El representante por Estados Unidos en el CGCEE pide que en el país haya tres ALCE

Saúl Beceiro defiende que la emigración tenga “mayor representatividad” a través de una circunscripción propia

La supresión del voto rogado es una de las principales reclamaciones desde todos los colectivos del exterior desde su implantación en 2011. Ahora que el acuerdo entre los partidos políticos hace pensar en su inminente supresión, desde algunos colectivos se quiere ir un paso más allá todavía y plantean la posibilidad de que la emigración cuente con una circunscripción propia.

Saúl Beceiro defiende que la emigración tenga “mayor representatividad” a través de una circunscripción propia
Saul Beceiro2
Saul Beceiro, consejero por Estados Unidos en el CGCEE.

“Creo que sería buena una circunscripción propia para que la representatividad no esté disuelta en las autonomías, porque la realidad de la emigración es una realidad distinta”, asegura Saúl Beceiro, miembro del Consejo de Residentes Españoles (CRE) de Chicago y representante de Estados Unidos en el Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior (CGCEE). Beceiro explica que el número de españoles registrados en el exterior es similar a una provincia grande, “pero como estamos dispersos en las autonomías nuestro peso es relativo” y, por eso, considera que si tuvieran una circunscripción única podrían contar con una “mayor representatividad”. El consejero por Estados Unidos también se muestra partidario de que, al igual que hay partidos que sólo se presentan en algunas autonomías, “que pudiese generarse un partido político de la emigración, que si saca uno o dos escaños nos permitiese tener representación constante en el Congreso para poder atender nuestros problemas y solicitudes”.

Este ferrolano, que lleva diez años viviendo en Estados Unidos, es consciente que este cambio es complicado y por el momento se muestra contento por lo que parece que va a ser el fin del voto rogado. “Estamos todos muy contentos de que por fin haya un acuerdo amplio tanto en el Congreso como en el Senado” y “esperamos que cuenten un poco con el Consejo a la hora de la aplicación de la Ley, porque estas leyes muchas veces quedan muy bonitas en la forma que se escriben, pero esperamos que no nos compliquen la vida en la forma en que se aplique”. “Tanto nosotros como los consulados –explica Beceiro– tenemos mucha experiencia y esperamos que se nos consulte antes de desarrollar completamente el procedimiento y que quede cerrado por los próximos 20 años porque podemos darles un ‘input’ importante de cómo mejorar el proceso”.

Ejercer el derecho al voto desde Estados Unidos no es fácil, “es una chamba aleatoria en la que nos sabes si podrás votar o no”, se lamenta Beceiro, quien recuerda que en una ocasión las papeletas le llegaron tres meses después de las elecciones.

Los principales temas que desde Estados Unidos se van a llevar al Pleno de Madrid son, además del tema del voto rogado, la necesidad de acercar los consulados a los españoles, la promoción para que los españoles se inscriban en el consulado y la creación de Aulas de Lengua y Cultura Española (ALCE).

Saúl Beceiro recuerda que la demarcación de Chicago es muy grande y hay españoles que viven a 15 horas del consulado por eso propone que se incrementen las gestiones que se puedan hacer de manera telemática. “En mi opinión –explica– no sé cuál es la diferencia de ir en persona al consulado y enseñar tu DNI o enseñarlo por zoom, por ejemplo”.

Para los trámites que sí es necesario hacer de manera presencial, propone la creación de un consulado itinerante que una vez al mes se desplace a las zonas más distantes al consulado.

En cuanto a la relación que mantienen con el consulado, Beceiro explica que “estamos trabajando un poco con ellos para ver qué cosas nos han pasado a nosotros desde que hemos llegado y ver qué soluciones puede haber”. “La idea de nuestro CRE –afirma– no es venir a protestar sino venir con problemas y una idea de solución”.

Al igual que en la mayoría de países, desde Estados Unidos apuntan que uno de los problemas que tienen es que “hay un montón de gente que no se inscribe en el consulado, con lo cual los números oficiales que tenemos son un problema porque todo –la financiación, gestión de escuelas ALCE, …– depende del número de residentes en un área, pero si la gente no se inscribe no tenemos números reales” y por eso “estamos intentando contactar con diferentes asociaciones y también en redes sociales para hacer una campaña de promoción de inscripción consular”, dice Beceiro.

Este consejero por Estados Unidos considera que uno de los principales motivos por los que los españoles no se inscriben en el consulado es porque es complicado, ya que tienes que ir en persona o enviar el pasaporte por correo y no todo el mundo se fía de enviar el pasaporte por correo”, y piden que se pueda hacer de manera telemática.

Además, explica que hay mucha gente que no tiene ni idea de que existe el registro consular y solo piensa en el consulado cuando le pasa algo. Beceiro reconoce que en los diez años que lleva en Estados Unidos sólo necesitó el consulado para renovar el pasaporte.

Otro de los motivos de muchos españoles para no inscribirse en el consulado es la pérdida de la sanidad en España. “Yo creo que si resides en el extranjero, sigues siendo español, y no creo que sea ningún problema mantener la tarjeta sanitaria activa para que cuando vayas, si te pasa algo, no tengas que hacer un montón de gestiones extraordinarias”, asegura Beceiro, quien matiza que “si te pasa algo grave sabes que te van a atender igual, pero la atención primaria no te atiende porque no tienes tarjeta sanitaria”.

En todo caso, Beceiro recuerda que “el tipo de emigración que llega a Estados Unidos desde España es sobre todo profesional y tiene un seguro a través de la empresa, con lo cual tiene sanidad aquí, pero sí es cierto que si tienes una enfermedad grave o de largo recorrido, la mayoría queremos estar en casa con nuestra familia”.

ALCE

En Estados Unidos “tenemos a muchos españoles preocupados por las Aulas de Lengua y Cultura Española (ALCE) y los números no nos ayudan porque no tenemos a la gente inscrita”, indica este ferrolano. Explica que quieren “trabajar de manera que entre varias circunscripciones se puedan organizar aulas ALCE con clases en línea”. “En Estados Unidos –asegura– deberíamos tener, al menos, tres escuelas con tres husos horarios diferentes y poder hacer las clases en línea. No creo que sea tan terrorífico económicamente”.

Saúl Beceiro también comenta que está en contacto con los otros miembros del Consejo y una de las propuestas es poder hacer comisiones mixtas de trabajo porque las comisiones no son impermeables, ya que la mayoría de los temas afectan a diferentes ámbitos.

Asimismo, aboga por un trabajo más constante en las comisiones. “Hasta ahora el Consejo se reunía en persona una vez al año y las comisiones dos veces y eso da para poco. De nuevo la pandemia nos ha enseñado que hay muchas cosas que se pueden hacer ‘on line’, con lo cual nuestra idea es que las comisiones se reúnan más a menudo para que haya un trabajo más constante y que cuando lleguemos al Consejo no sea todo en dos días”.