Carlos Alonso Zaldívar: la huella de España en Cuba (2004-2009)
“En Cuba, nadie tiene una presencia como la de España”, dijo en una oportunidad el embajador Carlos Alonso Zaldívar, y con esta frase quiero iniciar este artículo cronológico sobre su labor en la isla. A él quiero agradecerle su constante paciencia conmigo. Nunca olvidaré cuando nos conocimos, gracias –creo– a dos buenos amigos: el cónsul general Pablo Barrios Almazor (E.P.D.) y José Luis Lancho de León, quien fuera consejero comercial de la Embajada de España en La Habana.
Carlos Alonso Zaldívar fue designado embajador de España en la República de Cuba mediante el Real Decreto 1656/2004, de 9 de julio de 2004, expedido por el Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación y publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE núm. 166, de 10 de julio de 2004). El nombramiento fue otorgado por Su Majestad el Rey Juan Carlos I, a propuesta del entonces ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos Cuyaubé.
El 16 de septiembre de 2004, a las 10:30 a.m., el nuevo embajador fue recibido en audiencia solemne por Juan Almeida Bosque, vicepresidente del Consejo de Estado de la República de Cuba, en un ceremonial diplomático recogido por la Gaceta Oficial de la República, número 70 ordinaria del año 2004.
Igualmente, en ese mismo periodo se producía la llegada a España del nuevo embajador de la República de Cuba, Alberto Velazco San José, quien sustituía a la embajadora Isabel Allende Karam. Hasta ese momento, Velazco se desempeñaba como director para Asia y Oceanía del Ministerio de Relaciones Exteriores (Minrex); anteriormente había sido embajador en Austria y representante del Ejecutivo cubano ante la ONU. Diplomático de carrera, contaba con una reconocida trayectoria en el servicio exterior cubano.
Por su parte, el embajador Carlos Alonso Zaldívar, nacido en Bilbao en 1946, es igualmente diplomático de carrera y licenciado en Ingeniería Aeronáutica por la Universidad Politécnica de Madrid, donde también obtuvo el diploma en Economía y Administración de Empresas. Antes de ingresar en la carrera diplomática, enseñó álgebra a estudiantes de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros Aeronáuticos, fue integrante del equipo de estudios técnicos y económicos de la empresa Iberplan S.A., y realizó investigaciones en el Peace Research Institute (PRIO) de Oslo en 1983.
En la actualidad, Zaldívar ejerce como investigador senior asociado y miembro del Consejo Científico del Real Instituto Elcano. A lo largo de su trayectoria ha ocupado diversos puestos en numerosas embajadas y forma parte del Consejo del European Council of Foreign Relations (ECFR).
Investigador senior asociado y miembro del Consejo Científico del Real Instituto Elcano, Carlos Alonso Zaldívar ha desarrollado una extensa carrera diplomática que refleja su profunda vinculación con la política exterior española. Fue embajador de España en Brasil (2009-2012) y embajador en Cuba (2004-2009), además de consejero cultural en la Embajada de España en Italia (2001-2004) y segundo jefe de la Embajada de España en Israel (1997-2001). Con anterioridad, desempeñó el cargo de embajador en la República de Corea (1994-1997) y el de director general del Departamento de Estudios del Gabinete de la Presidencia del Gobierno durante el mandato de Felipe González (1990-1994). También ejerció como consejero para Asuntos Político-Militares en la Embajada de España en Washington D.C. (1988-1990) y como asesor ejecutivo del Ministro de Asuntos Exteriores entre 1985 y 1988, primero junto a Fernando Morán y luego con Francisco Fernández Ordóñez.
Asimismo, es miembro del Consejo del European Council of Foreign Relations (ECFR), del Consejo Editorial de la revista Política Exterior y del Consejo Asesor del Anuario Internacional CIDOB. Entre sus publicaciones más destacadas figuran: Una conversación sobre Irak (coautor junto a Dario Valcárcel, Biblioteca Nueva, 2003), Al contrario. Sobre liderazgo, globalización e injerencia (Espasa, 2001), Variaciones sobre un mundo en cambio (Alianza Editorial, 1996) y España, fin de siglo (coautor con Manuel Castells, Alianza Editorial, 1992).
En una entrevista concedida en 2014, el embajador Carlos Alonso Zaldívar expresó con claridad la profundidad histórica y afectiva que une a ambos países: “Si España se desentiende de Cuba, perderá categoría como Estado. Nuestro compromiso con Cuba es mucho más alto que con cualquier otro país de Latinoamérica”.
Cuando Zaldívar asumió la embajada en La Habana, en sustitución de Jesús Manuel Gracia-Aldaz, las relaciones diplomáticas entre Cuba y España atravesaban un momento frágil y sensible. Le correspondía, por tanto, reconducir con prudencia y sabiduría una nueva etapa, coincidiendo con la llegada al poder del presidente José Luis Rodríguez Zapatero y del ministro de Asuntos Exteriores Miguel Ángel Moratinos.
