Opinión

El divino Proteo en las playas de Ribadeo

El espléndido arenal de la costa de Ribadeo nos brinda su hermosura con una bandera azul e incluso una tarta que porta su nombre. Millares de viajeros nacionales y extranjeros se apropincuan hasta estos lares para observar las faenas de los marineros. Las rocas de la playa de ‘Las Catedrales’ –caprichosas geoformas del divino y cambiante héroe griego y mitológico Proteo­– resisten frente a los crudos temporales del invierno de Galicia. ¿Quién podría evitar el recuerdo de aquel período 2013-2014, cuando tuvieron lugar un sinnúmero de daños en el litoral ribadense? Algunas zonas sufrieron las impías erosiones del impetuoso mar Cantábrico.

El divino Proteo en las playas de Ribadeo

Nos hallamos en ‘Augas Santas’, camino de Ribadeo. Constituyendo parte del monumento natural de ‘Las Catedrales’, avistamos la playa de Esteiro, un reducido arenal de hilos delgados y blancos. Merced a sus numerosas rocas –en horas de viento del ‘nordés’– se transforma en un idílico espacio para un grato día al aire libre, conviviendo también con la visión de las vacas pastando o reposando sobre el pacífico verde de los campos.

¡Senderos para recorrer el litoral a escasos metros del mar! Acantilados, cuevas, crepúsculos infinitos… En la línea del horizonte, barcos pesqueros y mercantes zarpando rumbo a su destino. Si continuamos por la costa, he ahí la playa de ‘Las Islas’, formada por varios islotes. Cuando llega la bajamar, ‘Las Islas’ se comunican con el arenal de ‘Los Castros’.

‘Los Castros’ se denominan por la cercanía de los restos arqueológicos localizados hace décadas en sus proximidades. Resulta maravilloso el acceso a este arenal, pues se hace a través de una cueva natural. Cuando es marea baja, aparecen charcas y piscinas naturales, entre las rocas, donde los niños disfrutan –a veces, por vez primera– con la juguetona agua del mar.

Estamos ahora en la parte más occidental de la singular fantasía de ‘Las Catedrales’, en donde nos topamos con la primera de las grandes playas del cercano ‘concello’ de Barreiros: ‘Arealonga’. ‘Augas Santas’ y ‘Arealonga’ están comunicadas –aparte de la carretera que bordea el mar– por una ‘pasarela de madera’, siempre transitada por muchos caminantes. Este arenal de Barreiros se encuentra situado en dos parroquias: la mayor parte de la playa pertenece a Santiago de Reinante; el resto, a San Miguel de Reinante. Un riachuelo apenas las separa.

¡Pequeñas grutas esculpidas por el mar en Santiago de Reinante! ¿Quién en otros tiempos no encontró en aquellas charcas estrellas, caballitos de mar o cangrejos? Junto a ellos, adheridos a sus rocas, lapas, minúsculos mejillones y percebes, lo mismo que en el otro extremo de ‘Arealonga’, en San Miguel. El ‘concello’ de Ribadeo nos regala la armonía de su arquitectura en el centro histórico de la Villa. Enfrente, el puerto deportivo de Porcillán, así como los paseos marítimos a la ribera de la ría de Ribadeo. El más reciente, es el paseo marítimo de ‘As Aceas’. Ved ahí el auditorio al aire libre de Cabanela, el puerto comercial de Mirasol y el conjunto de la capilla de La Atalaya del siglo XII. Viejos cañones y ‘belvederes’ nos donan el milagro de sus puertos y de toda su Ría lucense.