Félix Alfonso Barbero Martín, consejero y presidente de la Federación de Centros Españoles de Venezuela

Comienzo por recordar el art. 14 de nuestra Constitución “Los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social”. Art. 68.5 “Son electores y elegibles todos los españoles que estén en pleno uso de sus derechos políticos” Art. 9.2 “Corresponde a los poderes públicos promover las condiciones para que la libertad y la igualdad del individuo y de los grupos en que se integra sean reales y efectivas; remover los obstáculos que impidan o dificulten su plenitud y facilitar la participación de todos los ciudadanos en la vida política, económica, cultural y social”. Art. 23 “Los ciudadanos tienen derecho a participar en los asuntos públicos, directamente o por medio de representantes, libremente elegidos en elecciones periódicas por sufragio universal”. Art. 13.2 “Solamente los españoles serán titulares de los derechos reconocidos en el art. 23, salvo lo que, atendiendo a criterios de reciprocidad, pueda establecer por tratado ley por el derecho de sufragio activo o pasivo en las elecciones municipales”. He mencionado los anteriores artículos con la convicción de que si se llegara a la supresión del voto en las municipales y la limitación de las Autonómicas cosa que dudo que se haga, se estaría violando los principios de nuestra Constitución, si ha llegado a mis oídos y he podido ver declaraciones tan nefastas, absurdas, sin comprensión, ni consideración, como la de que “gente que nunca vivió en Galicia, pueda acabar por condicionar y decidir el resultado de una elección”. A quién temen, por qué cuando España estaba en condiciones económicas lamentables no se hablaba de esta forma, de los españoles que valientemente estaban fuera de sus fronteras para ayudarla a salir adelante. ¿Ahora nos quieren borrar de las estadísticas?. Que poca vergüenza y consideración, por ello dudo de que la comisión que analiza la reforma en Congreso lo haga, debemos ser prudentes y esperar lo que resuelva en este sentido, más aún el Estatuto de la Ciudadanía Española en el exterior avala nuestro derecho al voto del emigrante; hemos expresado siempre y en varias oportunidades que se ha debido consultar a una comisión del CGCEE. Lo que si observo con onda preocupación es que 4.2 millones de extranjeros en España con tarjeta de Residente, si puedan condicionar el resultado de una elección, cosa que de esta forma parece aprobarse, pero si reprobarse de los españoles que tanto dieron por España. De los españoles que estén temporalmente fuera de España por razones de trabajo. O estudios, me parece excelente que puedan votar en cada una de las elecciones, extender los derechos es lo deseable. De la representación de 4 ó 5 Senadores, tendríamos que valorar bajo que términos y condiciones se darían y ver su alcance. Voto en urna De la implantación del voto en Urna en el exterior, ha sido una propuesta de la Federación de Centros Españoles de Venezuela, FECEVE; al observar en el voto actual que se ejerce por correo poca transparencia y garantías del mismo; como son el que muchos españoles no lo reciben, les llega tarde, terceras personas usurparon los sobres en las oficinas de correo regional, en otros casos es manipulado por personas que les llenan lo que ellos consideran, en otros casos el voto después de depositado en las oficinas; no sale para España, votan hasta los fallecidos, por ello esta Federación hizo consideraciones y una propuesta solicitando que se llevara a cabo el voto en urna, no limitando la participación y una vez finalizado el proceso se elaboraran las actas correspondientes y se diera a conocer los resultados del conteo de votos y darlo sobre todo a conocer públicamente, es una solución para países como Venezuela que tiene un numero apreciable de votantes. Se plantean nuevas formas de hacerlo que no son desestimables como el voto electrónico con el uso de Internet, lo cual apoyamos. Sólo me queda concluir que aspiramos a la igualdad de Derechos de los españoles que vivimos fuera, con los que residen en España; como contemplan las leyes, lo contrario sería ingrato y nefasto. Un país se mide como trata a sus ciudadanos fuera de sus fronteras.