Uno de los asuntos que Moratinos trabajó con mayor empeño fue convencer a los socios europeos de eliminar la “Posición Común” de la Unión Europea respecto a Cuba, medida que había condicionado durante años el diálogo político con la isla. En este contexto, el embajador Zaldívar subrayó que, si Cuba había sido capaz de resistir las presiones más intensas de los Estados Unidos, era evidente que no se doblegaría ante un documento elaborado por los europeos en apenas cuatro días.
Cronología del trabajo desarrollado por el embajador de España en La Habana, en el periodo 2004-2009
2004
Con la presencia del embajador de España en Cuba, Carlos Alonso Zaldívar, se inauguró el 1 de noviembre de 2004 el pabellón español en la 22ª edición de la Feria Internacional de La Habana, lo cual marcó uno de los primeros actos oficiales de su misión diplomática.
Pocos días después, el 29 de octubre de 2004, el embajador asistió a la inauguración de la exposición de pintura del músico griego Vangelis en el Museo Nacional de Bellas Artes de La Habana, donde sostuvo un intercambio con el poeta Pablo Armando Fernández. La muestra, organizada con motivo del XIX Festival Internacional de Ballet de La Habana, reunió obras realizadas entre los años 1960 y 2003.
El 12 de noviembre de 2004, el embajador Zaldívar acudió a la Embajada de Palestina para firmar el libro de condolencias por el fallecimiento de Yasser Arafat, líder de la Autoridad Nacional Palestina.
Finalmente, el 25 de noviembre de 2004, el canciller cubano Felipe Pérez Roque anunció el restablecimiento del contacto oficial entre los Gobiernos de Cuba y España, acto formalizado con la recepción del embajador Zaldívar en la Cancillería del Ministerio de Relaciones Exteriores (Minrex). Este encuentro marcó el inicio de una nueva etapa en las relaciones diplomáticas bilaterales.
2005
El 4 de febrero de 2005, Manuel Chaves, presidente de la Junta de Andalucía, inició su visita oficial a Cuba, acompañado por el embajador de España en Cuba, Carlos Alonso Zaldívar. Dentro de su programa de actividades inauguró la exposición dedicada a la escritora española María Zambrano, en el marco de la XIV Feria Internacional del Libro de La Habana, junto al vicepresidente del Gobierno cubano José Ramón Fernández. La visita se extendió por tres días e incluyó un recorrido por el casco histórico de La Habana Vieja, acompañado por el historiador de la Ciudad, Dr. Eusebio Leal Spengler (E.P.D.), el vicepresidente José Ramón Fernández (E.P.D.), y el propio embajador Zaldívar. Durante su estancia, Chaves sostuvo encuentros con el ministro de Relaciones Exteriores Felipe Pérez Roque, el presidente de la Asamblea Nacional Ricardo Alarcón (E.P.D.) –nieto de andaluces– y el secretario del Consejo de Ministros, Carlos Lage Dávila.
El 5 de febrero de 2005, acompañado por el vicepresidente José Ramón Fernández, el ministro de Cultura Abel Prieto, el embajador Zaldívar y el presidente del Instituto Cubano del Libro, Iroel Sánchez; Manuel Chaves inauguró la Casa Dulce María Loynaz, la que fuera, en sus inicios, sede de la Academia de las Letras Cubanas, en homenaje a la poetisa.
Al día siguiente, 6 de febrero, el presidente andaluz fue recibido por el presidente de la República de Cuba, Fidel Alejandro Castro Ruz (E.P.D.), en el Palacio de la Revolución, con la presencia del embajador Zaldívar, el vicepresidente Fernández y el canciller Pérez Roque. Durante la reunión, de más de hora y media de duración, Chaves obsequió a Fidel Castro una camiseta del Real Betis Balompié, recordando su afición al deporte y sus años de futbolista en el colegio jesuita. En el encuentro se abordaron temas relativos a la posible visita a Cuba del Rey Juan Carlos I y del presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero. Aunque fuentes de la Moncloa negaron la existencia de una previsión formal, se confirmó el viaje a España del canciller cubano Felipe Pérez Roque, previsto para marzo de 2005, donde se reuniría con el ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, ocasión en la que podrían concretarse los términos de una eventual visita de alto nivel a la isla.
El 22 de marzo de 2005, arribó a La Habana la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez Arza, para la firma de un acuerdo bilateral con el presidente del Instituto de Aeronáutica Civil de Cuba, Rogelio Acevedo. En la ceremonia estuvieron presentes el ministro del Transporte, Carlos Manuel Pazo, y el embajador Carlos Alonso Zaldívar. Ese mismo día, el embajador presidió la inauguración del Seminario Internacional ‘Yo sé quién soy. El Quijote y la dimensión imperativa de la persona’, en la Biblioteca Nacional de Cuba, donde entregó un ejemplar de El Quijote al director Elíades Acosta. La Embajada de España donó más de 400 ejemplares de la obra cervantina a las bibliotecas públicas de la isla.
