Adrián Rodríguez: “La ayuda al retorno emprendedor me ayudó porque montar una empresa exige una inversión muy importante”

Tras algo más de cuatro años viviendo en Irlanda y un breve paso por Alemania, Adrián Rodríguez regresa a su Ribadeo natal, donde, junto con otro socio, ha montado Nigal (Nova Industria Galega), una empresa puntera en servicios informáticos. “Tanto mi socio como yo estuvimos un tiempo en el extranjero y la idea era montar una empresa que aportase valor aquí y por eso empezamos trabajando con los sectores estratégicos de Galicia”, asegura Rodríguez.

Adrián Rodríguez: “La ayuda al retorno emprendedor me ayudó porque montar una empresa exige una inversión muy importante”
Adrián Rodríguez Nigal
La empresa de Adrián Rodríguez tiene proyectos en diversos sectores, uno de ellos, el del vino.

“Yo estaba en el ámbito universitario, acabando el doctorado y dando clases en Cork, en el sur de Irlanda”, explica Adrián Rodríguez, quien asegura que el retorno fue con bastante incertidumbre porque a nivel laboral estaba muy cómodo en Irlanda y sabía que era complicado encontrar trabajo en España en las mismas condiciones que en Irlanda, “pero también valoras la calidad de vida y otras muchas cosas que allí no tienes”, comenta.

“Cambié un mundo académico por uno totalmente distinto, que es el empresarial, pero de momento, con nuestras dificultades, pero también con nuestros éxitos, estamos ahí. Después de dos años y en un tiempo muy complicado, seguimos creciendo poco a poco”, afirma el cofundador de Nigal.

El programa de retorno emprendedor “me ayudó porque montar una empresa exige una inversión muy importante”, confiesa Adrián Rodríguez, quien destaca que habían ganado un premio de un concurso de emprendedores, pero “tampoco era demasiada cuantía, así que todo suma”.

Rodríguez se enteró de las ayudas al retorno de la Xunta por un amigo que vivía en el extranjero y “hablando con la asesoría de esto, me comentaron que había ayudas al emprendimiento”.

Nigal es una empresa informática puntera que se dedica al tratamiento de datos. “Nosotros adquirimos datos tanto del internet de las cosas como de aplicaciones móviles que desarrollamos nosotros mismos y los visualizamos en nuestras plataformas web, los tratamos con métodos estadísticos y con modelos matemáticos para conseguir la optimización de ciertos procesos”, detalla Adrián Rodríguez, que pone de ejemplo un proyecto que tienen en el sector del vino. El proyecto consiste en optimizar los datos recabados por un tapón con sensores diseñado con unos colaboradores de Vigo. “Por fuera, es totalmente igual al que tienen las barricas de madera a día de hoy, pero dentro lleva unos sensores que recogen temperatura, presiones, humedades, … Esos datos se envían de forma inalámbrica a nuestra plataforma, los visualizamos para que el etnólogo y los técnicos los puedan consultar y optimizamos en este caso, el volumen de líquido que se evapora en la barrica a consecuencia de ser la barrica un material poroso”. “Lo que hacemos –explica– es optimizar las condiciones climáticas de bodega para que dicha evaporación esté controlada”.

Además de este proyecto en el ámbito vinícola, tienen proyectos en el sector forestal y acaban de empezar en el sector de la pesca, en el Puerto de Celeiro, analizando los datos de los barcos cuando salen a pescar. “Son sectores bastante importantes para Galicia, pero esta tecnología se puede aplicar a cualquier sector”, asegura Adrián Rodríguez, quien explica que, aunque todavía no han desarrollado el piloto, están en una aceleradora de la automoción en Vigo, “aunque con el tema de la pandemia y la crisis de los chips se nos ha complicado un poco, pero está ahí como algo futurible”.