HAY COINCIDENCIA EN DESESTIMAR EL VOTO ELECTRÓNICO POR NO OFRECER LA FIABILIDAD NECESARIA
La Subcomisión de la Loreg vio cuestiones de procedimiento y desestimó la circunscripción autonómica para las europeas
La Subcomisión parlamentaria que estudia la reforma del Régimen Electoral consideró el pasado miércoles cuestiones de procedimiento electoral y desestimó convertir la actual circunscripción única en circunscripciones autonómicas para las elecciones al Parlamento Europeo, como piden los partidos nacionalistas.
La Subcomisión parlamentaria que estudia la reforma del Régimen Electoral consideró el pasado miércoles cuestiones de procedimiento electoral y desestimó convertir la actual circunscripción única en circunscripciones autonómicas para las elecciones al Parlamento Europeo, como piden los partidos nacionalistas. Ésta fue una cuestión en la que coincidieron los dos grandes partidos mayoritarios, PSOE y PP, e IU, que consideran que la circunscripción nacional es la que asegura la mayor proporcionalidad, además de ser el sistema dominante en la Unión Europea, informó el diputado del PP Celso Delgado, miembro de la Subcomisión.
En esta última reunión los diputados no estudiaron nada del voto procedente del exterior, que queda para posteriores encuentros. Los diputados asistieron a una demostración de lo que podría ser el funcionamiento de una oficina electrónica electoral, de la que se hará una prueba piloto en tres ciudades españolas en las próximas elecciones al Parlamento Europeo.
Este procedimiento, que nada tiene que ver con el voto electrónico que se pide desde algunos sectores sociales, ayudaría a las mesas electorales en sus tareas de recuento de votos y elaboración de actas y podría también expedir papeletas aptas para la votación, haciendo innecesarias las habituales pilas de papel.
Las pruebas piloto de este sistemas se realizarán en las ciudades de Salamanca, Pontevedra y Lleida, que han sido elegidas por su tamaño y porque mucha de su población dispone de DNI electrónico, algo que no es imprescindible para el sistema pero agiliza su funcionamiento.
En cuanto al reivindicado voto electrónico, los principales partidos no se mostraron favorables a su implantación por no ofrecer la fiabilidad que todos consideran necesaria.
La reforma, esta semana en el pleno
Por otra parte, Delgado recordó que este martes se verá en el pleno del Congreso la toma en consideración de una proposición de ley que el BNG registró en abril del 2008 sobre una reforma parcial de la Loreg para modificar los requisitos del voto de los resdientes ausentes, de forma que se modificase el sistema del voto por correo y que para participar en las elecciones municipales se requiriese algún vínculo efectivo con el municipio.
El diputado del PP recordó que tras esta proposición del BNG, que considera insuficiente en su contenido, entró en el Congreso, en septiembre de 2008, la proposición de ley aprobada por unanimidad en el Parlamento de Galicia sobre este mismo tema y, en octubre pasado, otra proposición del PP idéntica a la anterior. Todas ellas siguen sin haberse debatido y a la presentada por la Comunidad de Galicia se prevé que tarde en llegarle el turno.
Según Delgado, el PP quiso acumular la suya a la del BNG para la toma en consideración pero no fue posible, a pesar de que la de la formación nacionalista no tiene más refuerzos y la del PP lleva el de los tres partidos con representación en el Parlamento gallego y ha sido objeto de análisis por parte de la Junta Electoral Central y el Consejo de Estado. En cualquier caso, estima Delgado, ahora el debate está lejos de la presión que ejerce la inmediatez de unos comicios autonómicos o municipales.
En esta última reunión los diputados no estudiaron nada del voto procedente del exterior, que queda para posteriores encuentros. Los diputados asistieron a una demostración de lo que podría ser el funcionamiento de una oficina electrónica electoral, de la que se hará una prueba piloto en tres ciudades españolas en las próximas elecciones al Parlamento Europeo.
Este procedimiento, que nada tiene que ver con el voto electrónico que se pide desde algunos sectores sociales, ayudaría a las mesas electorales en sus tareas de recuento de votos y elaboración de actas y podría también expedir papeletas aptas para la votación, haciendo innecesarias las habituales pilas de papel.
Las pruebas piloto de este sistemas se realizarán en las ciudades de Salamanca, Pontevedra y Lleida, que han sido elegidas por su tamaño y porque mucha de su población dispone de DNI electrónico, algo que no es imprescindible para el sistema pero agiliza su funcionamiento.
En cuanto al reivindicado voto electrónico, los principales partidos no se mostraron favorables a su implantación por no ofrecer la fiabilidad que todos consideran necesaria.
La reforma, esta semana en el pleno
Por otra parte, Delgado recordó que este martes se verá en el pleno del Congreso la toma en consideración de una proposición de ley que el BNG registró en abril del 2008 sobre una reforma parcial de la Loreg para modificar los requisitos del voto de los resdientes ausentes, de forma que se modificase el sistema del voto por correo y que para participar en las elecciones municipales se requiriese algún vínculo efectivo con el municipio.
El diputado del PP recordó que tras esta proposición del BNG, que considera insuficiente en su contenido, entró en el Congreso, en septiembre de 2008, la proposición de ley aprobada por unanimidad en el Parlamento de Galicia sobre este mismo tema y, en octubre pasado, otra proposición del PP idéntica a la anterior. Todas ellas siguen sin haberse debatido y a la presentada por la Comunidad de Galicia se prevé que tarde en llegarle el turno.
Según Delgado, el PP quiso acumular la suya a la del BNG para la toma en consideración pero no fue posible, a pesar de que la de la formación nacionalista no tiene más refuerzos y la del PP lleva el de los tres partidos con representación en el Parlamento gallego y ha sido objeto de análisis por parte de la Junta Electoral Central y el Consejo de Estado. En cualquier caso, estima Delgado, ahora el debate está lejos de la presión que ejerce la inmediatez de unos comicios autonómicos o municipales.