Un hecho de especial significación tuvo lugar el 26 de marzo de 2005, en el Castillo del Morro de Santiago de Cuba, donde se rindió homenaje al almirante Pascual Cervera y Topete. En el acto participaron el ministro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, Raúl Castro Ruz, el embajador Carlos Alonso Zaldívar, y los bisnietos del almirante, José Cervera Pery y Pascual Cervera de la Chica, además de la escultora española Paz Figares, autora del busto. Asistieron treinta miembros de la familia Cervera, en recuerdo del héroe español caído en combate durante la batalla naval de 1898.
El 5 de mayo de 2005, en el Convento de San Francisco de Asís, se presentó la exposición ‘Grediaga en la pluma de Cervantes’, del artista español Antonio Grediaga, con palabras inaugurales de Manuel Romero. Asistieron el embajador Zaldívar y el Dr. Eusebio Leal Spengler.
El 2 de diciembre de 2005, el embajador Zaldívar se reunió con un grupo de los llamados ‘Niños de la Guerra’, españoles residentes en Cuba desde la Guerra Civil (1936-1939). Durante el acto se hizo entrega de las primeras prestaciones aprobadas por el Gobierno de España para este colectivo, en reconocimiento a una deuda histórica. Más de un centenar de ellos solicitaron la ayuda durante ese año.
Ya terminando el año, el 16 de diciembre de 2005, se celebra en el Hotel Palco de La Habana a la reunión exploratoria entre el Ejército de Liberación Nacional (ELN) de Colombia y el Gobierno del presidente Álvaro Uribe Vélez, con la participación del escritor Gabriel García Márquez y del secretario de Estado de Asuntos Exteriores para Iberoamérica, Bernardino León.
2006
El 14 de septiembre de 2006, el secretario de Estado del Ministerio de Asuntos Exteriores de España, Bernardino León, asistió en representación del Gobierno español a la XIV Cumbre del Movimiento de Países No Alineados (NOAL), que tuvo lugar en La Habana, reafirmando la presencia activa de España en los foros internacionales celebrados en la región.
El 5 de diciembre de 2006, tuvo lugar la visita oficial a Cuba del presidente del Gobierno de Canarias, Adán Martín (E.P.D.), quien arribó acompañado por una comitiva gubernamental canaria, entre ellos el viceconsejero de Emigración, Efraín Medina. A su llegada al aeropuerto internacional José Martí, fue recibido por el vicepresidente del Consejo de Ministros, José Ramón Fernández, y por el embajador de España en Cuba, Carlos Alonso Zaldívar.
Durante su estancia, el presidente Martín sostuvo un encuentro con la emigración canaria en la Asociación Canaria Leonor Pérez. En el encuentro participaron el vicepresidente José Ramón Fernández, el embajador Zaldívar, el ministro de Justicia de Cuba, Roberto Díaz Sotolongo, el director de la Oficina Nacional del Programa Martiano, Armando Hart, el presidente del Consejo de Residentes Españoles (CRE), Antonio Fidalgo Dopazo (E.P.D.), y el presidente de la Asociación Canaria en Cuba, Carmelo González Acosta (E.P.D.).
En este acto, el presidente canario impuso la Medalla de Oro de Canarias 2006 a Carmelo González Acosta, en reconocimiento a su liderazgo al frente de la Asociación Canaria en Cuba –distinción que el propio González había recibido oficialmente en mayo de ese año durante el Día de Canarias–. Adán Martín destacó asimismo la labor del Grupo Renacer, una agrupación de más de 120 mayores de entre 70 y 90 años, que se reúne en el Centro de Día de la Asociación para desarrollar actividades lúdicas y culturales, constituyéndose en “un ejemplo para toda América Latina”. En sus palabras, Martín subrayó: “Ustedes han sido capaces no sólo de mantener nuestras tradiciones, sino de recuperarlas”.
En el marco de la visita, el presidente canario fue invitado a descubrir un busto en honor a Leonor Pérez Cabrera, madre del Apóstol de América José Martí, en un acto de profundo simbolismo histórico y afectivo.
Ese mismo día, Adán Martín sostuvo una reunión de trabajo con el presidente de la Asamblea Provincial del Poder Popular de La Habana, Armando Cuéllar, en la que ambos repasaron los proyectos de cooperación desarrollados por la Comunidad Autónoma de Canarias en la provincia desde 1994, equivalentes al 35% de las ayudas en cooperación recibidas por La Habana en los últimos trece años, con un monto total de 4,25 millones de euros. Al término del encuentro, Armando Cuéllar impuso la distinción por el 30 aniversario del Poder Popular de La Habana al presidente canario, en reconocimiento a la colaboración sostenida.
