La emigración estrena el voto en urna con una participación desigual
Estas son las primeras elecciones en las que la emigración puede ejercer su derecho al voto en urna. La participación ha sido desigual, ya que al tener que rogar el voto muchos residentes no habían recibido las papeletas para poder votar. En todo caso, en muchos consulados han recibido más votos por correo que los que los ciudadanos han emitido directamente en urna.

Estas son las primeras elecciones en las que la emigración puede ejercer su derecho al voto en urna, instaladas en embajadas y consulados –si bien no se hallan en una mesa electoral constituida como tal–. La participación ha sido desigual, ya que al tener que rogar el voto muchos residentes no habían recibido las papeletas para poder votar. En todo caso, y como era de esperar, en muchos consulados han recibido más votos por correo que los que los ciudadanos han emitido en urna.
Argentina
En Argentina, los ciudadanos llamados a las elecciones pudieron depositar por primera vez su voto en las urnas que se dispusieron en cada una de las demarcaciones consulares del país. De todas, la demarcación consular de Buenos Aires –que abarca casi toda la provincia– es la más amplia en número con 257.000 ciudadanos inscritos en el registro de matrícula. De esta cifra, sólo 223.000 están registrados en el Censo Electoral de Residentes Ausentes (CERA), es decir, habilitados para votar.
Sin embargo, cabe recordar, que en estas elecciones la ciudadanía del exterior está convocada para votar sólo en comicios autonómicos, con la excepción de los gallegos –que constituyen el 60% del electorado de Argentina–, los catalanes y los vascos; con lo que el padrón en esta convocatoria se redujo a 60.000 votantes que pudieron emitir su sufragio por correo o depositarlo personalmente en las urnas.
Aunque la extensión geográfica del país hizo que la mayor parte de los electores enviara su voto por correo, el goteo de personas en los consulados estaba siendo constante a lo largo de los tres días.
Para poder atender esta demanda, el Consulado General de España en Buenos Aires dispuso de dos urnas, atendidas por personal del consulado y un tercer empleado responsable de verificar que la documentación requerida para sufragar estuviera completa antes de llegar a pie de urna. Además, entre 4 y 5 personas tenían a su cargo la verificación de la documentación y de los sobres.
Aunque los consulados no realizan el recuento de votos –ya que allí no se abren los sobres con las papeletas– sí que se verificaba que los sobres contuviesen la documentación necesaria. En cada caso, el personal administrativo elabora un acta dejando constancia de inconvenientes o incidencias que se pudieran detectar, tanto en los votos depositados directamente en urna como en los que llegaban por correo. Hay que tener en cuenta que en esta oportunidad los votos por correo no se dirigen directamente a las juntas electorales provinciales sino a los consulados correspondientes.
Tras la finalización del periodo de voto en urna el viernes, todos los consulados remitirían los votos a la Embajada española en Argentina, que a su vez los enviaría por valija diplomática a la Junta Electoral Central.
Esta semana, según informaron, los consulados estarán en condiciones de ofrecer datos sobre la cantidad de votos que recibieron y de incidencias que registraron. No obstante, según relataron los interventores de los partidos españoles con representación en Argentina que siguieron el procedimiento, la nueva metodología ocasionó algunos inconvenientes a la hora de emitir el sufragio, especialmente entre las personas mayores que estaban habituadas a la modalidad anterior.
En Alemania muy pocos acudieron a las urnas
Muy pocos de los españoles residentes en Alemania acudieron a los consulados para votar en urna. A mediodía del viernes, último día para votar, habían acudido al Consulado General de Frankfurt, 43 de las 8.791 personas inscritas en la lista del censo para depositar su voto en la urna; otros 227 votos habían llegado por correo certificado, de los cuales, 64 votantes no lo habrían hecho correctamente, en lo que los funcionarios pudieron apreciar. A juzgar por el elevado número de incorrecciones, parece estar claro que muchos no han comprendido el sistema, y no serían sólo personas mayores, sino que habría casos de jóvenes bien preparados, “con carrera”, que llegaron sin la documentación necesaria para participar en la votación, según informaron.
