TAMBIéN PARTICIPARON EL PRESIDENTE Y LA CONSEJERA DE LA PRESIDENCIA DE CANTABRIA

Miranda participó en la celebración de los 80 años del Centro Gallego de Santander

El presidente del Gobierno regional de Cantabria, Ignacio Diego, y la consejera de Presidencia y Justicia, Leticia Díaz, compartieron la celebración de los actos por los 80 años del Centro Gallego de Santander, que contaron, en representación del Gobierno y pueblo gallegos, con la presencia del secretario xeral de Emigración, Antonio Rodríguez Miranda. También acudieron varios concejales de la corporación municipal santanderina.

Miranda participó en la celebración de los 80 años del Centro Gallego de Santander
Ignacio Diego y Rodríguez Miranda, durante la celebración.

El presidente del Gobierno regional de Cantabria, Ignacio Diego, y la consejera de Presidencia y Justicia, Leticia Díaz, compartieron la celebración de los actos por los 80 años del Centro Gallego de Santander, que contaron, en representación del Gobierno y pueblo gallegos, con la presencia del secretario xeral de Emigración, Antonio Rodríguez Miranda. También acudieron varios concejales de la corporación municipal santanderina.

Esta presencia institucional de máximo rango da fe de la capacidad de integración de la colectividad gallega en la región y del alto aprecio que la sociedad de acogida tiene por la diáspora allí asentada. A esa hermandad se refirieron tanto el presidente cántabro como el secretario xeral gallego al firmar, invitados por él presidente del Centro, José Antonio Otero Hermida, en el libro de honra de la entidad.

Así, Diego destacó en su dedicatoria la unión de los pueblos gallego y cántabro “que compartimos mar, paisaje, tradiciones y orgullo de ser todos españoles”, añadiendo su felicitación por la actividad de este centro, a lo que deseó una larga vida “para continuar estrechando enlaces entre ambas comunidades autónomas”. Este mismo aspecto del trabajo en común entre cántabros y gallegos fue destacado por el secretario xeral de Emigración, Antonio Rodríguez Miranda.

Centro pujante

Antes de los actos oficiales, Miranda se entrevistó con los socios de la entidad, y con la directiva de la misma, pionera en los procesos de unión, pues fue hace 80 años cuando precisamente se habían unido la Casa de Galicia y la Colonia Gallega para formar el Centro. Sus representantes informaron al responsable de Emigración de la Xunta de los objetivos de presente y futuro de la entidad, entre los que destaca una mayor implicación de la juventud en su actividad, para garantizar plenamente el relevo generacional en una colectividad ejemplar de la Galleguidad.

Así, entre las múltiplas actividades de relevancia culturales y sociales que el Centro Gallego de Santander organiza, y que trascienden las fronteras cántabras, está la convocatoria de los premios literarios Rosalía de Castro y Julio Camba. Precisamente, coincidiendo con el 80 aniversario, se entregaron los galardones a los ganadores de este segundo certamen, uno de ellos procedente de la comunidad autónoma vecina de Castilla y León, y otro de Andalucía, lo que muestra por una parte la amplia relevancia de esta convocatoria, y de otra, la honda interrelación entre las distintas colectividades gallegas de la diáspora.

Además de la firma en el libro de honra, de la misa conmemorativa previa, de la entrega de los premios Julio Camba, y de las insignias a los socios con más de 50 años en la entidad, también tuvo lugar la inauguración de una muestra sobre los 80 años de la entidad, exposición de imágenes fotográficas y documentos –además de todos los ejemplares de la revista del Centro desde su fundación– que suponen “un repaso de la historia de Galicia en Cantabria, y también de la propia historia de Cantabria”, según aseguró el secretario xeral de Emigración.

Rodríguez Miranda valoró muy positivamente la jornada de este 80 aniversario del Centro Gallego de Santander, “una entidad modélica en muchos aspectos, que representa con total dignidad y altura al pueblo gallego en esa tierra hermana que es Cantabria”, según su propia definición.