La Sociedad Parroquial de Vedra celebró las bodas de oro de su conjunto artístico
Con una fiesta ambientada según viejas costumbres en la campiña gallega, la Asociación Parroquial de Vedra celebró, junto a las agrupaciones folclóricas del Centro Arzuano Melidense, de Baixo Miño, de Corcubión y de la propia asociación, las bodas de oro de la fundación de su conjunto folclórico.
Con una fiesta ambientada según viejas costumbres en la campiña gallega, la Asociación Parroquial de Vedra celebró, junto a las agrupaciones folclóricas del Centro Arzuano Melidense, de Baixo Miño, de Corcubión y de la propia asociación, las bodas de oro de la fundación de su conjunto folclórico.
El pasado 7 de agosto, el salón decorado con flores, como el campo en primavera, casi quedó pequeño cuando unas 500 personas se reunieron allí para disfrutar del espectáculo que en esta oportunidad recreó antiguas costumbres de casamiento en la Galicia rural y la “regueifa”.
Como es costumbre, se montaron puestos en los que se ofrecían bebidas y comidas tradicionales gallegas y españolas preparadas por los propios socios y directivos. “Tenemos gente en Vedra que colabora muchísimo”, contó Dora Pegito, presidenta de la asociación, y explicó que “entre ellos se encuentra una señora que se llama María y que es como la jefa del grupo de cocina”. Los jóvenes de la casa, por su parte, se hicieron cargo de idear, organizar y brindar atención durante la fiesta. Luego de la presentación de los conjuntos invitados y anfitriones prolongaron la celebración tocando y bailando todos juntos. “Esa es una de las cosas más lindas comentó la dirigente– porque es lograr la integración entre todos, que se conozcan”. En este sentido, consideró que las asociaciones de colectividad, en realidad, hacen más o menos lo mismo. “Cada uno mantiene sus tradiciones en la comida, las costumbres, los bailes, es como varias casas y varias familias que el día que se encuentran comparten todo; después vuelve cada uno a su casa y se visitan unos con otros”, ilustró Pegito que contó que este año los jóvenes de Vedra ya han participado invitados en fiestas ucranianas y griegas, entre otras. Por su parte, la asociación acostumbra a invitar a la celebración de sus verbenas a conjuntos amigos gallegos, españoles y de diversas colectividades.
El pasado 7 de agosto, el salón decorado con flores, como el campo en primavera, casi quedó pequeño cuando unas 500 personas se reunieron allí para disfrutar del espectáculo que en esta oportunidad recreó antiguas costumbres de casamiento en la Galicia rural y la “regueifa”.
Como es costumbre, se montaron puestos en los que se ofrecían bebidas y comidas tradicionales gallegas y españolas preparadas por los propios socios y directivos. “Tenemos gente en Vedra que colabora muchísimo”, contó Dora Pegito, presidenta de la asociación, y explicó que “entre ellos se encuentra una señora que se llama María y que es como la jefa del grupo de cocina”. Los jóvenes de la casa, por su parte, se hicieron cargo de idear, organizar y brindar atención durante la fiesta. Luego de la presentación de los conjuntos invitados y anfitriones prolongaron la celebración tocando y bailando todos juntos. “Esa es una de las cosas más lindas comentó la dirigente– porque es lograr la integración entre todos, que se conozcan”. En este sentido, consideró que las asociaciones de colectividad, en realidad, hacen más o menos lo mismo. “Cada uno mantiene sus tradiciones en la comida, las costumbres, los bailes, es como varias casas y varias familias que el día que se encuentran comparten todo; después vuelve cada uno a su casa y se visitan unos con otros”, ilustró Pegito que contó que este año los jóvenes de Vedra ya han participado invitados en fiestas ucranianas y griegas, entre otras. Por su parte, la asociación acostumbra a invitar a la celebración de sus verbenas a conjuntos amigos gallegos, españoles y de diversas colectividades.