Félix Alfonso Barbero Martín, consejero y presidente de la Federación de Centros Españoles de Venezuela
 Félix Barbero.
Félix Barbero.
Comienzo por recordar el art. 14 de nuestra Constitución “Los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social”.
Art. 68.5 “Son electores y elegibles todos los españoles que estén en pleno uso de sus derechos políticos”
Art. 9.2 “Corresponde a los poderes públicos promover las condiciones para que la libertad y la igualdad del individuo y de los grupos en que se integra sean reales y efectivas; remover los obstáculos que impidan o dificulten su plenitud y facilitar la participación de todos los ciudadanos en la vida política, económica, cultural y social”.
Art. 23 “Los ciudadanos tienen derecho a participar en los asuntos públicos, directamente o por medio de representantes, libremente elegidos en elecciones periódicas por sufragio universal”.
Art. 13.2 “Solamente los españoles serán titulares de los derechos reconocidos en el art. 23, salvo lo que, atendiendo a criterios de reciprocidad, pueda establecer por tratado ley por el derecho de sufragio activo o pasivo en las elecciones municipales”.
He mencionado los anteriores artículos con la convicción de que si se llegara a la supresión del voto en las municipales y la limitación de las Autonómicas cosa que dudo que se haga, se estaría violando los principios de nuestra Constitución, si ha llegado a mis oídos y he podido ver declaraciones tan nefastas, absurdas, sin comprensión, ni consideración, como la de que “gente que nunca vivió en Galicia, pueda acabar por condicionar y decidir el resultado de una elección”. A quién temen, por qué cuando España estaba en condiciones económicas lamentables  no se hablaba de esta forma, de los españoles que valientemente estaban fuera de sus fronteras para ayudarla a salir adelante. ¿Ahora nos quieren borrar de las estadísticas?. Que poca vergüenza y consideración, por ello dudo de que la comisión que analiza la reforma en Congreso lo haga, debemos ser prudentes y esperar lo que  resuelva en este sentido, más aún el Estatuto de la Ciudadanía Española en el exterior avala nuestro derecho al voto del emigrante; hemos expresado siempre y en varias oportunidades que se ha debido consultar a una comisión del CGCEE.
Lo que si observo con onda preocupación es que 4.2 millones de extranjeros en España con tarjeta de Residente, si puedan condicionar el resultado de una elección, cosa que de esta forma parece aprobarse, pero si reprobarse de los españoles que tanto dieron por España.
De los españoles que estén temporalmente fuera de España por razones de trabajo. O estudios, me parece excelente que puedan votar en cada una de las elecciones, extender los derechos es lo deseable. De la representación de 4 ó 5 Senadores, tendríamos que valorar bajo que términos y condiciones se darían y ver su alcance.

Voto en urna

De la implantación del voto en Urna en el exterior, ha sido una propuesta de la Federación de Centros Españoles de Venezuela, FECEVE; al observar en el voto actual que se ejerce por correo poca transparencia y garantías del mismo; como son el que muchos españoles no lo reciben, les llega tarde, terceras personas usurparon los sobres en las oficinas de correo regional, en otros casos es manipulado por personas que les llenan lo que ellos consideran, en otros casos el voto después de depositado en las oficinas; no sale para España, votan hasta los fallecidos, por ello esta Federación hizo consideraciones y una propuesta solicitando que se llevara a cabo el voto en urna, no limitando la participación y una vez finalizado el proceso se elaboraran las actas correspondientes  y se  diera a conocer los resultados del conteo de votos y darlo sobre todo a conocer públicamente, es una solución para países como Venezuela que tiene un numero apreciable de votantes. Se plantean nuevas formas de hacerlo que no son desestimables como el voto electrónico con el uso de Internet, lo cual apoyamos.
Sólo me queda concluir que aspiramos a la igualdad de Derechos de los españoles que vivimos fuera, con los que residen en España; como contemplan las leyes, lo contrario sería ingrato y nefasto. Un país se mide como trata a sus ciudadanos fuera de sus fronteras.