Opinión

Las ‘memorias’ de José Gobello, por Marcelo Héctor Oliveri

Las ‘memorias’ de José Gobello, por Marcelo Héctor Oliveri

“El penúltimo hijo de una madre que tuvo 7 y enviudó. Conoció la pobreza y también la famosa crisis del 30. Concluyó su secundaria durante su mayoría de edad. Fue diputado nacional en 1951, cuando la CGT presentó su precandidatura. Estuvo preso dos años y en la cárcel escribió sus Historias con ladrones que vieron la luz antes de que él mismo volviese a verla. Llevó un diario de la cárcel, del cual buena parte se perdió y lo demás se reproduce en este libro. Se define como un periodista político interesado en el tango y en el lunfardo. Tiene muchos amigos y prefiere olvidar a sus enemigos. Fundó la Academia Porteña del Lunfardo, es miembro de la Academia Nacional de Letras del Uruguay y lleva publicados más de dos docenas de libros dedicados principalmente a las expresiones culturales populares de Buenos Aires”, escribe Marcelo Héctor Oliveri en su libro José Gobello. Sus escritos, sus ideas, sus amores, Ediciones Corregidor, Buenos Aires, 2002. Con fotografías de tapa y contratapa a cargo de Guillermo Pardo, su autor testimonia su admiración ante su dedicatario: “A mi maestro Gobello, que me enseña a seguir siempre adelante en este mundo tan competitivo como es el del periodismo”.

El académico Marcelo Héctor Oliveri confiesa que con esta publicación “intenta reflejar la pureza de este porteño de ley que se emociona y llora cada vez que se conmueve. He llorado muchas veces mientras me contaba su vida, sobre todo por sus amigos que ya no están”. Aquella idea de escribir sus “memorias” le brotó a Oliveri en mayo de 2000, al salir del Centro Educativo del Tango de la calle Agrelo y la “24 de noviembre”. Gobello, con su proverbial ironía, empezó a cantar: “Ilusiones del viejo y de la vieja van quedando deshechas en la arena…”.

“¿Quién se robó mi niñez?” es el título –evocando el célebre tango-milonga ‘Tinta roja’ de Cátulo Castillo y Sebastián Piana, de 1941– del primer capítulo del libro, escrito bajo el espíritu y la letra de “entrevista”. Al hablar de las Navidades de su infancia, Gobello responde: “Las Navidades de mi infancia tienen un nombre, el de mi tío piamontés Guido Zappa”. Sus páginas nos ilustran con antiguas fotografías, como las del niño-Gobello el 1º de enero de 1923 y la del 4º año de la Escuela Normal Mixta de San Fernando. Don José había nacido el 26 de septiembre de 1919 en la localidad bonaerense de Martínez, en San Isidro. La capital porteña aún no tenía obelisco, el imperturbable “icono” que se transformaría desde 1936 en la “postal” de la dilatada Avenida 9 de Julio de la ciudad. Su esposa Marta y su hijo Misael, a cada instante eternamente presentes.

“Las redacciones” nos convida a rememorar el apasionante y apasionado universo de los diarios de la época. El Pueblo, en el que –diario católico por excelencia– Gobello ingresó en el periodismo a finales de 1936 o, según él mismo reconoce, a comienzos del año siguiente. Podemos verlo en las fotos con Manuel Ugarte en mayo de 1946 y asimismo con Miguel de Molina y Pascual Carcavallo en 1947. A continuación, leemos los capítulos titulados ‘Los libros’ y ‘Los diccionarios’. ‘El diputado’, ‘El preso’ y ‘El tango’. Luego, ‘La Academia’ y ‘El sedentario’. Después, ‘Perón’, ‘Evita’ y ‘Videla’. Igualmente, ‘Quarracino’, ‘Perina’, ‘Borges’ y ‘Sábato’. También, ‘César Tiempo’ y ‘Piazzolla’. Y ‘La política’, ‘Diario de la cárcel’ y ‘Los trabajos y los días’. Finalmente, la espléndida ‘bibliografía’ acerca de José Gobello.