Finalmente, en horas de la tarde, el presidente Adán Martín fue recibido, junto al embajador Carlos Alonso Zaldívar, en el Ministerio de Relaciones Exteriores (Minrex) por el Canciller Felipe Pérez Roque, reafirmando los lazos de cooperación entre España, Cuba y las Islas Canarias.
2007
El 12 de marzo de 2007, arribó a La Habana la secretaria de Estado de Inmigración y Emigración de España, Consuelo Rumí, procedente de México. Fue recibida por el vicepresidente del Consejo de Ministros, José Ramón Fernández, y el embajador de España en Cuba, Carlos Alonso Zaldívar.
Durante su visita oficial, la secretaria de Estado destacó que más de 2.200 emigrantes residentes en Cuba reciben pensiones asistenciales del Estado español, un respaldo significativo a la comunidad española en la isla. Según explicó el embajador Zaldívar, en Cuba residían entonces 28.884 ciudadanos españoles, cifra que podría incrementarse en unos 20.000 más durante el año, a medida que avanzara la tramitación de solicitudes de nuevas nacionalidades presentadas en el Consulado.
“Los casi 30.000 ciudadanos que tenemos hasta ahora pueden aumentar significativamente y llegar hasta 50.000”, precisó el embajador Zaldívar.
De acuerdo con estimaciones oficiales de la época, en España residían alrededor de 40.000 cubanos de forma legal, lo que evidenciaba la profundidad de los lazos migratorios y familiares entre ambos países.
El 2 de abril de 2007, el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación de España, Miguel Ángel Moratinos, arribó al Aeropuerto Internacional José Martí de La Habana, dando inicio a la primera visita oficial de un jefe de la diplomacia española a Cuba desde 1998, cuando lo hiciera el ministro Abel Matutes. Acompañaban al ministro Moratinos la secretaria de Estado de Cooperación Internacional, Leire Pajín, y, llegada con antelación, la secretaria de Estado para Iberoamérica, Trinidad Jiménez. Fueron recibidos a pie de pista por el ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Felipe Pérez Roque, y el embajador Carlos Alonso Zaldívar.
El martes 3 de abril, el ministro Moratinos fue recibido en el Palacio de la Revolución por el presidente en funciones de la República de Cuba, Raúl Castro Ruz, a quien entregó una carta personal del Rey Juan Carlos I dirigida al presidente Fidel Castro Ruz.
En una agenda intensa de trabajo, Moratinos sostuvo reuniones con el vicepresidente Carlos Lage, el presidente de la Asamblea Nacional, Ricardo Alarcón, y el canciller Felipe Pérez Roque, con quien colocó una ofrenda floral al Héroe Nacional José Martí. En declaraciones conjuntas, ambos ministros destacaron el inicio de una “nueva etapa en las relaciones entre Cuba y España”.
Durante la tarde, el ministro asistió a la inauguración de una exposición permanente del pintor español Joaquín Sorolla (1863-1923), donde actuó como anfitrión el ministro de Cultura, Abel Prieto. Posteriormente, realizó un recorrido por el Centro Histórico de La Habana Vieja, acompañado por el Dr. Eusebio Leal Spengler, hasta llegar al Palacio de los Capitanes Generales, actual Museo de la Ciudad.
La agenda incluyó también una visita a la Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM), donde jóvenes de América Latina cursan estudios de medicina becados por el Estado cubano.
“Esta visita era necesaria en un momento importante para el futuro de Cuba y el futuro de las relaciones entre Cuba y España. España no puede estar ausente”, declaró el ministro Moratinos.
En el ámbito económico, la visita reforzó los vínculos comerciales bilaterales. España ocupaba entonces el tercer puesto entre los socios comerciales de Cuba, solo por detrás de Venezuela y China. Las exportaciones españolas a Cuba alcanzaron casi 630 millones de euros en 2006, mientras que las importaciones sumaron alrededor de 140 millones, según datos oficiales.
El 29 de mayo de 2007 se celebró en La Habana una reunión bilateral Cuba-España sobre derechos humanos, presidida por el director general de Política Exterior del Ministerio de Asuntos Exteriores de España, Rafael Dezcallar, y el embajador Carlos Alonso Zaldívar. Al término del encuentro, ambos diplomáticos ofrecieron declaraciones a la prensa en la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores (Minrex). El embajador Zaldívar destacó que el diálogo había sido “franco y constructivo”, y comunicó que el Gobierno de la República de Cuba ofreció a los funcionarios españoles la posibilidad de visitar tres centros penitenciarios en los alrededores de La Habana, como muestra de apertura y cooperación en materia de derechos humanos.