El nivel de autofinanciación supera el 45 por ciento, según las cuentas anuales

El Cervantes logró un beneficio de casi 11 millones en 2019 gracias a la certificación y los cursos de español

El Instituto Cervantes obtuvo en el año 2019 un resultado presupuestario de casi 11 millones de euros, lo que supuso un incremento del 57,33% respecto al ejercicio anterior. Este aumento se consiguió gracias fundamentalmente a las pruebas de certificación (los diversos diplomas que administra) y a las matrículas de los cursos de español.

El Cervantes logró un beneficio de casi 11 millones en 2019 gracias a la certificación y los cursos de español

El Instituto Cervantes obtuvo en el año 2019 un resultado presupuestario de casi 11 millones de euros (en concreto, 10.861.177,42), lo que supuso un incremento del 57,33% respecto al ejercicio anterior. Este aumento se consiguió gracias fundamentalmente a las pruebas de certificación (los diversos diplomas que administra) y a las matrículas de los cursos de español. Así figura en la resolución por la que se publican las cuentas anuales de 2019, que ha publicado el pasado 23 de enero en el Boletín Oficial del Estado (BOE).

Las pruebas de certificación supusieron un incremento de ingresos del 47,37% con respecto a los ingresos percibidos en 2018. Los exámenes son los del Diploma oficial de Español DELE, las pruebas CCSE (conocimientos constitucionales y socioculturales de España) y SIELE (Servicio Internacional de Español como Lengua Extranjera).

En cuanto a los cursos de español que impartió en 2019 tanto en sus centros como a través de internet, los ingresos que el Instituto percibió por matrículas crecieron un 4,47% con respecto al ejercicio anterior.

Entre los diferentes exámenes de certificación destacaron por su importancia económica las pruebas CCSE, que el Instituto Cervantes administra desde octubre de 2015 y que deben superar todos los aspirantes a la nacionalidad española por residencia en España o por su origen sefardí. En 2019 se realizaron 10 convocatorias (una al mes, excepto en agosto y diciembre), que supusieron unos ingresos de 11,14 millones de euros, a los que hay que restar los 3,2 millones que el Instituto liquidó a los centros de examen.

Los ingresos propios que consiguió el Instituto Cervantes en 2019 por su actividad docente, certificadora y cultural superaron los 55,28 millones de euros, lo que equivale a una autofinanciación de más del 45%. El resto de los ingresos (un 54% del total) los obtuvo a través de las transferencias de la Administración General del Estado.

Mayoría femenina

En cuanto a su plantilla, la institución contaba a 31 de diciembre de 2019 con un total de 938 empleados, de los que 219 trabajaban en la sede central de España (Madrid y Alcalá de Henares) y 719 lo hacían en los centros y Aulas Cervantes distribuidos por todo el mundo. La mayoría de la plantilla es femenina, con un total de 606 mujeres frente a 332 varones.  

En la sede central, son mujeres la mayoría de los puestos de responsabilidad (directores y subdirectores de área, jefes de departamento y responsables de unidad). Suman 26 féminas frente a 15 varones, sin contar al director y a la secretaria general. En 2018, había 24 mujeres frente a 17 hombres. En los puestos técnicos, hay 64 mujeres frente a 26 hombres. En los administrativos, también son mayoría, 60 frente a 24.

En los centros, con un total de 455 mujeres y 264 hombres, hay 21 directoras de centros, frente a 37 directores. En 2018 había 17 mujeres directoras y 38 directores. Los grupos laborables más numerosos son administrativos (con 187 mujeres frente a 59 varones) y profesores (154 frente a 91).

Descenso de ingresos en 2020

En la memoria publicada en el BOE se concluye con un breve capítulo titulado ‘Hechos posteriores al cierre’ del ejercicio 2019, en referencia al Covid-19. En él menciona el obligado cierre de buena parte de la actividad presencial en todos los centros a lo largo de 2020, el trasvase de los cursos presenciales a cursos en línea y la reprogramación de la actividad cultural y bibliotecaria para ofrecer servicios y contenidos en red.

Apunta que “los ingresos por certificación son los que se han visto más afectados” (se han cancelado algunas convocatorias) y que la actividad en algunos centros se va recuperando poco a poco la actividad presencial “con muchas limitaciones e incertidumbres”, mientras que otros siguen afectados por los confinamientos en los respectivos países.

Esta situación “supondrá en el ejercicio 2020 un descenso importante de los ingresos obtenidos por las actividades propias del organismo, sin que en este momento sea posible cuantificar el alcance del mismo”.