Opinión

‘El Cavallero de Bouzas’ y el ‘Olivo Centenario’ de la Villa

Acerca de la “desaparición” del “Cavallero de Bouzas”, leemos las palabras de Don Paulino Freire Gestoso: “¿Cómo una figura tan importante pudo desaparecer? La magnitud de los efectos del ‘Milagro’ con los que entra en la historia de la Iglesia, siguen vivos y aumentando. Su simbología y popularidad son un patrimonio tan significativo que no podemos prescindir de él. La vista de la ‘Concha de la Vieira’ nos lleva a Santiago de Compostela. A Galicia”. Palabras del insigne boucense Freire Gestoso en su admirable libro El Cavallero de Bouzas. Un héroe, olvidado, en la Ruta del Apóstol a Galicia, ‘Gráficas Planeta’, Vigo, 2006.

‘El Cavallero de Bouzas’ y el ‘Olivo Centenario’ de la Villa

Porque, en efecto, la ausencia de personajes que decoran la ‘Tradición Xacobea’ son tan pocos que difícilmente se puede comprender que este personaje, con esencia propia y notable, se haya perdido. Desde luego que, al no ser económicamente demasiado rentable la Ruta Marítima, acariciando el ‘Finis Terrae’ por la costa, es posible que no coadyuvara para su interés divulgativo. No olvidemos que el ‘Cavallero’ no obtuvo la “flor de santidad” en el seno de la Iglesia. Asimismo, su ascendencia vinculada a figuras como Caio Julio César y la Reina Lupa, acaso fueron un notorio impedimento durante aquella época de persecuciones. “Personalmente –matiza el señor Freire Gestoso– creo que fue la figura del Apóstol Zebedeo, todo energía y protagonismo, quien opacó la bizarra personalidad del ‘Cavallero Conchado’. ¿Y por qué esta conclusión? El Apóstol, claro es, nunca fue ‘Peregrino’ a Compostela y, por tanto, no fue portador de la ‘Vieira”.

En mi memoria aparece la denominada ‘La Casa del Patín’, construida en 1640. ¡He ahí la edificación más señalada de Bouzas! Fue “emblema” de la Primera Exposición Mundial de la Pesca en Vigo en 1972. ¿El símbolo? “El Cavallero de Bouzas”: obra realizada por Miguel Ruiz, vivísima representación del proyecto cultural. Ahora observo la parte superior del “Escudo” de la fachada del Claustro en la plaza de las Platerías, junto a la rumorosa agua obsequiada por los pétreos caballos de su Fuente. Un detalle extraído del “Escudo” nos muestra el instante triunfal del “Cavallero” saliendo del mar todo cubierto de “conchas”: el símbolo del “Peregrino”.

Ante mí, una curiosa representación, lúdica y sugerente, de la arribada de la “barca” del Apóstol Santiago, el “Hijo del Trueno”, a los sosegados arenales de la villa marinera de Bouzas. Seductora también la figura de los símbolos: la “Vieira”, “El Cavallero de Bouzas”, y el azul y blanco de la bandera de Galicia.

He aquí el asombroso “Olivo centenario” de Bouzas, fiel compañero del célebre “Olivo” de la ciudad de Vigo, que mira hacia las islas Cíes, y la bella y anchurosa Ría viguesa. “Aceptado y reconocido el Milagro –agrega el entusiasta Paulino Freire–, tendría que admitirse el desvío del ‘peregrino’ por el ‘Camino Portugués’ hasta Vigo. Con este reconocimiento que, desde hace muchos años, el grupo dirigido por el señor López-Chaves intenta conseguir, entraríamos en el engranaje del ‘Xacobeo”.

¿Pinturas murales? Alfonso II el Casto en cuyo reinado toman cuerpo y consideración un conjunto de “extraños” resplandores y músicas de dulzura que nos trasladan al pétreo prodigio del “maestre Mateo” en el sagrado “Pórtico de la Gloria”.