El cineasta vigués Juan Pinzás Cerqueira y su cinematografía

“A Blanquita este viaje a través de mi obra y vida en la que siempre me has acompañado desde mi nacimiento. Tu hermano que te quiere, Juan. 19/12/08”. He aquí la dedicatoria fraterna que el cineasta vigués Juan Pinzás estampó sobre la primera página del tan completo como hermoso volumen titulado Juan Pinzás. Un universo propio. El libro, editado por T&B de Madrid en 2008, diciembre, 1ª edición, registra fotografías y carteles por parte de ‘Atlántico Films, S.L.’, cuyo diseño y maquetación corrió a cargo de ‘Gráficas Monterreina’. Ángel Luis Hueso Montón escribe el estudio: A modo de introducción: Juan Pinzás o la lucha permanente. El destino de una vida es el título del trabajo de Emilio C. García Fernández. El escritor y periodista Juan Manuel de Prada firma el artículo Shocking Dogma: el voto de castidad, según Juan Pinzás. Fernando Alonso Barahona, en último término, despliega el concienzudo análisis en su monografía titulada: Juan Pinzás, un cineasta muy personal.
Fernando Alonso Barahona –reconocido escritor y estudioso del mundo de la cinematografía– nos adentra en “el nacimiento de un cineasta y sus trabajos en Galicia”. Y Berlanga, “en el fiel camino”: la película de Pinzás ‘La gran comedia’. En “cine y literatura”, he ahí “El juego de los mensajes invisibles”. En seguida, “la fantasía y la realidad” que corresponde a “La leyenda de la doncella”. Y después, la aventura de ‘Atlántico Films’, Juan Pinzás y Pilar Sueiro con “Cuando el mundo se acabe te seguiré amando”. Después, la trilogía del arte y pensamiento ‘Dogma’, con ‘Érase otra vez’, ‘Días de Boda’ y ‘El desenlace’. Juan Pinzás Cerqueira, ‘Vigués distinguido, 2002, Ayuntamiento de Vigo. Gallego Universal’. A continuación, “El estilo Pinzasiano, El futuro”. Como colofón, la “filmografía, premios y festivales”, además de la “Videografía” y la espléndida “Bibliografía sobre Juan Pinzás y su obra”.
“Hablar de Juan Pinzás es hablar del esfuerzo denodado por encima de las dificultades que rodean las actividades profesionales cinematográficas”, señala Ángel Luis Hueso Montón. Repasamos a través de las fotografías de este libro figuras como Raúl Fraire, María Barranco y Antonio Ferrandis. También de Anabel Alonso y Fernando Guillén. Evocamos al gran actor Luis Escobar en ‘La gran comedia’, al igual que a José Luis López Vázquez. He ahí a Fernando Guillén, a Paul Naschy, a Javier Gurruchaga. Emilio C. García Fernández nos recuerda en su estudio que Juan Pinzás comenzó con un “copión de 35 mm.” Y en formato de “Súper-8”.
“Más de diez años han transcurrido ya desde que el cineasta danés Lars von Trier, invitado a participar por el Ministerio de Cultura francés en un simposio internacional celebrado en el ‘Teatro Odeón’ de París, que conmemoraba el centenario del cinematógrafo, sorprendiese a su auditorio con la lectura de un inopinado manifiesto que arremetía contra el concepto de autor, nacido del romanticismo burgués y consagrado por la ‘nouvelle vague’, a la que, aun reconociendo los méritos de su impulso originario, tildó despectivamente de ‘pequeño oleaje que iba a morir en el río, convirtiéndose en lodo”, escribe Juan Manuel de Prada. Retorno –siguiendo el movimiento ‘Dogma’– a un naturalismo escueto y desinhibido. Cámara en mano, sin empleo de iluminación artificial. ¿Hasta qué plano estético de “cinema” se arriesgará el arte cinematográfico de Juan Pinzás?