TRABAJÓ POR LA DIGNIFICACIÓN SOCIAL DEL GALLEGO Y POR LA RECUPERACIÓN DE LA CULTURA DE GALICIA

El legado del intelectual Ramón Piñeiro pervive 21 años después de su muerte

Más de dos décadas después de su muerte, el legado de Ramón Piñeiro (Láncara, 1915 – Santiago de Compostela, 1990) a favor de la recuperación de la lengua y de la cultura gallegas sigue hoy vivo. El filósofo y galleguista, del que el pasado sábado se cumplió el vigésimo primer aniversario, contribuyó a impulsar múltiples proyectos políticos, editoriales, literarios o periodísticos.
El legado del intelectual Ramón Piñeiro pervive 21 años después de su muerte
 Imagen de archivo de Ramón Piñeiro en su despacho.
Imagen de archivo de Ramón Piñeiro en su despacho.

Más de dos décadas después de su muerte, el legado de Ramón Piñeiro (Láncara, 1915 – Santiago de Compostela, 1990) a favor de la recuperación de la lengua y de la cultura gallegas sigue hoy vivo. El filósofo y galleguista, del que el pasado sábado se cumplió el vigésimo primer aniversario, contribuyó a impulsar múltiples proyectos políticos, editoriales, literarios o periodísticos. Entre ellos, hace falta destacar la Editorial Galaxia, el Consello da Cultura Gallega y la revista de cultura ‘Grial,’ proyectos todos ellos que continúan su trayectoria en la actualidad.

 

El trabajo de Ramón Piñeiro al frente de estas iniciativas lo convirtieron en una de las figuras más influyentes y decisivas de la Galicia de la segunda mitad del siglo XX. Su producción intelectual giró alrededor principalmente del ámbito político, con propuestas para la articulación de un pensamiento galleguista fuertemente enraizado en la sociedad gallega del momento y que fuera comprensible para la ciudadanía; de la filosofía, con contribuciones singulares sobre el significado de la ‘saudade’; y de la lengua gallega.

El gallego, una preocupación constante
Sobre el tema de la lengua, Ramón Piñeiro reflexionó en profundidad, siempre desde una postura de respeto, cordialidad y entendimiento. Entre sus preocupaciones tuvieron un gran peso la relación entre idioma y sociedad, la situación social de la que disfrutaba el gallego, las causas que impedían su avance en la sociedad y las acciones necesarias para conseguir su extensión en la vida diaria. Esta preocupación por la dignificación social del gallego guió su trabajo en la elaboración y aprobación de la Ley 3/1983, del 15 de junio, de normalización lingüística, en la que también participaron otros ilustres galleguistas.
Piñeiro veía la lengua gallega no solo como un medio de comunicación, sino que la consideraba la señal distintiva de la identidad de un pueblo y de una cultura. Argumentaba que el hecho de ser gallegos se debe en parte a tener una lengua que nos diferencia de los individuos de otras comunidades lingüísticas y a disponer de una cultura que se expresa en una lengua que le confiere su singularidad. En este planteamiento, lengua y cultura están unidas, proyectándose mutuamente.
Esta visión de la lengua como elemento identitario de todo el pueblo gallego es lo que explica también su postura, a veces no bien comprendida, de que la lengua gallega fuera apoyada por todas las fuerzas políticas. En consecuencia, Ramón Piñeiro consideraba que la defensa del idioma no debía ser ni responsabilidad ni patrimonio exclusivo de ningún partido político o ideología en particular.
El pensamiento sociolingüístico de Ramón Piñeiro tenía una honda inspiración vitalista y posibilista, basado en la creencia de las enormes posibilidades de la sociedad gallega para recuperar la lengua propia. Pero para eso se veía necesario investigar en las diferentes áreas lingüísticas, literarias y humanísticas que le transmitieran a la sociedad una imagen realista y moderna de la lengua propia de Galicia.
Siguiendo la estela de esa preocupación por la investigación sobre lo gallego, la Xunta de Galicia puso en marcha en 1993 un centro de investigación que lleva el nombre del autor lancarés y que tiene como objetivos fundamentales promover, desarrollar y dar difusión a proyectos y programas gallegos de estudios ligüísticos, literarios, históricos y antropológicos.

Premio de Ensayo Ramón Piñeiro
Al mismo tiempo, el Centro Ramón Piñeiro para la Investigación en Humanidades, adscrito a la Secretaría Xeral de Política Lingüística y coordinado por el académico Manuel González, promueve diversas iniciativas alrededor del intelectual de Láncara. Es el caso de la colección Cadernos Ramón Piñeiro, a través de la que se publicaron, desde 2003 hasta hoy, 19 volúmenes sobre pensamiento y cultura gallegos.
A través del Centro Ramón Piñeiro, la secretaría xeral, en colaboración con la Editorial Galaxia y con Gas Natural Fenosa, también convoca el Premio de Ensayo Ramón Piñeiro. Este galardón, que tiene en marcha su décimo primera edición, nace en memoria del escritor de Láncara y se acoge al espíritu que inspiró su polifacética trayectoria intelectual.