, visitaron archivos, bibliotecas y museos, consultaron registros y cuantos documentos encontraron a su alcance.

En un principio, ambas habían pensado en hacer una publicación sobre esa institución histórica, donde se habían forjado las primeras manifestaciones de los españoles en Alemania en contra de la Dictadura franquista, pero “muy pronto nos dimos cuenta de que no sería posible, porque no había cómo financiarla”, dice Lála de Brito.

Recabando información, vieron que tampoco en el Museo de Migraciones de Colonia (DOMIT) había más que una tesina que trataba en cinco páginas la historia del CCE,  entonces decidieron mostrar los resultados de su trabajo en una exposición, como la forma más viable de darlo a conocer al público. 

La apertura de la exposición

La exposición, que lleva por título ‘Solidarität war Verpflichtung’ (La solidaridad era un deber), consta de varios capítulos, en cada uno de los cuales se reflejan los diferentes ámbitos del trabajo del CCE, desde su fundación hasta 2006, momento en que, aún sin disolverse la asociación, cesaron sus actividades.  La exposición se inauguraba el pasado 2 de noviembre con numerosa asistencia, “la mayoría eran emigrantes de la primera generación, pero me sorprendió que también había muchos jóvenes”, dice Lála de Brito. Entre los asistentes se encontraba el veterano del Club Voltaire, Heiner Halberstadt, un alemán testigo de las actividades del CCE, que fuera presidente del Club en los tiempos en que la asociación española tenía allí su centro de reuniones. Él fue quien pronunció el discurso de apertura. Tras él, las autoras de la documentación dirigieron también unas palabras a los asistentes.  

Primeros dirigentes

El primer capítulo de la exposición trata de los comienzos del Centro Cultural Español. La idea de fundar una asociación de españoles en Frankfurt se habría gestado en un bar del barrio de Rödelheim, en febrero de 1961. Jesús Arufe, un republicano gallego exiliado desde 1939, que trabajaba en la fábrica de máquinas de escribir Torpedo, fue quien presentó a sus colegas españoles el proyecto. En mayo de ese mismo año, veinte de ellos se reunían en un local sindical para discutir los pormenores de la fundación, que tuvo lugar unos meses más tarde, aunque no se registraría oficialmente hasta septiembre de 1966.

Para sus reuniones, la nueva asociación pudo conseguir, a través del Sindicato del Metal, un local  en las instalaciones del entonces centro de formación de adultos, ‘Volksbildungsheim’, que pronto tuvieron que abandonar, encontrando acogida en el Club Voltaire. El primer presidente de la asociación fue Jesús Arufe, un nombramiento honorario en reconocimiento a sus méritos, aunque el primer presidente elegido democráticamente, según la documentación existente, fue el activista sindical e histórico defensor de los derechos de los emigrantes españoles en Europa, Leónides Montero, fallecido el pasado año. 

El asociacionismo y las mujeres

Otro capítulo de la historia del CCE va dedicado al trabajo de la mujer dentro de la asociación, del cual no se tiene noticia clara en sus comienzos. Aunque a las mujeres se les suele relacionar con el trabajo logístico de la asociación, se sabe que también participaban en actividades formativas y culturales, entre las que el teatro tenía un lugar preferente. Algunas de ellas organizaron, en colaboración con mujeres portuguesas y alemanas, un grupo de teatro con el que llevaban a escena pequeñas obras y ‘Sketche’ con títulos como ‘Eva fuera del Paraíso’, en las que reflejaban su situación en las asociaciones o en la sociedad. A pesar de ser una organización progresiva, la participación de la mujer en los puestos directivos fue escasa. En 1966, cuando se registró oficialmente el CCE, sólo había una mujer en la Directiva. Fue a partir de 1971 cuando se constata, a través del registro de sociedades, una mayor participación de la mujer en puestos de responsabilidad, aunque la participación de ambos sexos no era igualitaria. 

Cultura Obrera

La documentación realizada por Lourdes Guerra y Lála de Brito recoge también la historia de la revista ‘Cultura Obrera’, realizada al principio con medios rudimentarios por algunos socios del CCE, en la que se informaba de la vida asociativa en Frankfurt, de los acontecimientos en España, de manifestaciones y actos sindicales, informando a la vez sobre derechos sociales de los trabajadores, seguro de enfermedad, impuestos o permisos de residencia, en fin, de todo lo que era de interés en aquel momento para el colectivo español. Pero esa revista dedicaba también un espacio importante a temas culturales, especialmente a recensiones de obras literarias.

El primer número de ‘Cultura Obrera’, escrito a máquina por Juan Mañón, se conserva actualmente en el Museo de Puertollano, su ciudad natal.  Sorprende el interés cultural de aquellos españoles y españolas que, tras el trabajo en las fábricas, leían obras literarias, pintaban y organizaban exposiciones de arte, hacían música o teatro, escribían para la revista de la asociación y, cuando era necesario, salían a la calle reivindicando sus derechos o manifestando su solidaridad con los oprimidos en España. Una idea de los intereses intelectuales de los asociados se refleja en el hecho de que en la biblioteca del CCE había 750 títulos en febrero del 1963; un año más tarde se habrían alcanzado ya los mil ejemplares, según se publicaba en el número 17 de ‘Cultura Obrera’.  

La situación de España a debate

‘La España de hoy: entre la desesperación y la lucha’ es el título de un coloquio que tendrá lugar el próximo lunes, día 25 de noviembre, a las 20.00 h. en el Club Voltaire, en el que participarán los periodistas Pablo Díaz y Juan Esteller. Las organizadoras de la exposición invitan especialmente a participar en este evento, con entrada libre, que clausurará la exposición. “Al hablar hoy de España se piensa en elevadísimas cuotas de paro, en familias en la calle desahuciadas, en corrupción. Se piensa también en la privatización de la sanidad y la enseñanza y en la precarización de la cultura. La huida del país vuelve a ser la única alternativa para muchos miles de españoles, sobre todo para una juventud que no tiene futuro. Las dificultades actuales se suman a los problemas históricos...”,  texto con el que se anuncia la actividad y que tiende un puente entre la emigración de ayer y la de hoy, a la vez que invita a la participación y al debate.