Los CRE de Alemania debaten propuestas innovadoras para potenciar su eficacia

Once representantes de los tres Consejos de Residentes Españoles (CRE) constituidos actualmente en Alemania, asistieron a finales del pasado mes de noviembre en Nürnberg a una reunión, organizada por el presidente del CRE de Hamburgo, Ramón Polanco, durante la cual se presentaron y debatieron ideas innovadoras para modernizar estos organismos y se trataron los problemas clásicos con los que vienen confrontándose los CRE desde su creación. La falta de autonomía y la baja participación en las elecciones de sus miembros son las principales dificultades con que se encuentran los consejeros.
Siguen teniendo que solicitar permiso a los respectivos Consulados para desplazarse y reunirse, lo que generalmente se les concede sin problemas, pero supone una traba burocrática que les roba tiempo y resta agilidad, según Polanco. También sigue siendo muy bajo el porcentaje de votantes, a pesar del interés y de los esfuerzos realizados últimamente para incrementarlo. Por eso, uno de los principales objetivos de los CRE en este país es conseguir, no sólo que se les conozca más, sino que se les reconozca más.
Persiguiendo este fin, el presidente del Consejo de Residentes de Baviera y consejero general del CGCEE por Alemania, Antonio Fernández Rivera, propuso incorporar el trabajo en red a los CRE, para poder comunicarse adecuadamente entre ellos, difundir más su labor y poder establecer relaciones con los colectivos a los que aún no llegan. Esto les permitiría visualizar los problemas del movimiento asociativo y realizar con mayor eficacia sus funciones como consejeros consultivos. La idea es expandir el trabajo de los CRE, abrirse y hacer llegar a todas las asociaciones sus propuestas y programas de actividades, para que puedan beneficiarse de ellas. También insistió en la conveniencia de dar más a conocer los logros de la institución y hacer públicas sus convocatorias, para que haya más participación y cercanía con la gente.
Para incentivar la creación de nuevos Consejos en Alemania, donde por el número de españoles inscritos en el CERA habría cabida para otros tres, los asistentes a la reunión en Nürnberg decidieron formular una carta, que firmarán sus tres presidentes, dirigida a los consulados de Düsseldorf, Berlín, Frankfurt y Stuttgart, pidiéndoles que apoyen la creación de estas instituciones en sus demarcaciones, donde actualmente no existen a pesar de que estos distritos, con excepción de Berlín, registran el mayor número de españoles. Los consejeros se mostraron dispuestos a organizar encuentros en dichas ciudades, para informar a la ciudadanía española allí residente sobre las funciones de los CRE y promover su constitución.
Otro de los propósitos de los consejeros actuales, especialmente de las dos consejeras asistentes al encuentro, Lola Sisternas y Esther del Río, es conseguir que la participación de la mujer sea mayor, ya que de los veintiún consejeros de Alemania, sólo siete son mujeres, un desequilibrio que les gustaría corregir. Para ello, formularon propuestas cuya viabilidad será discutida posteriormente.
Los consejeros trataron también temas que, a pesar de contemplarse como derechos en el Estatuto de la Ciudadanía Española en el Exterior, todavía no se están aplicando satisfactoriamente, como es el caso de las pensiones de jubilación y del derecho al voto y participación electoral de los ciudadanos españoles en el exterior. Sobre la última reforma de la nacionalidad, que da la oportunidad a los descendientes de los españoles que hayan tenido que salir de España entre el 1 de enero de 1936 y el 31 de diciembre de 1955 a recuperar la nacionalidad de origen, el presidente del CRE de Hamburgo dice que ese derecho tendría que hacerse extensible a todos los descendientes de españoles en el exterior, sin restricciones ni limitaciones temporales.
Para informar sobre el tema de la nacionalidad asistió a la reunión un funcionario del Consulado de Munich. También asistió un profesor de Stuttgart, para hablar sobre la actual situación de las clases de Lengua y Cultura española para los hijos y nietos de españoles, una preocupación continuada del colectivo. Algunos Länder alemanes, que ofrecían estas clases complementarias de lengua materna a hijos de inmigrantes, van dejando paulatinamente de ofrecerlas, alegando que ya están integrados en la sociedad alemana. Los representantes del CRE, respondiendo a los intereses de los alumnos españoles y sus familias, quieren conseguir que las clases se mantengan, preocupación que comparten con las Asociaciones de Padres de Familia, entre otros colectivos. Polanco dice que, según informes de la Consejería de Educación de la Embajada de España en Berlín, se garantizaría la continuidad de las clases en aquellos lugares donde haya catorce o más alumnos españoles, un número difícil de alcanzar actualmente, por lo que piden mayor flexibilidad para que no se cierren Aulas.
En el ámbito de la formación profesional para los jóvenes, se habló de la conveniencia de ayudar a promocionar el programa hispano-alemán de formación dual de la Consejería de Trabajo de Berlín, que ofrece a las chicas y chicos españoles que se encuentren realizando un aprendizaje en Alemania, la posibilidad de aprender el español técnico propio de su profesión y de realizar prácticas en empresas en España.
Un espacio importante se concedió también a los servicios de atención a la persona mayor. En este sentido, se comentó que se debería de ampliar la oferta del programa de vacaciones del Ministerio de Trabajo e Inmigración español y del Imserso, tanto en número de plazas como en variedad de destinos, y ofrecer estancias en los balnearios de la zona del norte peninsular a los jubilados residentes en Alemania, algo de lo que pueden disfrutar los jubilados de España, según informaron. Sobre los destinos ofrecidos hasta ahora, se criticó que se eligieran para las vacaciones de los mayores hoteles situados en zonas de bares y discotecas, donde el excesivo ruido nocturno les impide descansar. Las condiciones sanitarias deficientes y poca calidad de algunos de estos hoteles fueron ya motivo de quejas por parte de un grupo de beneficiarios del programa residentes en Baviera.