No son cifras definitivas, que se conocerán este lunes, pero dan una idea de lo que será el resultado final y de que la nueva normativa de la Loreg no contribuyó precisamente a una mayor participación.
En el Consulado de Hannover se habrían acercado a votar unas 70 personas, la mayor parte votarían también por correo. La participación estaría por debajo del 5%. Naturalmente, se notaría en el porcentaje de participación la falta de los gallegos y andaluces, fuertemente representados en la emigración. Pero también aquí informan que el permanente cambio de criterios para votar y tantos requisitos como son necesarios, no favorecen la participación. Además, creen que los votantes, o no leen las instrucciones o no las interpretan bien.
En el Consulado de Stuttgart se da la misma situación, e incluso residentes en la ciudad elegirían enviar el voto por vía postal, por ser la forma más cómoda. La relación sería aproximadamente de 1 a 40. La participación parece ser semejante en Münich, Berlín y Hamburgo, aunque no facilitaron datos concretos.
El Consulado de Düsseldorf, en cambio, parece ser el único en el que la participación fue significativa, valorándola de “relativamente buena”. A pesar de eso, también en esa demarcación consular vota la mayoría por correo. Un argumento para ello es, en todos los casos, que los gastos de desplazamiento no se reembolsan.
Cerca de 300 votantes en la primera jornada de Uruguay
En Uruguay, se fue desarrollando con normalidad la votación en el Consulado. El sistema electoral es algo nuevo para los residentes en Uruguay, aún no se han asumido los mecanismos, a ello se suma que la colectividad gallega, que es la más numerosa, no participaba en esta instancia, por tanto no fue de extrañar el bajo número de votos rogados en el país. Son en torno a 1.300 los habilitados. Al mediodía del jueves 20 habían pasado por las oficinas del Consulado cerca de 300 españoles para efectuar el sufragio.
Según trascendía en el Consulado, se esperaba que el viernes incrementara considerablemente el número de concurrentes a votar, contagiados de la costumbre uruguaya de dejar todo para el último momento.
No se debe olvidar que las comunidades con más número de inscritos para votar y que participan en esta instancia son Asturias, Canarias y Madrid y que estas elecciones funcionan como un banco de pruebas para las próximas elecciones nacionales.
Participación baja en México
En México la participación estaba siendo muy baja. El miércoles sólo accedieron a votar seis personas y dos más que no han podido hacerlo porque les faltaba el pasaporte. Desde el Consulado se explica que los últimos días de votación se esperaba una mayor afluencia porque muchos residentes en el exterior estaban esperando a que les llegasen las papeletas.
En Chile la votación se concentró en las primeras horas
El miércoles 18 de mayo a las nueve de la mañana en punto comenzó el proceso de votación de los españoles residentes en la capital chilena. El proceso de votación se extendió hasta las cuatro y media de la tarde cada día hasta el viernes 20, en la urna instalada en la octava planta de la Sede del Consulado General en Santiago. Un ambiente de normalidad caracterizó el voto exterior en Santiago, y se observó una mayor concurrencia el último día de esta nueva modalidad.
En esta oportunidad, los electores del CERA, que habían recibido su documentación para votar en las elecciones autonómicas de este 22 de mayo, ejercieron su derecho a sufragio. Aquellos que decidieron no votar en urna sino por correo certificado pudieron hacerlo hasta el 17 de mayo, haciendo constar en el matasellos dicha fecha por medio de las oficinas de la Empresa de Correos de Chile.
El proceso de votación en urna fue principalmente en el horario de mañana, disminuyendo a partir de las 14:00 horas, señaló uno de los funcionarios administrativos de la representación consular.
Algunos electores no enviaron a tiempo la solicitud en abril, lo que no permitió recibir el voto. Por otro lado, en algunos casos, algunas juntas electorales impugnaron las listas de votación presentadas en España y hasta que dicho proceso no se regularizase no se despachó el envío a Chile, lo que ocasionó algún retraso.
