Asistieron la embajadora, María Jesús Alonso, y el cónsul general, Fernando García Casas

El Centro Montañés-Casa de Cantabria de Buenos Aires celebró su centenario con un almuerzo en su sede social

El Centro Montañés-Casa de Cantabria de Buenos Aires celebró su centenario con un almuerzo que reunió, en su sede, autoridades españolas, argentinas, directivos de asociaciones de la colectividad, socios y amigos.

El Centro Montañés-Casa de Cantabria de Buenos Aires celebró su centenario con un almuerzo en su sede social

“Conmemorar no solo significa celebrar, también significa apelar a la memoria en busca de recuerdos, analizar y reflexionar sobre el camino recorrido”, explicó Mercedes Casares, presidenta de la entidad.

“Es, sin duda, un momento de alegría –ahondó–, pero también de nostalgia al recordar a todos aquellos que nos precedieron y dieron vida a este lugar movidos por sueños deseos y expectativas”.

Los festejos, que tuvieron lugar en la sede de la asociación, en el barrio porteño de Belgrano, comenzaron pasadas las 12 del mediodía y se prolongaron a lo largo de toda la tarde.

En una jornada en la que la música, la danza y las tradiciones de Cantabria, en el marco de la cordialidad y la amistad que siempre ofrecen los cántabros de Buenos Aires, fueron epicentro de la reunión.

En un día soleado de otoño, el Centro Montañés-Casa de Cantabria acogió a centenares de amigos. Estuvieron presentes la embajadora de España, María Jesús Alonso; el cónsul general de España en Buenos Aires, Fernando García Casas; los consejeros de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, Pedro Zarco Colón, y de Educación de la Embajada de España, Matías Jiménez Ortiz; la presidenta de la comuna 13, Florencia Stravini; la presidente del CRE de Buenos Aires, Susana Carbia Espiño; y directivos de asociaciones de la colectividad, socios y amigos.

Mercedes Casares, presidenta de la asociación, dio la bienvenida a los presentes: “Nuestra casa ha sabido hacer frente a distintos desafíos que ha atravesado a lo largo de su historia y este nuevo aniversario nos brinda la posibilidad de poner en perspectiva esa trayectoria para ver los logros alcanzados y pensar en el futuro, proponiéndonos seguir manteniendo viva la tradición y la cultura de Cantabria, descubriendo en el hacer nuevos caminos por andar”.

“Es un honor presidir esta institución que mi padre me enseñó a querer; que me vio crecer junto a mi hermana y que hoy disfruto junto a mis sobrinos”, continuó, y destacó: “En la comisión me acompaña un excelente grupo de personas comprometidas con difundir nuestro ser cántabro a tantos quilómetros de distancia”. “Nos guía el ejemplo de presidentes y juntas directivas que hicieron de nuestra querida casa un lugar de encuentro y reunión, agrupando y conteniendo a jóvenes emigrantes recién llegados de España, llenos de esperanza”, valoró.

La joven directiva del centro agradeció, asimismo, al Gobierno de Cantabria la participación en la celebración de una delegación de artistas de la Federación Cántabra de Agrupaciones Folclóricas.

También valoró especialmente la dedicación y el trabajo de todos y cada uno de los integrantes del conjunto de danzas y de la Ronda Montañesa de la institución que brindaron a lo largo de la Jornada un festival de tradiciones cántabras.

“Tenemos ilusión de seguir trabajando y compartiendo con la comunidad en su conjunto nuestras raíces, manteniendo las puertas abiertas”, concluyó.

“Este centro tiene unas virtudes que como mujer admiro”, señaló la embajadora María Jesús Alonso durante el encuentro. “En 1929, –destacó– a cargo de su actividad cultural estuvo Consuelo Berges Rábago, traductora, periodista, escritora y biógrafa española nacida en Ucieda (Ruente, Cantabria) 1898-1988.

“Lo destaco –dijo– porque por aquellos años las mujeres tenían poco para decir, especialmente, en algo tan importante como la cultura, que el puente que más acerca a los pueblos”.

La embajadora recordó también otro aspecto en el que la entidad fue pionera: “En 1936 –apuntó– se le dio lugar a las mujeres como ‘socias de pleno derecho’; algo que cambió la configuración del centro”, sostuvo.

Finalmente, valoró que por primera vez una mujer preside la institución. “Un orgullo –dijo– para todas las cántabras y cántabros y un modelo a seguir en todos los centros españoles en Argentina”.

“Las mujeres llegamos para quedarnos. Somos el 50% de la población y estamos preparadas –dijo– para asumir la responsabilidad”. Finalmente, agradeció que “las mujeres estemos cada vez más presentes”.

