EN EL ENCUENTRO PARTICIPARON LAS UNIVERSIDADES DE SANTIAGO Y VIGO

El proyecto ‘Diseño curricular y Buenas Prácticas en la Educación Infantil’, en la Casa de Galicia en Madrid

La Casa de Galicia en Madrid acogió el encuentro de coordinadores de universidades, entre ellas la de Santiago y Vigo, que están llevando a cabo un proyecto de investigación nacional, financiado por el Ministerio de Educación, bajo el título ‘Diseño curricular y Buenas Prácticas en la Educación Infantil’.

El proyecto ‘Diseño curricular y Buenas Prácticas en la Educación Infantil’, en la Casa de Galicia en Madrid
Ana Rodríguez Barrena y Miguel Zabalza
Ana Rodríguez Barrena y Miguel Zabalza.

La Casa de Galicia en Madrid acogió el encuentro de coordinadores de universidades, entre ellas la de Santiago y Vigo, que están llevando a cabo un proyecto de investigación nacional, financiado por el Ministerio de Educación, bajo el título ‘Diseño curricular y Buenas Prácticas en la Educación Infantil’.

El director del proyecto, el profesor Miguel Zabalza, de la Universidad de Santiago, fue recibido por la coordinadora de Actividades Económicas de la Casa de Galicia, Ana Rodríguez Barrena, así como el resto de los integrantes de la investigación.

Se trata de un proyecto I+D+i de tres años de duración (2013-2015), en el que participan siete grupos de investigación de otras tantas universidades, españolas (Santiago de Compostela, Vigo, Pública de Navarra, Granada, Autónoma de Madrid, Islas Baleares y Mondragón), y al que también se han unido equipos de investigación de países como Argentina, Chile, México, Colombia, Portugal e Italia. Entre los objetivos del trabajo está el de identificar “buenas prácticas” en el trabajo educativo con niños y niñas de 0 a 6 años. Además, muchas escuelas infantiles están llevando a cabo iniciativas muy creativas e interesantes que merece la pena visibilizar para que otras instituciones puedan, a su vez, ir tomándolas como puntos de referencia. Ejemplo de estas, Zabalza cita algunas alternativas a las “clásicas y aburridas fichas”, entre ellas las experiencias en torno a la creación (llamadas escuelas libres con gran implicación por parte de los padres), la música, las ciencias, el álgebra o la robótica. “En todas éstas hemos podido descubrir que resultan muy estimulantes para las absorbentes mentes de estas edades”.

El proyecto se acoge a la indicación dada por la Unesco que señala esta necesidad en su objetivo estratégico para la educación de esta década. Y en términos similares señala como su misión básica para estos años el Bureau International d’Education (BIE). “En ese propósito se mueve también nuestro equipo interuniversitario de investigación”, asegura Zabalza.