Participó en los festejos por el centenario de la Asociación de Corcubión en Buenos Aires

Alfonso Rueda analizó junto a los representantes de 41 casas gallegas en Argentina la situación del colectivo y sus asociaciones

El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda Valenzuela, participó, el viernes 14 por la noche, en un encuentro con representantes de 41 casas gallegas de Argentina con quienes analizó la situación del colectivo y de las asociaciones que lo nuclean.
Alfonso Rueda analizó junto a los representantes de 41 casas gallegas en Argentina la situación del colectivo y sus asociaciones
Rueda en Corcubion77
Alfonso Rueda entregó una placa al presidente de la Asociación de Corcubión, Carlos Ameijeiras.

Junto al mandatario autonómico, estuvieron presentes el secretario xeral de Emigración, Antonio Rodríguez Miranda; y el delegado del Gobierno gallego en Argentina, Alejandro López Dobarro. 

Durante la reunión, que tuvo lugar en la sede de la Asociación Benéfica y Cultural de Corcubión, en Vicente López, autoridades y directivos coincidieron en la importancia de llevar adelante acciones conjuntas entre las entidades del colectivo, así como propiciar uniones que permitan dar continuidad al legado cultural y patrimonial de las casas gallegas en el país.

En este sentido, el titular del Ejecutivo gallego señaló que “hay ocasiones en que la unión lo que garantiza es la pervivencia, que de otra manera sería, pues, muy difícil”. “La Xunta no puede obligar a nadie a hacerlo. En cambio sí que tiene obligación de apoyar a las entidades que quieran seguir existiendo, pero, desde luego, nuestra recomendación y nuestra preferencia es el impulso para que algunas entidades, sobre todo las más pequeñas, se fusionen para garantizar su supervivencia”, ahondó en declaraciones a la prensa.

Consultado, sobre las políticas de fomento del retorno que impulsa el Gobierno gallego, Alfonso Rueda destacó que Galicia promueve y procura, desde hace muchos años, que los jóvenes conozcan Galicia. “Somos conscientes –apuntó– de que hay mucha gente joven que son gallegos de tercera generación que no conocen Galicia más allá de lo que les transmiten sus abuelos y bisabuelos”. 

“Por eso –avanzó–, siempre estamos intentando innovar para conseguir que esa relación de los jóvenes descendientes con Galicia se enriquezca, se refuerce y que incluso puedan contemplarla como una opción de vida, si desearan insertarse allí”. 

Al respecto, recordó que la Xunta impulsa desde hace años una línea “muy potente” de becas de posgrado que tiene como beneficiarios a jóvenes descendientes de gallegos que quieran radicarse en Galicia. 

Asimismo, agregó que tiene en marcha una serie de líneas de apoyo proactivas que buscan impulsar a los jóvenes residentes en el exterior a emprender proyectos en la Comunidad y a insertarse en su mercado laboral.

Durante un breve contacto con los medios de prensa, Alfonso Rueda expresó que, después de dos años sin poder viajar por causa de la pandemia, encontró un colectivo “que tiene muchas ganas de seguir manteniendo ese contacto con su tierra”. “Es una inmensa red que tiene Galicia por el mundo que siempre la está apoyando”.

Finalmente, recomendó “a quienes no entienden este tipo de viajes, incluso algunos partidos políticos, que viajen y conozcan a los colectivos residentes en el exterior”. “Que vean cómo agradecen que los apoyemos, que nos acordemos de ellos y que reconozcamos su labor”. “Lo recomiendo sinceramente –dijo– a aquellos que no entienden la emigración, ni la imagen de Galicia en el mundo”.

Centenario de la Asociación de Corcubión

Tras la reunión con los presidentes de las asociaciones gallegas en el país, el presidente de la Xunta participó en la cena de celebración del centenario de la creación de la Asociación Benéfica y Cultural de Corcubión.

En la comida, en la que estuvieron presentes el cónsul general de España en Buenos Aires, Fernando García Casas; Antonio Rodríguez Miranda; Alejandro López Dobarro; autoridades locales y referentes del colectivo residente en Argentina, Alfonso Rueda recordó que “cuando Galicia necesitó la ayuda de sus compatriotas que emigraron la tuvo”. “Por tanto –dijo– ahora tenemos que estar pendientes de ellos, agradecerles su trabajo y venir aquí a conocerlos y reconocer esa labor de siempre mantener las tradiciones culturales de Galicia y al mismo tiempo ser entidades y personas perfectamente integradas en las sociedades en las que están”. 

Por su parte, el presidente de esta Asociación centenaria, Carlos Ameijeiras Miñones, en un breve discurso, repasó algunos de los hitos más importantes en la historia de esta casa, que nació el 26 de agosto de 1922, cuando un grupo de emigrantes naturales de los municipios del partido judicial de Corcubión, especialmente de las comarcas de Fisterra y Terra de Soneira, que residían en Buenos Aires, se reunieron para constituir una asociación que les brindara protección mutua y, fundamentalmente, que apoyara en las comarcas de origen a sus niñas y niños y al campesinado.

Así, la Asociación Benéfica Cultural del Partido de Corcubión en Buenos Aires, que en los años 50 contaba con 5.000 socios, llegó a ofrecer servicios gratuitos de asesoramiento legal, asistencia médica y farmacia; incluso socorros económicos puntuales a compatriotas que atravesaban una situación de necesidad. 

Sin embargo, destacó Carlos Ameijeiras, su principal contribución apuntó a la educación de los niños y niñas de Corcubión. “En la asamblea de socios de junio de 1929 –detalló–, la asociación aprobó la construcción de nueve centros escolares, uno en cada municipio del distrito gallego y el noveno en Buenos Aires”. 

La Guerra Civil española, señaló, dificultó su culminación, pero se llegaron a inaugurar cuatro escuelas en Galicia, cuyos edificios aún se mantienen.

Tras las intervenciones, el titular del Gobierno autonómico entregó una placa conmemorativa a la asociación corcubionesa y firmó el libro de visitantes ilustres de la casa.

Los directivos de la institución, por su parte, obsequiaron un cinturón de cuero al mandatario, como símbolo de su aprecio y reconocimiento por su presencia y acompañamiento.