El Colegio de Ingenieros de Caminos de Galicia acogió la jornada ‘Cómo contratar y trabajar en Perú’

El Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Galicia organizó este miércoles en su sede de A Coruña la jornada ‘Cómo contratar y trabajar en Perú’, a la que acudieron docenas de profesionales interesados en conocer los entresijos del país andino para este sector. En ella participaron Wina Isasi, vocal durante ocho años del Organismo Supervisor de Contrataciones del Estado (OSCE) de Perú; y el ingeniero español Víctor Formoso, que contó su experiencia en primera persona.

Víctor Formosa Eiroa, tras dos años trabajando en el país andino como ingeniero de caminos para OHL, ha comprobado que, si bien los excesos cometidos en nuestro país durante el boom económico son un hándicap con el que algunos profesionales españoles tiene que lidiar –“en cuanto cogen confianza preguntan por qué hemos hecho aeropuertos que no sirven para nada, lo que tiene difícil respuesta, es una losa que tenemos”, reconocía– las empresas españolas suelen estar bien situadas ante los concursos de licitaciones públicas. 

Lo que es imprescindible para contratar con cualquier organismo público peruano es el RUC, equivalente al CIF en España, así como el RNP. También auditar todos los estados financieros de la empresa mediante auditoría externa, además de establecer el representante legal de la sucursal. “Por mi experiencia allí, lo ideal es que el gerente comercial sea un profesional peruano con contactos, eso abre muchas puertas”. Tras los trámites de RUC y RNP lo siguiente es buscar oficina y “tener mucha paciencia. Y pulmón para aguantar. Hace falta un mínimo de uno a dos años para empezar a contratar”.

Encontrar trabajo allí

“Aquí, gracias al gran trabajo hecho por generaciones anteriores, es una ventaja tener el título de ingeniero de caminos, pero hay que hacer el ejercicio de abstraerse de la repercusión social de España. En Perú hay ingeniería de cualquier cosa”, apuntó Víctor Formoso. “Es prioritario especificar que eres ingeniero civil con maestría de ingeniero de caminos. Maestría y no especialidad”.

El joven ingeniero gallego también apuntó a que no es lo mismo trabajar en Lima, Cuzco o Arequipa que en provincias o en regiones de selva, aunque se gana más. “En muchos casos no hay agua caliente, las condiciones de vida son duras y los regímenes de trabajo pueden ser de ser 35 días descansando 7; 21 días descansando 7; o el mejor: trabajar 14 y descansar 7”. “Los ingenieros especialistas en carreteras y estructuras tenemos valor añadido que aportar, pero competimos con algo que ya hacen. Sin embargo en tema de ferrocarriles, puertos, aeropuertos no tienen tanta experiencia y son más receptivos”, apuntó al numeroso grupo de ingenieros que acudieron hasta las instalaciones del Colegio para asistir a esta interesante charla.

Homologación del título

Para que ingenieros españoles trabajen en Perú de manera permanente están obligados a colegiarse. Hay dos maneras, temporal y permanente. La primera cuesta unos 2.000 dólares y se inicia con una serie de trámites administrativos en Madrid en el Ministerio de Educación y Justicia, para terminar en la Asamblea Nacional de Rectores de Perú. Un proceso algo complejo pero indispensable porque homologa los títulos. “Lo siguiente sería colegiarse de manera permanente en Perú y ahora mismo está bastante complicado. En todo caso el no estar colegiado se traduce en que las opciones de encontrar trabajo se reducen en un 70%”, asegura Víctor Formoso. “Aceptamos la colegiación de ingenieros españoles pero temporal, las permanentes en casos exclusivos, ya que no son peruanos”, reconoció Wina Isasi, vocal durante ocho años del Organismo Supervisor de Contrataciones del Estado (OSCE) de Perú.

Durante su intervención, esta doctora en Derecho explicó que el OSCE supervisa el proceso de contratación y decide quién se lleva la adjudicación. “Hoy a nuestro país llegan empresas de todas las partes del mundo y todas quieren contratar. Por eso hacemos una selección y consideramos en especial a las que tengan experiencia y reconocimiento. Pero hemos aceptado muchísimas empresas españolas grandes y pequeñas, todas son bienvenidas”, afirmó. “Nuestro proceso de selección de obras es muy formalista. Dentro de la OSCE se administran todas las publicaciones de convocatorias, la contratación y adicionalmente el registro de proveedores. Para estar en el registro se pide experiencia de obras, especialidad... Este proceso no es simple porque hay una fiscalización posterior”, reconoció la experta peruana.

“También tenemos al Tribunal de Contrataciones, que en última instancia resuelve a quién se le otorga y revisa las posibles infracciones de postores para inhabilitarnos o no.  Si se es inhabilitado se puede acudir a la vía judicial, pero es un procedimiento largo y tedioso”.