Cuatro personas fueron galardonadas en La Habana con el ‘Miguel de Cervantes y Saavedra’ por su labor asociativa

La Federación de Sociedades Españolas de Cuba entregó los reconocimientos ‘Miguel de Cervantes y Saavedra’ de 2016 a cuatro personas, Ana María Sierra Denis, Carlos Ramón Velázquez Fernández, Nieves Argelia Alemañy Aguilera y Roberto Antonio Ogando Zas.

Este reconocimiento, el más alto galardón que entrega la Federación de Sociedades Españolas de Cuba desde que se fundó hace 60 años, ha recaído en 60 personalidades, entre ellas Xosé Neira Vila y esposa, la cubana Anisia Miranda Fernández, ambos escritores de valía a nivel mundial; la destacada actriz gallega Aurora Pita Alonso; Alicia Alonso, primera bailarina absoluta y directora del Ballet Nacional de Cuba; Carlos Eduardo Veitía Fajardo, fundador y director del Ballet Español de Cuba. Así como Miguel Barnet Lanza, escritor, poeta, actual presidente de la Unión de Escritores y Artista de Cuba; Eusebio Leal Spengler; la revista ‘Cova Céltiga’, fundada en 1994, y muchas otras personas naturales y jurídicas que se han destacado en las artes, la cultura, la literatura y el bien asociativo.

La Federación de Sociedades Españolas de Cuba, aglutinadora de más de 90 agrupaciones, federaciones y centros de todas las regiones de España, cumplió 60 años de fructífera existencia. Su fundación en la capital cubana fue un 5 de octubre de 1956.

Ese mismo día pero de 2016 se entregaron los reconocimientos ‘Miguel de Cervantes y Saavedra’ en acto solemne celebrado en el Hemiciclo del Museo de Bellas Artes, y con la presencia del embajador España en Cuba, Juan F. Carrasco Montalbán, acompañado de Carlos Pérez-Desoy Fages, cónsul general en la isla; y los consejeros de Cultura y Empleo y Seguridad Social de esta sede diplomática española.

El jurado estuvo integrado, como presidente, por Julio Santamarina López, titular de la institución, acompañado de Alberto Enrique Cartaya Velazco, secretario; y los vocales Ana María Sierra Denis, Longinos Valdés Álvarez, Felipe Cid Domínguez y Raúl Parrado Iglesias. Todos con una amplia trayectoria de trabajo asociativo y experiencia como directivos en sociedades no gubernamentales españolas en Cuba. Determinaron que fueran estos los reconocidos: Ana María Sierra Denis, nominada por el Club Carreño de La Habana; Carlos Ramón Velázquez Fernández, nominado por la Agrupación Artística Gallega y con el aval de la Sociedad de Beneficencia de Naturales de Cataluña; Nieves Argelia Alemañy Aguilera, nominada por el Centro Balear de Cuba; y Roberto Antonio Ogando Zas, nominado por el Centro Unión Orensana.

Las palabras en representación de los galardonados estuvieron a cargo de Carlos Ramón Velázquez Fernández, director del Espacio Barcelona-Habana de la Oficina del Historiador de La Habana, folklorista de música y danzas catalanas. Comenzó expresando: “Como diversos afluentes puede tener el caudaloso río Ebro y raíces una ceiba frondosa aquí en la Habana, así serán de variados los significados que podrá tener el recibir un premio. Como me ha correspondido el privilegio y a la vez el reto de hablar en nombre de los galardonados se hace más complejo el hecho, al intentar sintetizar nuestro sentir. Por lo tanto comienzo por agradecer en nombre de todos este reconocimiento que adquiere dimensiones singulares primero por el nombre que lleva, Miguel de Cervantes y Saavedra, el humanista profundo que nos legó ese espejo de nuestras vidas que es el Quijote. ¿Podrán desmentirme? Creo que no, muchos de ustedes han asumido el espíritu quijotesco para construir y muchas veces reconstruir las inspiradas obras que nos hemos propuesto en la vida, aunque parezcan espejismos, ya que se impone la condición humana, esa que nos hace, obviar las pesadillas y materializar nuestros sueños. Segundo por quien lo entrega, la Federación de Sociedades Españolas de Cuba, que constituye el puente de conexión y comprensión que ha sostenido durante estos 60 años las esencias hispánicas en la diversidad y singularidad de sus nacionalidades unidas, siempre unidas. Al menos este fue el sentir que trasmitían aquellos emigrantes y sus descendientes que se ganaron con su trabajo un lugar en nuestra Cuba querida, donde su savia formo una historia en común que no debemos, ni podemos olvidar”.

Para concluir dijo: “Con la entrega de este reconocimiento, que nos compromete mucho más, al observar la ilustre relación de los anteriormente galardonados, sólo nos queda fijar nuestras mentes en la continuidad de todo proceso cultural, seguir trabajando para enriquecerlo y trasmitirlo a los más jóvenes para que sobre todo perdure el legado hispano, aquel que encontró tierra fértil, floreció y es devuelto al mundo como fruto enriquecido y  recontextualizado. Deseo terminar evocando una frase del doctor Eusebio Leal Spengler, historiador de La Habana que sintetiza definitivamente el porqué de nuestra presencia aquí, donde españoles y cubanos exaltamos lo que nos une, cuando dijo: La sangre llama, pero la cultura determina”.

Las palabras resumen fueron realizadas por el embajador de España, quien afirmó: “Sabéis que es un placer el estar aquí en este hermoso acto de entrega de los reconocimientos ‘Miguel de Cervantes y Saavedra’. He tenido el privilegio de escuchar la vida laboral y asociativa de cada uno de los aquí reconocidos, los cuales han dedicado toda su vida a lo asociativo colaborando sin desmayo por mantener viva la raíz hispana en esta isla de Cuba. Enhorabuena a todos los homenajeados por lo realizado y por realizar con esos miles de proyectos que tienen en la cabeza para el futuro. Es muy oportuno de la FSEC que se den estos reconocimientos en octubre, el mes de la Hispanidad, que pronto vamos a celebrar todos juntos una nueva fiesta nacional que en definitiva es una fiesta de la amistad entre España y el resto de todos los países latinoamericanos que nos acompañan en nuestro devenir. En hora buena a los galardonados. Gracias”.