Tras felicitar al Centro Montañés-Casa de Cantabria por sus cien años de trayectoria, el cónsul Fernando García Casas recordó que “estamos en medio del proceso de la Ley de Nietos”. “Tenemos ya 3.000 nuevos españoles, 9.000 en camino y hemos dado más de 75.600 citas”, dijo y avanzó: “Imagínense lo que va a ser la comunidad española en esta ciudad y en esta provincia de Buenos Aires en pocos años”.

García Casas animó a los españoles residentes en el país a ejercer su derecho al voto, en el marco de las elecciones generales anticipadas que se celebrarán el próximo 23 de julio. “Los animo a venir a votar por correo o en urna en la Embajada, del 15 al 20 de julio de 10 a 20 horas”, dijo.

Por su parte, el consejero de Trabajo Migraciones y Seguridad Social, Pedro Zarco Colón, valoró “el papel fundamental de los centros en el exterior”. “Son verdaderos vertebradores de la colectividad española y el mejor mecanismo para canalizar nuestros programas de ayudas en favor de los españoles en el exterior”, dijo consultado por ‘Cantabria en el Mundo’.

Julio, Susana, David, Beatriz, Julia y Mario viajaron a Argentina para participar en los festejos por el centenario del Centro Montañés-Casa de Cantabria representando a la Federación Cántabra de Danzas Folclóricas Regionales. “Nos parece maravilloso que a tantos kilómetros se siga sintiendo y viviendo la tierra”, valoró Julio Arce, uno de los miembros de la comitiva que viajó con el apoyo del Gobierno Autonómico de Cantabria, a través de la Consejería de Presidencia, Interior, Justicia y Acción Exterior.

“Quién sabe si podremos volver, pero dejaremos nuestra semillita”, dijo, y concluyó: “Argentina es muy bella e inmensa, hemos recorrido Buenos Aires y nos llevamos muchos momentos hermosos y montones de imágenes”.

El Batallón de Voluntarios Urbanos Cántabros Montañeses, Tercio de Cántabros, Tercio de Cántabros Montañeses o Tercio de Montañeses fue una unidad miliciana de infantería creada el 18 de septiembre de 1806, luego de la primera de las Invasiones Inglesas al virreinato del Río de la Plata.

Sus integrantes fueron voluntarios nacidos en Cantabria, residentes en Buenos Aires. Tras la Revolución de Mayo, el Tercio pasó a ser el Regimiento N° 4 de Infantería, y a partir del 13 de noviembre de 1811, se une al Regimiento N° 3 de Infantería para formar el Batallón N° 2 de Infantería del Ejército Argentino.

La encargada de volver a darle vida a este histórico batallón es la Asociación civil y cultural de recreación histórica argentina, creada en el año 2006, con la finalidad de recrear la historia argentina. Las invasiones inglesas, la revolución de mayo y la guerra unitarios y federales, en la época de Rosas son algunas de las representaciones que llevan adelante los terceros sábados del mes (abril, mayo, junio, julio, agosto, octubre y noviembre), en su sede, en el Museo Becar Varela de San Isidro, antigua casa de Mariquita Sánchez de Thompson, sita en calle Becar Varela 774.

Apuntes de la historia del Centro Montañés-Casa de Cantabria

El actual Centro Montañés-Casa de Cantabria es fruto de la fusión de dos entidades: el Centro Montañés El Cantábrico y el Centro Montañés Liébana en la Argentina, que decidieron aunarse en el marco de la asamblea realizada en la Asociación Patriótica Española el 3 de junio de 1923.

La casa, ubicada en el barrio porteño Belgrano, cuenta en la planta baja con un salón de eventos, con capacidad para 350 personas, equipado con última tecnología; una sala de reuniones para la Junta Directiva y una amplia Secretaría. Ésta, además, cuenta con un acogedor salón comedor donde disfrutar de comidas típicas regionales y una sala contigua para juegos de mesa como ajedrez, damas y cartas.

En la planta alta se encuentra la biblioteca, que pone a disposición de los interesados una amplia y variada colección bibliográfica. También posee una sala de reuniones, donde las ‘damas’ desarrollan actividades sociales, culturales y artísticas.

En la parte posterior de la sede social, además, hay parrilla, bolera, cancha de básquet, cancha de pelota paleta con plateas y vestuarios para damas y caballeros. También hay allí una cancha de fútbol 5 con doble funcionalidad, apropiada para tenis y vóley y un espacio de juegos para niños, donde se pueden encontrar diferentes alternativas recreativas.