Galicia destinará 55 millones a la protección de su patrimonio natural y paisajístico
En la apuesta por erigirse en una comunidad más sostenible y resiliente, Galicia busca avanzar en el cuidado e impulso de su riqueza ambiental y en la protección del territorio, por lo que destinará 55 millones de euros a la protección del patrimonio natural y paisajístico.
Tal y como recordó la conselleira de Medio Ambiente e Cambio Climático, Ángeles Vázquez, durante su comparecencia en el Parlamento gallego, para presentar los presupuestos de su departamento para 2026, en la actualidad el 42% de la superficie de la comunidad cuenta con alguna figura de protección, y para garantizar la preservación de esa riqueza ambiental, el Gobierno gallego convocará una nueva orden de ayudas dotada con 2,3 millones para la conservación y recuperación del patrimonio natural y cultural en los parques naturales, en la Red Natura 2000 y en las reservas de biosfera.
En lo que respecta a los parques naturales, la Xunta destinará 2,1 millones de euros a actuaciones de mejora y conservación de estos espacios. Entre las acciones previstas están, por ejemplo, un programa de protección de hábitats y restauración de terrenos degradados en O Invernadeiro; trabajos de regeneración, acondicionamiento de la red de pistas y conservación de hábitats en la Serra da Enciña da Lastra y en A Baixa Limia-Serra do Xurés, o el control de especies invasoras en el Monte Aloia.
También continuará la restauración y compra de terrenos en el Parque Natural Fragas do Eume hasta alcanzar las 160 hectáreas, así como las actuaciones de conservación en miradores, áreas de ocio y sendas en el Complejo dunar de Corrubedo.
En el caso del Parque Nacional marítimo-terrestre de las Illas Atlánticas de Galicia, además de ejecutar una nueva fase de la Carta Europea de Turismo Sostenible, se acometerá la rehabilitación de la fábrica de salazón de Sálvora, mientras que en Ons seguirán los trabajos de restauración de la capilla y de mejora de los espacios de uso público.
En cuanto a la Red Natura 2000, Ángeles Vázquez subrayó la inversión de 1 millón de euros para aprobar 20 planes de gestión específicos para las zonas de especial conservación y protección amparadas bajo esta figura de protección.
En lo que respecta a la fauna silvestre, destacó que la Dirección Xeral de Patrimonio Natural reforzará en un 36% las distintas órdenes de ayudas para prevenir y paliar los daños causados por especies como el lobo, el oso y el jabalí, llegando a los 7,5 millones de euros, garantizando de este modo el compromiso del Gobierno gallego con el sector agroganadero. En ese sentido, la conselleira lamentó que el Ejecutivo central siga sin convocar la Conferencia Sectorial de Medio Ambiente para el reparto de fondos por el lobo que le corresponden a Galicia.
Bienestar animal y parques caninos
Ángeles Vázquez también puso en valor la apuesta de la Xunta por el bienestar de los animales de compañía. Así, en 2026 se destinará un total de 1,35 millones de euros a las ayudas a ayuntamientos, entidades protectoras y particulares para la protección de estos ejemplares. Además, se llevarán a cabo otras acciones como la puesta en marcha del primer centro autonómico de protección animal, en Curtis (A Coruña), con un coste estimado de 2 millones y con una capacidad para acoger 500 perros y gatos, o el impulso a la adecuación del centro de protección animal en Lugo, con una inversión de 250.000 euros para mejorar las instalaciones actuales.
También se seguirá promoviendo la construcción de parques caninos en las grandes ciudades gallegas. En concreto, una vez firmado el convenio con el ayuntamiento de Ferrol, está previsto un presupuesto de 400.000 euros para ejecutar la construcción de los de Ourense, Pontevedra, Lugo y Santiago, una vez recibidas y evaluadas las correspondientes solicitudes. De hecho, según explicó la representante autonómica, cada uno de estos ayuntamientos tiene ya cerradas las parcelas destinadas a la construcción de estos parques caninos, por lo que el siguiente paso será la firma de los protocolos de colaboración.
En el marco de la apuesta por la preservación del patrimonio natural gallego, Ángeles Vázquez hizo también hincapié en la necesidad de seguir protegiendo y a poner en valor el paisaje como señal de identidad de la comunidad. En esa línea, el Instituto de Estudios del Territorio (IET) mantendrá su apuesta por el ‘fermosismo’, duplicando hasta los 2 millones las ayudas para corregir impactos paisajísticos para particulares.
La principal novedad en este ámbito es la creación de la Red de Ayuntamientos Bandera Verde de Galicia, de la que podrán formar parte aquellos municipios que tengan, por lo menos, tres de estos distintivos desde el año 2020. Las administraciones locales adheridas a esta iniciativa también recibirán apoyo técnico y económico.
Gestión de residuos
El compromiso del Gobierno gallego con la consolidación de una comunidad verde y sostenible incluye la apuesta por una gestión eficaz y eficiente de los residuos que contribuya a avanzar hacia una economía circular. En esa línea, después de subrayar que el próximo año se pondrá en marcha en Sogama la primera planta pública de España de clasificación de residuos textiles, la conselleira avanzó que se lanzará una nueva línea de apoyo a los ayuntamientos para digitalizar la recogida de desechos, que complementará las ayudas que viene convocando la Dirección Xeral de Calidade Ambiental e Sostibilidade para apoyar a los ayuntamientos en el ejercicio de sus competencias en esta materia por un importe total de 8,2 millones.
La conselleira hizo hincapié en que unas buenas instalaciones y un mejor servicio debe complementarse con la concienciación de la ciudadanía en la “cultura del reciclaje”. Así, en 2026 se desarrollará una Estrategia de formación y sensibilización dirigida a diferentes colectivos –comercio local, comunidad educativa y ciudadanía– o por tipos de residuos, con una inversión de 1,8 millones de euros.
En esta materia también avanzó que el próximo año se redactará y se comenzarán a implementar, con un presupuesto de casi 600.000 euros, las primeras medidas del Plan de acción gallego contra el desperdicio alimentario, una iniciativa pionera en Galicia.