Torres y Ruiz asistieron en Marruecos a una Conferencia mundial de Emigración

El Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior (CGCEE) forma parte del Comité de enlace surgido de la I Conferencia Internacional de los consejos e instituciones de la emigración, que tuvo lugar recientemente en la ciudad marroquí de Rabat, según figura en la declaración final de la Conferencia, que tuvo como anfitrión al Consejo de la Comunidad Marroquí en el Extranjero (CCME) y contó con la participación de organismos de 16 países de todo el mundo. A la Conferencia asistieron, entre otros, el presidente del CGCEE, Francisco Ruiz, y su secretario, Agustín Torres.
Según la declaración final, a la que ha tenido acceso este periódico, un centenar de personalidades asistieron a ese primer encuentro de este tipo, incluidos ministros y responsables gubernamentales, representantes de los consejos de emigrantes, miembros electos de las comunidades emigrantes en las instituciones representativas de sus países de origen, representantes de los partidos políticos marroquíes y expertos en migración. Las delegaciones extranjeras invitadas representaron a 16 países de todo el mundo (Argelia, Bélgica, Benin, Costa de Marfil, Croacia, Ecuador, España, Francia, Italia, Líbano, Lituania, Malí, México, Portugal, Senegal y Túnez).
Conforme al programa de la conferencia, las ponencias y los debates fueron variados. Permitieron examinar las problemáticas generales de la migración así como las experiencias concretas de los países participantes en materia de políticas públicas destinadas a los emigrantes. Además, varias intervenciones trataron las modalidades de la participación política en sus países de origen y las instituciones consultivas de las poblaciones emigrantes.
Los participantes señalaron que los fenómenos migratorios se globalizan y generan problemáticas a nivel mundial, hallando cada vez más Estados que, en diferentes grados, se vuelven a la vez emisores, receptores y lugares de tránsito más o menos permanente de los migrantes y que la ecuación de la integración de los migrantes en los países de acogida y la preservación de su identidad y sus vínculos con sus países de origen crea sin duda algunos malentendidos, incluso algunas tensiones, necesitando soluciones negociadas, de conformidad con el derecho internacional de los Derechos Humanos, teniendo en cuenta, al mismo tiempo, la diversidad de los sistemas jurídicos nacionales y el contexto de los progresos democráticos del mundo.
Intercambios culturales
También, que más allá de las incomprensiones y de la instrumentalización política, y a pesar de las desviaciones xenófobas, los fenómenos migratorios constituyen un poderoso incentivo para el entendimiento mutuo, el respeto recíproco y los intercambios culturales enriquecedores entre los pueblos. Segun los participantes, la reflexión colectiva a nivel internacional sobre las problemáticas generadas por estos fenómenos sólo puede contribuir al desarrollo y a la ejecución de políticas acordadas y pertinentes en el interés de los Estados emisores, receptores o de tránsito y, sobre todo, en el interés de las poblaciones migrantes y de la protección de sus derechos esenciales.
En este sentido, dicen, la conferencia de Rabat permitió evaluar la diversidad y el carácter evolutivo de las políticas públicas, las modalidades de participación política y la naturaleza de los consejos de las comunidades emigrantes, sobre la base de las tradiciones nacionales propias de cada Estado. Asimismo, la conferencia permitió evaluar las limitaciones y las dinámicas históricas en obra, incluida particularmente la intensidad y la perennidad de los vínculos culturales entre las poblaciones emigrantes y los países de origen.
Sin embargo, añaden, esta diversidad institucional y política ofrece en sí misma una rica fuente de reflexión, de investigación científica comparativa y de inspiración para las comunidades emigrantes y los poderes públicos. Así, sacaron a luz numerosas buenas prácticas y pistas de reflexión más o menos adaptables al contexto de cada Estado.
Comité provisional de enlace
Para continuar con el inicio de una reflexión colectiva y de concertación, la Conferencia de Rabat decidió crear un comité provisional de enlace, encargado de dar seguimiento a sus trabajos y de organizar los intercambios entre los consejos de los países participantes y de ampliar el radio de acción y de implicación a instituciones similares de otros Estados que serían interesados.
Este comité está compuesto por el Consejo de la Comunidad Marroquí en el Extranjero, el Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior, el Alto Consejo de malienses en el extranjero, y el Ministerio para los de ecuatorianos y ecuatorianas migrantes. Se confió al CCME la secretaría del Comité, que se encargará de preparar las próximas iniciativas entre los consejos y las instituciones de la emigración que participaron.