Un emigrante gallego en Suiza y su hijo mueren ahogados en Canarias

Silverio Álvarez, de 65 años, y su hijo Daniel, de 36 años, murieron ahogados en la playa de El Inglés de Las Palmas de Gran Canaria, mientras se bañaban cerca del espigón, en una zona que llevaba una semana con bandera roja por el fuerte oleaje.

Un emigrante gallego en Suiza y su hijo mueren ahogados en Canarias

Silverio Álvarez, de 65 años, y su hijo Daniel, de 36 años, murieron ahogados en la playa de El Inglés de Las Palmas de Gran Canaria, mientras se bañaban cerca del espigón, en una zona que llevaba una semana con bandera roja por el fuerte oleaje.

El matrimonio, residente en Suiza, era originario de los municipios orensanos de Cortegada y Pontedeva, donde mantienen lazos familiares y a donde regresaban muchas vacaciones. En esta ocasión estaban en Canarias, ya que su hijo Daniel les había invitado a pasar unos días en la isla para celebrar su 40 aniversario de boda y la reciente jubilación del padre.

Los testigos del suceso apuntan que el padre se encontró en apuros y su hijo intentó ayudarle a salir del agua mientras la madre esperaba en la orilla y era testigo de lo que sucedía. Según la información oficial de Canarias, Daniel murió en el acto. Minutos más tarde, la embarcación de Cruz Roja divisó a 10 metros mar adentro el cuerpo sin vida del hombre sexagenario.

Tras certificar los sanitarios el fallecimiento de ambos, los cuerpos fueron trasladados al Instituto de Medicina Legal de Las Palmas, donde se realizaron las autopsias forenses. Según las fuentes próximas a la familia, los dos hombres fueron incinerados y sus restos no serán enterrados en Ourense, sino que serán trasladados a Suiza. A Gran Canaria se desplazaron allegados de los fallecidos y se esperaba la llegada de la hija y hermana de las víctimas, afincada en el país centroeuropeo.

La tristeza por la noticia se extendió por Ourense, ya que Silverio Álvarez tenía a dos hermanos, un hombre y una mujer, residentes en el ayuntamiento de O Ribeiro. Está previsto que la próxima semana se celebre una misa funeral, en recuerdo a las dos víctimas, en la parroquia de San Benito, una localidad próxima a la capital municipal de la que era natural el progenitor.

Pontedeva, donde viven los hermanos de la ahora viuda, también tiene previsto realizar una misa en memoria de los fallecidos.