Ribeira Sacra, Illas Atlánticas y el Ferrol de la Ilustración optan a convertirse en Patrimonio Mundial de la Humanidad

Galicia pone en valor a nivel mundial su riqueza paisajística y monumental

Tres enclaves y una técnica constructiva aspiran en Galicia a convertirse en Patrimonio de la Humanidad y Cultural Inmaterial por la Unesco y equipararse así al reconocimiento del que gozan ya el Casco Viejo compostelano, el Camino de Santiago, las Murallas de Lugo y la Torre de Hercules. Se trata de la Ribeira Sacra, el espacio natural marítimo terrestre configurado por las Illas Atlánticas –Cíes, Ons, Sálvora y Cortegada–, el Ferrol de la Ilustración y la técnica de construcción de la Pedra Seca, que destacan por su riqueza paisajística y monumental y como expresión cultural.

Galicia pone en valor a nivel mundial su riqueza paisajística y monumental
citar/mention:
CEDIDA POR TURISMO DE GALICIA/GIVEN UP BY TURISMO DE GALICIA
El Cañón del Sil, en Parada de Sil, en plena Ribeira Sacra.

Tres enclaves y una técnica constructiva aspiran en Galicia a convertirse en Patrimonio de la Humanidad y Cultural Inmaterial por la Unesco y equipararse así al reconocimiento del que gozan ya el Casco Viejo compostelano, el Camino de Santiago, las Murallas de Lugo y la Torre de Hercules. Se trata de la Ribeira Sacra, el espacio natural marítimo terrestre configurado por las Illas Atlánticas –Cíes, Ons, Sálvora y Cortegada–, el Ferrol de la Ilustración y la técnica de construcción de la Pedra Seca, que destacan por su riqueza paisajística y monumental y como expresión cultural.

Galicia cuenta en la actualidad con cuatro enclaves históricos con el reconocimiento de Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Unesco: el Casco Viejo de Compostela, el Camino de Santiago, las Murallas romanas de Lugo y la Torre de Hércules. Tres más aspiran a tal denominación con el objetivo de ser también reconocidos como bienes universales y poder gozar de los recursos necesarios para su preservación. Hablamos de los espacios naturales de la Ribeira Sacra y de las Illas Atlánticas, así como de la ciudad de Ferrol, cuyo legado y diseño arquitectónico se conservan hoy en día como producto de la época de la Ilustración. A ellos hay que sumar la técnica de la Pedra Seca que dio como resultado construcciones que prescinden de argamasa o mortero para erigirse  y que bien podría ser considerada igualmente por la Unesco Patrimonio Cultural Inmaterial.

Numerosos son los ejemplos de esta técnica que se reparten por todo el territorio, si bien son especialmente relevantes los que se encuentran en las comarcas pontevedresas de Deza y Terra de Montes; en Bergantiños (Terra de Soneira, Xallas y Fisterra) y en la Terra Chá y la Ribeira Sacra.

En este apartado, Galicia forma parte de la candidatura conjunta impulsada por Grecia y Chipre para poner en valor esta técnica, en la que también participan Suiza, Croacia, Eslovenia, Francia, Italia y otras autonomías españolas de España, como Andalucía, Asturias, Baleares y Cataluña, en las que este estilo de construcción tradicional también ha dejado su impronta. 

Como máximo exponente de la relación entre el hombre y la naturaleza, el Consejo de Patrimonio Histórico –órgano oficial en el que están representados el Gobierno central y las comunidades autónomas– aprobó la propuesta para que la Ribeira Sacra forme parte de la lista de Patrimonio Mundial de la Unesco. Esta inclusión, que se decidirá en la reunión del Comité del Patrimonio Mundial, supondría un importante impulso para dicho enclave en lo que atañe a la atracción turística y la desestacionalización de la demanda y llevará parejo un incremento del valor añadido para los distintos productos locales, en especial, para los vinos de la Denominación de Origen. Ello también contribuiría a dar impulso al desarrollo de la zona en términos económicos y de creación de empleo en el espacio rural.

La Ribeira Sacra, que transcurre por tierras de Lugo y Ourense, se muestra como uno de los lugares más singulares de Galicia. Una tierra marcada por los ríos Miño y Sil que se abren paso en un paisaje de montaña y lo van moldeando en un hermoso enclave. Su riqueza arquitectónica se refleja en las abundantes construcciones religiosas representativas de estilo románico en Europa.

Sus más de 1.200 bienes singulares se reparten por 22 ayuntamientos como bienes de interés cultural; inmuebles de categoría monumental, arqueológico, conjuntos históricos y lugares de valor etnológico; bienes muebles, manifestaciones del patrimonio inmaterial, torres o lugares arqueológicos; inmuebles catalogados en el ámbito del paisaje cultural de la Ribeira Sacra, y bienes inmuebles de carácter sacro catalogados en todo el territorio de la Ribeira Sacra.

En los últimos años, este enclave evolucionó en la confirmación de su identidad al aprobar el Consello de la Xunta el decreto por el que se declara Bien de Interés Cultural (BIC) el paisaje cultural de la Ribeira Sacra, con lo que queda protegido al máximo nivel con vistas a ser incluido en la lista de elementos del Patrimonio Mundial de la Unesco.

Illas Atlánticas

Otro enclave que aspira a gozar del reconocimiento de la Unesco es el constituido por las Illas Atlánticas; un espacio marítimo terrestre formado por los archipiélagos de las islas Cíes, Ons, Sálvora y Cortegada que dispone de un importante patrimonio natural y cultural. Es por ello que la Xunta inició el proceso para su reconocimiento por la Unesco como bien de valor universal excepcional, y su inclusión en la lista del Patrimonio Mundial.

Por su acreditado valor excepcional, su integridad territorial, los niveles de protección de que ya dispone y la existencia de una unidad de gestión en torno a él, el Parque Nacional Illas Atlánticas bien merece tal reconocimiento, según la Xunta.