El Ayuntamiento de la capital portuguesa dictó una resolución que ya entró en vigor

Xuventude de Galicia-Centro Galego de Lisboa, reconocida como entidad de interés histórico, cultural y social

La Xuventude de Galicia-Centro Galego de Lisboa fue reconocida por el Ayuntamiento de Lisboa como entidad de interés histórico, cultural y social, mediante resolución de 23 de julio de 2021, que ya entró en vigor.

Xuventude de Galicia-Centro Galego de Lisboa, reconocida como entidad de interés histórico, cultural y social
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El Centro Gallego de Lisboa es un referente para la diáspora gallega en la capital portuguesa.

La Xuventude de Galicia-Centro Galego de Lisboa fue reconocida por el Ayuntamiento de Lisboa como entidad de interés histórico, cultural y social, mediante resolución de 23 de julio de 2021, que ya entró en vigor.

El Centro Galego de Lisboa es un importante referente de la diáspora gallega en Lisboa, fundado en 1908, por lo que próximamente celebrará su 113º aniversario. Este reconocimiento municipal no es más que una confirmación de la importancia del Centro Galego de Lisboa, como difusor de la cultura gallega y guardiana de la memoria de la diáspora gallega en Lisboa, pero también demuestra la importancia de esta comunidad en la construcción de la ciudad, como realidad física y social.

Cabe recordar que la Xuventude de Galicia-Centro Galego de Lisboa ya había sido reconocida por el Gobierno portugués con el ‘Estatuto de Utilidad Pública’ el 14 de noviembre de 1980.

Este nuevo reconocimiento, ahora a nivel municipal, significa no solo un reconocimiento a su actividad y la importancia de su patrimonio material e inmaterial, sino también la importancia y relevancia de la institución a nivel de la capital de Portugal, donde la marca gallega es visible ya sea desde un punto de vista social y cultural o como guardianes de las tradiciones que construyeron Lisboa.

Varios autores han destacado la importancia de los gallegos, y de la comunidad gallega en la creación de Portugal, un ejemplo es el gran historiador Alexandre Herculano, que ya en el siglo XIX recordó lo que los portugueses debían a los gallegos: “El gallego es el huevo de Portugal, aparte del nombre, heredó de Galicia una buena parte del territorio, parte de la población los nombres más ilustres de su antigua aristocracia, muchas costumbres, y finalmente la lengua”.

Este reconocimiento del Centro Galego de Lisboa no es más que mirar la ciudad de Lisboa y su realidad presente y futura y comprobar cómo el gallego está siempre ahí como obra metafísica de una realidad física y social que es Lisboa.