‘Gente que se mueve’, un estudio de la cultura política y la acción de la emigración
‘Gente que se mueve’, un libro editado por el Centro de Documentación de la Migraciones y coordinado por la historiadora Ana Fernández Asperilla, estudia la cultura política y la acción colectiva de la emigración española, a partir del análisis de las colonias españolas residentes en Francia, Reino Unido, Alemania y Suiza. También se detiene en el sindicalismo del país de acogida, en el caso alemán, y en la presencia femenina en el asociacionismo en Francia.
El libro se estructura en seis capítulos de diferentes autorías que siguen a una amplia introducción en la que Fernández Asperilla explica, entre otras cosas, que los trabajadores españoles que emigraron a Europa a partir de la segunda mitad del siglo XX eran en su mayoría jóvenes de origen rural, con una formación muy baja y con una cualificación profesional muy deficiente.
La salida fue alentada por el franquismo pues la emigración suponía un alivio para la economía española en tanto que situaba los excedentes de mano de obra en el extranjero y obtenía divisas.
Los emigrantes organizaron su vida en torno al trabajo, al ahorro y al retorno, que era su objetivo, y esos ejes fijaron el espacio de socialización –centros de trabajo, asociaciones étnicas y organizaciones sindicales, en menor medida– que fueron el germen de una cultura cívica basada en la participación política. Se transformaron en interlocutores del poder local o regional y en redes sociales de comunicación.
“La cultura política de la emigración se identifica con la democracia, surgida tras la derrota del fascismo en la Segunda Guerra Mundial. En Europa los emigrados españoles aprendieron el funcionamiento de los sistemas democráticos y accedieron a las prestaciones del Estado de Bienestar inexistentes por aquel entonces en la España de Franco, donde la Seguridad Social no se creó hasta 1966”, explica Fernández Asperilla.
Estructura
El estudio se presenta en seis capítulos. El primero se refiere a la emigración española, su asociacionismo y cultura política en Francia y está firmado por Fernández Asperilla y José Babiano; el segundo, al significado y articulación de espacios asociactivos españoles en el Reino Unido, algo entre lo político y lo sociocultural, y está firmado por Alicia Pozo Gutiérrez; el tercero es de Carlos Sanz Díaz y versa sobre la fuerza de la unión, la sociabilidad, las culturas políticas y la acción colectiva en la primera generación de emigrantes españoles en Alemania (1960-1973).
Los emigantes españoles en Suiza, su movilización y militancia, es el objeto del cuarto capítulo, de Sébastien Farré; el del quinto, la Unión General de los Trabajadores y los sindicatos alemanes frente a la emigración española en la República Federal de Alemania (1960-1964), que aborda Antonio Muñoz Sánchez; y, por último, el sexto versa sobre emigración, cultura política y género. Es un análisis a partir de la presencia femenina en el asociacionismo de los españoles en París durante la segunda mitad del siglo XX y lo firma Ana Fernández Asperilla.