ANTE LAS ELECCIONES DEL PASADO DÍA 22, LAS PRIMERAS EN LAS QUE SE APLICA

La Coordinadora en Alemania se pronuncia nuevamente contra la reforma de la Loreg

La Coordinadora Federal del Movimiento Asociativo en Alemania emitió la semana pasada un comunicado en el que nuevamente se pronuncia sobre las consecuencias que conlleva la reforma de la Ley Electoral, ante las elecciones autonómicas del pasado 22 de mayo de 2011.
La Coordinadora en Alemania se pronuncia nuevamente contra la reforma de la Loreg

La Coordinadora Federal del Movimiento Asociativo en Alemania emitió la semana pasada un comunicado en el que nuevamente se pronuncia sobre las consecuencias que conlleva la reforma de la Ley Electoral, ante las elecciones autonómicas del pasado 22 de mayo de 2011. En él expresa “el sentimiento que cientos de personas activas en nuestra organización, que reflejan a la vez la opinión de miles emigrantes españoles en Alemania, han venido expresando en diferentes foros de discusión y que la Directiva federal hace suya”.

 

Según la Coordinadora en Alemania, la reforma de la Ley Electoral pactada por PSOE, PP, CiU y PNV, “que recorta derechos a 1,5 millones de electores españoles por el mero hecho de vivir en el exterior, significa para los emigrantes españoles el mayor atentado contra la democracia, después del intento de golpe de estado del 23 de febrero de 1981”.
“Esta reforma de la Ley Electoral prevé la privación del derecho de voto en las elecciones municipales de todos los españoles que residimos fuera de España, y dificulta el ejercicio en las elecciones legislativas y autonómicas, ya que instaura el sistema del voto rogado que obliga a cada elector a solicitar expresamente, el envío de la correspondiente documentación electoral”, recuerda, instando a que “hay que pararse un momento a pensar en la aberración cometida”.
“Los representantes políticos, a los que se les llena la boca diciendo que son los representantes de los ciudadanos, deciden privar y dificultar enormemente a un sector de la sociedad, es decir a los españoles emigrantes, de un derecho básico y fundamental, que es el derecho a voto, y una persona que no vota no existe políticamente”, continúa.
“Como herencia de nuestra historia, nos encontramos aquí con un hecho incuestionable que es la existencia de alrededor de más de un millón y medio de españoles residiendo fuera del territorio español. Una realidad que por su condición y características singulares exige un tratamiento específico que garantice a este colectivo el pleno ejercicio de los derechos y deberes recogidos en la constitución (primer párrafo del prólogo del Estatuto de la Ciudadanía Española en el Exterior)”, expone.
Recuerda que la Constitución española dice que “son electores y elegibles todos los españoles que estén en pleno derecho de sus derechos políticos. La ley reconocerá y el Estado facilitará el ejercicio del derecho de sufragio a los españoles que se encuentren fuera del territorio de España” (Artículo 65) y que la Ley del Estatuto de los Ciudadanos Españoles en el Exterior precisa que “los españoles que residen en el exterior tienen derecho a ser electores y elegibles, en todos y cada uno de los comicios, en las mismas condiciones que la ciudadanía residente en el Estado español, en los términos previstos en la normativa de aplicación”. Amparada en estos textos considera que “podemos decir que la actual Ley Orgánica de Régimen Electoral General, y sus disposiciones de aplicación, no garantizan adecuadamente el ejercicio del derecho a voto por parte de toda la ciudadanía en condiciones de igualdad, ya que perjudica a los españoles que, por diversos motivos, pero principalmente por razones de exilio político o económico, nos encontramos fuera del territorio nacional”.
“De ahí, que desde finales de los años 1970, los españoles del exterior venimos reclamando, de manera insistente, medidas de equiparación de los derechos electorales entre todos los españoles, los que residen en territorio nacional y los que no”, sigue.

Representación parlamentaria
Admite que “avances significativos se han producido, pero no obstante, queda por emprender, como venimos repitiendo desde hace más de treinta años, una reforma que al igual que han desarrollado nuestros principales países vecinos para con sus respectivos ciudadanos en el exterior (Portugal, Francia, Italia, etc.) permita una representación directa en el Parlamento y en el Senado del colectivo de ciudadanos españoles que residen fuera del territorio nacional”.
“Cualquier persona con derecho a voto en España, puede decidir en un municipio sobre nuestros bienes, mientras un español que reside fuera de España tiene que quedarse de brazos cruzados. El hecho de que unos representantes políticos con tanta falta de sensibilidad pueden sentarse en unos escaños que están sufragados por esos ciudadanos emigrantes que dicen representar es una paradoja. Queremos remarcar que los españoles emigrantes en Europa remitieron más de 7.000 millones de euros a España en el año 2009, país del que supuestamente estamos desarraigados”, plantean.

