Galicia contará con las mejores residencias de Europa para envejecer

Los ciclos vitales han cambiado durante los últimos años en las sociedades más avanzadas. Superar la barrera de los 65 años no representa ya terminar la etapa laboral, sino dar comienzo a un período en el que dar rienda suelta a sueños aparcados y disfrutar de lo adquirido. Galicia se ha convertido en un lugar donde las personas mayores tienen a su alcance más opciones para envejecer. Aquellos que prefieren no renunciar a su entorno, a sus compañías de siempre y a sus locales de confianza, tienen la posibilidad de vivir en su hogar y recibir los mejores cuidados y servicios, mientras aquellos que buscan un lugar donde ser atendidos de forma integral tienen a su alcance una amplia red de centros residenciales públicos y perfectamente acondicionados. 

Esta red se verá mejorada y ampliada sustancialmente en los próximos años gracias a la colaboración entre el Gobierno gallego y la Fundación Amancio Ortega. La entidad, que lleva el nombre del mayor accionista de la multinacional Inditex, construirá y financiará siete residencias públicas en las siete principales ciudades gallegas: A Coruña, Ferrol, Lugo, Ourense, Pontevedra, Santiago de Compostela y Vigo. Unos centros que dotarán a las urbes de Galicia de los mejores centros residenciales de Europa, totalmente equipados y con las mejores infraestructuras. 

Proyecto ambicioso

Para ello, las administraciones y la propia fundación se han volcado en buscar la mejor ubicación para cada una de estas residencias. Cada trámite es tratado con la ilusión propia de un proyecto ambicioso que dotará a Galicia de 900 plazas residenciales totalmente gratuitas en las que sus usuarios podrán disfrutar de servicios innovadores como unidades psicogeriátricas especializadas en el tratamiento del Alzheimer y otras patologías similares. Además, su construcción ayudará a la creación de empleo en un sector en auge como es el de los servicios sociales, con 800 nuevos puestos de trabajo directos. 

Galicia ha incrementado un 42% el número de plazas en residencias de personas mayores durante los últimos diez años. Actualmente cuenta con 8.000 plazas públicas que seguirán creciendo con estas nuevas 900. Se trata de un plan que el gobierno de la Xunta de Galicia ya había previsto acometer, pero que gracias a la implicación de la Fundación Amancio Ortega cobrará una mayor dimensión. La entidad donará 90 millones de euros que permitirán a las arcas públicas de la Comunidad ahorrar el coste de un servicio de gran valor para los gallegos.

Además, el Gobierno gallego está trabajando en un nuevo modelo de residencias que ayude a mejorar la atención y la calidad de vida de nuestros mayores y de las personas con discapacidad. Este modelo se sustentará en una mayor integración de la atención social y sanitaria y será dialogado y consensuado con los diferentes agentes del sector. Esta fue precisamente la razón de crear una nueva Dirección Xeral de Atención Integral Sociosanitaria, que tiene como objetivo servir de puente entre los centros residenciales y el sistema de salud gallego. 

En un momento en el que las residencias de todo el mundo se enfrentan a una situación complicada y completamente desconocida hasta hace apenas unos meses, Galicia apuesta por unos servicios que permiten a las personas mayores vivir con todas sus necesidades cubiertas al tiempo de que disfrutan de una etapa centrada en ellos y para ellos. Una etapa en la que sus cuidados son la prioridad y en la que pueden saldar las deudas que todos tenemos con ellos tras una vida llena de trabajo y esfuerzo.