Tanto los sobres recibidos por correo certificado como los que se hayan recibido en la urna destinada estos días para el sufragio fueron enviados por valija diplomática el día 21 a Madrid, de modo tal que puedan estar a tiempo en cada una de las mesas que corresponda.
Información recabada por Mariana Ruiz (Buenos Aires); Álvaro Velázquez (Montevideo), Josefa Castro (Alemania), Andrés Suárez (Chile) y M.L.Clemente (Madrid).
Argentina
En Argentina, los ciudadanos llamados a las elecciones pudieron depositar por primera vez su voto en las urnas que se dispusieron en cada una de las demarcaciones consulares del país. De todas, la demarcación consular de Buenos Aires –que abarca casi toda la provincia– es la más amplia en número con 257.000 ciudadanos inscritos en el registro de matrícula. De esta cifra, sólo 223.000 están registrados en el Censo Electoral de Residentes Ausentes (CERA), es decir, habilitados para votar.
Sin embargo, cabe recordar, que en estas elecciones la ciudadanía del exterior está convocada para votar sólo en comicios autonómicos, con la excepción de los gallegos –que constituyen el 60% del electorado de Argentina–, los catalanes y los vascos; con lo que el padrón en esta convocatoria se redujo a 60.000 votantes que pudieron emitir su sufragio por correo o depositarlo personalmente en las urnas.
Aunque la extensión geográfica del país hizo que la mayor parte de los electores enviara su voto por correo, el goteo de personas en los consulados estaba siendo constante a lo largo de los tres días.
Para poder atender esta demanda, el Consulado General de España en Buenos Aires dispuso de dos urnas, atendidas por personal del consulado y un tercer empleado responsable de verificar que la documentación requerida para sufragar estuviera completa antes de llegar a pie de urna. Además, entre 4 y 5 personas tenían a su cargo la verificación de la documentación y de los sobres.
Aunque los consulados no realizan el recuento de votos –ya que allí no se abren los sobres con las papeletas– sí que se verificaba que los sobres contuviesen la documentación necesaria. En cada caso, el personal administrativo elabora un acta dejando constancia de inconvenientes o incidencias que se pudieran detectar, tanto en los votos depositados directamente en urna como en los que llegaban por correo. Hay que tener en cuenta que en esta oportunidad los votos por correo no se dirigen directamente a las juntas electorales provinciales sino a los consulados correspondientes.
Tras la finalización del periodo de voto en urna el viernes, todos los consulados remitirían los votos a la Embajada española en Argentina, que a su vez los enviaría por valija diplomática a la Junta Electoral Central.
Esta semana, según informaron, los consulados estarán en condiciones de ofrecer datos sobre la cantidad de votos que recibieron y de incidencias que registraron. No obstante, según relataron los interventores de los partidos españoles con representación en Argentina que siguieron el procedimiento, la nueva metodología ocasionó algunos inconvenientes a la hora de emitir el sufragio, especialmente entre las personas mayores que estaban habituadas a la modalidad anterior.
En Alemania muy pocos acudieron a las urnas
Muy pocos de los españoles residentes en Alemania acudieron a los consulados para votar en urna. A mediodía del viernes, último día para votar, habían acudido al Consulado General de Frankfurt, 43 de las 8.791 personas inscritas en la lista del censo para depositar su voto en la urna; otros 227 votos habían llegado por correo certificado, de los cuales, 64 votantes no lo habrían hecho correctamente, en lo que los funcionarios pudieron apreciar. A juzgar por el elevado número de incorrecciones, parece estar claro que muchos no han comprendido el sistema, y no serían sólo personas mayores, sino que habría casos de jóvenes bien preparados, “con carrera”, que llegaron sin la documentación necesaria para participar en la votación, según informaron.
No son cifras definitivas, que se conocerán este lunes, pero dan una idea de lo que será el resultado final y de que la nueva normativa de la Loreg no contribuyó precisamente a una mayor participación.
