Rubio pidió que no se pierda lo realizado en favor de las casas y lo que está por hacer

Los jóvenes castellanos y leoneses del exterior detallan las debilidades y fortalezas de las entidades de la colectividad

Los jóvenes castellanos y leoneses en el exterior aprovecharon el II Congreso Internacional de Centros que se celebró el pasado fin de semana en Salamanca para detallar algunas de las debilidades, fortalezas, amenazas y oportunidades que les brinda a la colectividad su pertenencia a las entidades asociativas erigidas en la diáspora.

Los jóvenes castellanos y leoneses del exterior detallan las debilidades y fortalezas de las entidades de la colectividad
Wendy Lamas
Wendy Llamas, durante su intervención.

La mesa redonda dedicada a los jóvenes, en la que intervinieron representantes llegados de distintos lugares de América, dejó en evidencia que estas organizaciones, que los mantienen vinculados a su lugar de origen, acusan el envejecimiento de sus juntas directivas, falta de solvencia económica, pérdida de identidad y desinterés por parte de sus socios, así como falta de comunicación.

Por el contrario, les proporcionan a sus asociados experiencias comunes y les ofrecen trato personalizado, así como la organización de eventos y actividades deportivas y culturales en los que poder participar de modo individual y colectivo. También les facilitan contactos y favorece el conocimiento de la historia y la cultura del territorio, al tiempo que facilita el arraigo y fomenta el sentido de pertenencia al lugar de origen.

Wendy Llamas Ramos, presidenta del colectivo de la Juventud de la Confederación Internacional de Casas Regionales de Castilla y León y de la Asociación de Jóvenes y Mujeres Retornadas de esa región, fue la encargada de facilitar la relación de los puntos que se acordaron en el grupo de trabajo, que no son comunes a todas las entidades, aclaró, pero que reflejan, de manera global, los problemas y ventajas que conlleva ser emigrante y estar vinculado a un centro castellano y leonés en América.

Junto a estas debilidades y fortalezas, relató una serie de amenazas que ponen en la cuerda floja a estas entidades, como es el fallecimiento de los miembros de las juntas, la falta de relevo en los cargos y de interés de las nuevas generaciones. Frente a ello, habló de las oportunidades que se les abren en materia de turismo, así como para incorporar a familiares a las entidades y el apoyo económico de que disponen, tanto de la Junta y de las diputaciones, para desarrollar programas en las asociaciones y para disfrutar de becas para formarse en la comunidad autónoma.

Tras las intervenciones de los jóvenes, que pusieron en valor sus experiencias como integrantes de estos centros, e hicieron partícipes al auditorio del sentimiento de arraigo que les une a la tierra de sus progenitores, tomó la palabra la presidenta de la Agrupación de Sociedades Castellanas y Leonesas en Cuba, María Antonia Rabanillo, quien habló de la importancia de “inculcar en la juventud el amor por su tierra”, a lo que contribuye, destacó, el programa ‘Raíces’ de la Junta. Gracias a la participación en esta iniciativa, que “ayuda a permanecer en los centros”, se “conoce el pueblo”, afirmó, por lo que “hay que reafirmarse en estos programas”, sentenció.

La ponencia de jóvenes también contó con la participación del director general de Acción Exterior de la Junta, Fernando Rubio, quien aludió al interés del grupo por participar en el Congreso, lo que ya de por sí demuestra “un compromiso” por estos asuntos, dijo.

“Que no se pierda lo realizado y lo que queda por hacer en el futuro” de estas sociedades, pidió Rubio, al tiempo que reclamó una “adaptación” de las casas “a los nuevos tiempos con el uso de las nuevas tecnologías”.

“Todos cabemos en este modelo”, les dijo, y añadió: “Vosotros sois modelo para todos”.