Según el informe ‘Los flujos migratorios en España durante la crisis’, publicado por el Banco de España

“La persistencia de flujos importantes de emigración” podría incidir en el crecimiento de la economía española

“La persistencia de flujos importantes de emigración podría llegar a tener un efecto significativo sobre el crecimiento potencial de la economía española, lo que enfatiza la necesidad de maximizar los esfuerzos encaminados a reducir la elevada tasa de paro”. Esa es una de las conclusiones del informe ‘Los flujos migratorios en España durante la crisis’, publicado por el Banco de España.

“La persistencia de flujos importantes de emigración” podría incidir en el crecimiento de la economía española

“La persistencia de flujos importantes de emigración podría llegar a tener un efecto significativo sobre el crecimiento potencial de la economía española, lo que enfatiza la necesidad de maximizar los esfuerzos encaminados a reducir la elevada tasa de paro, así como a propiciar un marco laboral que facilite el regreso futuro de las personas que han emigrado durante la crisis”. Esa es una de las conclusiones del informe ‘Los flujos migratorios en España durante la crisis’, elaborado por Mario Izquierdo, Juan Francisco Jimeno y Aitor Lacuesta, de la Dirección General del Servicio de Estudios y publicado en el boletín de septiembre del Banco de España.

En las conclusiones del informe se explica que “con la llegada de la crisis, el saldo migratorio de la economía española ha cambiado radicalmente. Si, con anterioridad, España destacaba por recibir unos flujos de inmigración muy elevados, que llegaron a alcanzar alrededor del 2% de la población total en un solo año, desde 2010 el saldo migratorio se ha vuelto negativo y en 2013 el número de emigrantes ha superado el medio millón de personas”. Aclara que, “hasta la fecha, la mayor parte de estas salidas de población (en torno al 85%) están protagonizadas por extranjeros residentes en España, si bien los españoles muestran una propensión creciente a emigrar en el período más reciente y parecen responder de manera similar a los factores que influyen en la emigración de los extranjeros (tasas de desempleo en la región de origen y en el país de destino)”.

“De este modo ­–continúa explicando el informe publicado por el Banco de España–, los reducidos niveles de los flujos de salida de españoles que se observan desde el inicio de la crisis vendrían explicados por los mayores costes de movilidad y la ausencia de los llamados ‘efectos de red de acogida’. La composición por niveles de educación de estos flujos de emigración, inicialmente dominada por personas de niveles educativos altos, estaría cambiando recientemente, al aumentar el peso de los grupos de niveles educativos más bajos, reflejando, probablemente, el mayor impacto de la crisis sobre estos colectivos de trabajadores”.

Por último, en las conclusiones del informe se especifica que “en lo que respecta tanto al tamaño como a la composición de la población activa por nivel educativo, el cambio de signo del saldo migratorio puede tener implicaciones relevantes”.