En el Consulado de Hannover se habrían acercado a votar unas 70 personas, la mayor parte votarían también por correo. La participación estaría por debajo del 5%. Naturalmente, se notaría en el porcentaje de participación la falta de los gallegos y andaluces, fuertemente representados en la emigración. Pero también aquí informan que el permanente cambio de criterios para votar y tantos requisitos como son necesarios, no favorecen la participación. Además, creen que los votantes, o no leen las instrucciones o no las interpretan bien.
En el Consulado de Stuttgart se da la misma situación, e incluso residentes en la ciudad elegirían enviar el voto por vía postal, por ser la forma más cómoda. La relación sería aproximadamente de 1 a 40. La participación parece ser semejante en Münich, Berlín y Hamburgo, aunque no facilitaron datos concretos.
El Consulado de Düsseldorf, en cambio, parece ser el único en el que la participación fue significativa, valorándola de “relativamente buena”. A pesar de eso, también en esa demarcación consular vota la mayoría por correo. Un argumento para ello es, en todos los casos, que los gastos de desplazamiento no se reembolsan.
Cerca de 300 votantes en la primera jornada de Uruguay
En Uruguay, se fue desarrollando con normalidad la votación en el Consulado. El sistema electoral es algo nuevo para los residentes en Uruguay, aún no se han asumido los mecanismos, a ello se suma que la colectividad gallega, que es la más numerosa, no participaba en esta instancia, por tanto no fue de extrañar el bajo número de votos rogados en el país. Son en torno a 1.300 los habilitados. Al mediodía del jueves 20 habían pasado por las oficinas del Consulado cerca de 300 españoles para efectuar el sufragio.
Según trascendía en el Consulado, se esperaba que el viernes incrementara considerablemente el número de concurrentes a votar, contagiados de la costumbre uruguaya de dejar todo para el último momento.
No se debe olvidar que las comunidades con más número de inscritos para votar y que participan en esta instancia son Asturias, Canarias y Madrid y que estas elecciones funcionan como un banco de pruebas para las próximas elecciones nacionales.
Participación baja en México
En México la participación estaba siendo muy baja. El miércoles sólo accedieron a votar seis personas y dos más que no han podido hacerlo porque les faltaba el pasaporte. Desde el Consulado se explica que los últimos días de votación se esperaba una mayor afluencia porque muchos residentes en el exterior estaban esperando a que les llegasen las papeletas.
En Chile la votación se concentró en las primeras horas
El miércoles 18 de mayo a las nueve de la mañana en punto comenzó el proceso de votación de los españoles residentes en la capital chilena. El proceso de votación se extendió hasta las cuatro y media de la tarde cada día hasta el viernes 20, en la urna instalada en la octava planta de la Sede del Consulado General en Santiago. Un ambiente de normalidad caracterizó el voto exterior en Santiago, y se observó una mayor concurrencia el último día de esta nueva modalidad.
En esta oportunidad, los electores del CERA, que habían recibido su documentación para votar en las elecciones autonómicas de este 22 de mayo, ejercieron su derecho a sufragio. Aquellos que decidieron no votar en urna sino por correo certificado pudieron hacerlo hasta el 17 de mayo, haciendo constar en el matasellos dicha fecha por medio de las oficinas de la Empresa de Correos de Chile.
El proceso de votación en urna fue principalmente en el horario de mañana, disminuyendo a partir de las 14:00 horas, señaló uno de los funcionarios administrativos de la representación consular.
Algunos electores no enviaron a tiempo la solicitud en abril, lo que no permitió recibir el voto. Por otro lado, en algunos casos, algunas juntas electorales impugnaron las listas de votación presentadas en España y hasta que dicho proceso no se regularizase no se despachó el envío a Chile, lo que ocasionó algún retraso.
Tanto los sobres recibidos por correo certificado como los que se hayan recibido en la urna destinada estos días para el sufragio fueron enviados por valija diplomática el día 21 a Madrid, de modo tal que puedan estar a tiempo en cada una de las mesas que corresponda.
Información recabada por Mariana Ruiz (Buenos Aires); Álvaro Velázquez (Montevideo), Josefa Castro (Alemania), Andrés Suárez (Chile) y M.L.Clemente (Madrid).