Preguntas
“¿Por qué no podemos votar los emigrantes? ¿Por qué se nos ha dificultado el ejercicio de nuestro derecho a voto? ¿Por qué los dos partidos políticos mayoritarios en España, PP y PSOE, que se vienen alternando sucesivamente en el poder desde 1982, se han concertado, con la complicidad culpable del BNG, PNV y CiU, para cometer un verdadero desfalco democrático a la Constitución Española, arrebatando a los casi 2 millones de emigrantes españoles en el exterior, de los cuales 1 millón cuatrocientos mil son electores, los derechos fundamentales de participación política garantizados en nuestra Carta Magna?”, se cuestionan.
“Como trabajadores, obreros y españoles y emigrantes esta reforma electoral es una bofetada en toda regla, considerando todo lo que aportamos a España y no se sabe reconocer ni agradecer por parte de los principales partidos políticos en España. Dijo una vez un ministro español que España tenía una gran deuda con sus emigrantes. ¿Es éste el pago a esa deuda? Nosotros nos preguntamos: ¿Dónde vota el señor Zapatero, el señor Rajoy o el señor Blanco? ¿Dónde residen generalmente durante todo el año? Nosotros no residimos en nuestros municipios y por eso se nos castiga quitándonos el derecho a votar, mientras ellos pueden votar sin ninguna complicación. ¿Por qué existen diferencias en el trato de unos ciudadanos y otros?”.
 
Desafección
“Reformas de este tipo solamente propician la desafección de los ciudadanos por la política que ya de por sí va aumentando día tras día y estamos obligados a luchar contra la desafección hacia la política, que está cundiendo a pasos agigantados entre la ciudadanía española en general y en la que reside en el exterior en particular, como lo muestran las tasas de participación en estos comicios”, afirman.
La Coordinadora señala que “la aplicación de las nuevas disposiciones legislativas ya está teniendo nefastas consecuencias en cuanto al voto rogado, pues, a fecha de hoy, menos del 10 por ciento de los ciudadanos en el exterior han solicitado su voto. En los últimos comicios la tasa de participación orbitó en torno al 30%, lo que da idea de los estragos de la Ley PSOE-PP-BNG-PNV-CiU”.
“No es, por lo tanto, de extrañar que todo indique que en el exterior la participación en las próximas autonómicas no superará el 7% y que el porcentaje de voto nulo será elevado. Es también de prever que la extremada complicidad del procedimiento de voto haga que muchos electores que han solicitado el voto no lo emitan por incomprensión del procedimiento, o lo hagan erróneamente, aumentando la cantidad de votos nulos. Todo ello, sin contar que los tiempos postales harán que un elevado número de votos llegue fuera de plazo”, manifiesta.
“Desafección, desencanto, desengaño, es lo que cunde en nuestra ciudadanía. Y es la consecuencia de la manipulación que el PP y el PSOE están haciendo de la Constitución, y ello para favorecer unos intereses que, objetivamente, son ocultos, pues a fecha de hoy todavía no se ha dado una explicación racional del porqué, de un plumazo, sin debate con los interesados, y a espaldas de la sociedad española, han roto al Pueblo Español en dos pedazos: los que gozan de plenos derechos y los que no. Los que son españoles de primera, y los que solo lo son de segunda. Como si el hecho de vivir lejos del territorio nacional no fuese ya en sí una desventaja”, declaran.
Opina asimismo que “la democracia de tanto hablar de ella se desgasta. La democracia se consigue practicándola. Si se quiere convertir la necedad en virtud significa que algo no está funcionando”.
“Nos avergonzamos en el exterior de esta casta parlamentaria que no ha sabido ponerse a la altura de las reivindicaciones de la emigración española, dando una respuesta positiva a la representación directa de los emigrantes españoles, tanto en el Parlamento como en el Senado, sino que ha hecho todo lo contrario. ¿Será para desviar la atención sobre su incompetencia e insensibilidad con y para temas que afectan a los emigrantes españoles en el exterior?”, acaba.