La Federación de Sociedades Gallegas convocó a sus instituciones afiliadas

Las entidades gallegas de Uruguay celebraron una reunión para buscar una salida a sus problemas tras la pandemia

La Federación de Sociedades Gallegas en Uruguay ha convocado, en el marco de las celebraciones del 12 de octubre, a todas las instituciones afiliadas a asistir a una reunión, en asamblea, en la sede del Centro Alma Gallega, en la que se evaluó el reintegro a las actividades luego de la pandemia. Cada uno de los representantes ha trasladado sus problemas y posibles soluciones a corto plazo.

Las entidades gallegas de Uruguay celebraron una reunión para buscar una salida a sus problemas tras la pandemia
Uru-Asamblea entidades gallegas
Directivos y representantes de las instituciones, durante el encuentro.

La Federación de Sociedades Gallegas en Uruguay ha convocado, en el marco de las celebraciones del 12 de octubre, a todas las instituciones afiliadas a asistir a una reunión, en asamblea, en la sede del Centro Alma Gallega, en la que se evaluó el reintegro a las actividades luego de la pandemia. Cada uno de los representantes ha trasladado sus problemas y posibles soluciones a corto plazo. También se ha informado sobre el estado del trámite de ‘Reconocimiento da Galeguidade’ a la Federación y de la gestión realizada ante la Secretaría Xeral de Emigración de la Xunta de Galicia.

La presidenta de la Federación de entidades gallegas en Uruguay, María ‘Charo’ Gil, ha recibido de los delegados los planes de futuro y las posibles integraciones de autoridades de las doce instituciones gallegas afiliadas.

La institución anfitriona, en este día, era Alma Gallega y Esperanza Pereira, como representante de la misma, invitó con una especialidad de la casa horneada por su esposo Jesús, para el brindis.

La necesidad de hablar presencialmente era tan grande, y la pizza muzzarella tan rica, que la reunión se alargó entre anécdotas y discutir posibles soluciones para el futuro de las instituciones gallegas.

En este mismo salón, estaban acostumbrados a celebrar el aniversario de Alma Gallega y asistir a diferentes eventos, con más de 400 personas invitadas. Hace dos años que esto no sucede.

“Todos estamos muy esperanzados en que la pandemia ha llegado a su fin, y no queremos ni pensar, que si volviera a suceder, no podríamos resistir otro año sin recursos para solventar los gastos de los clubes”, ha dicho Charo Gil.

La Federación está comenzando a buscar posibles soluciones de reconversión, pero, principalmente, les preocupa el cambio de estatutos para poder acceder a descendientes de gallegos a comandar las instituciones.

Ya no existen o son muy mayores, quienes nacieron en Galicia para acceder a ser representantes de las instituciones. Es necesario que los hijos o nietos de españoles puedan tomar las riendas, aunque tampoco hay a muchos que les interese.

Hay una institución que hace 30 años está en manos del mismo presidente y, por una u otra razón, nadie quiere o puede hacerse cargo.