Tribuna abierta de David Casarejos

Nuria Fraile Díaz: Orden del mérito civil. De Vallecas al cielo, pasando por Edimburgo

Hace unos días recibí una llamada de la consejera general por Reino Unido, Nuria Fraile, que me informaba de que se le iba a conceder la Orden al Mérito Civil.

En realidad, lo primero que me viene a la cabeza cuando pienso en Nuria Fraile es su trabajo altruista y voluntario durante más de una década en Edimburgo y el efecto que muchos de los proyectos que ella fundó o ayudó a fundar han tenido en la población.

Nuria Fraile Díaz: Orden del mérito civil. De Vallecas al cielo, pasando por Edimburgo
Casarejos
David Casarejos.

Según Wikipedia, el artículo 1 del Reglamento indica que la Orden del Mérito Civil tiene por objeto premiar los méritos de carácter civil adquiridos por el personal dependiente de alguna de las Administraciones Públicas incluidas en el ámbito de la Ley 30/92, o por personas ajenas a la Administración que presten o hayan prestado relevantes servicios al Estado, con trabajos extraordinarios, provechosas iniciativas o con constancia ejemplar en el cumplimiento de sus deberes.

El trabajo de Nuria pasa por muchas áreas diferentes, desde la educación en español, al empoderamiento de las mujeres, pasando por la asistencia legal y ayuda psicológica a nuestra ciudadanía y ha sido la pionera en múltiples organizaciones de las que jamás ha logrado (ni lo ha buscado) nada a cambio.

Nuria Fraile podía haber sido una ‘guerrera del sofá’ o del teclado y limitarse como hace la mayoría a describir los problemas o contar los fallos del sistema por sus redes sociales, pero en vez de invertir el tiempo en posts o comentarios fútiles, continuó formándose estando ya en Escocia y dio los primeros pasos, junto con otras compañeras, para abrir la escuela de español Alba en Edimburgo, y poco después dar los pasos necesarios para montar la Oficina Precaria de Escocia en la que ha ayudado a miles de españoles.

Por la Oficina Precaria de Escocia han pasado varias decenas de voluntarias, pero a la cabeza de esta organización siempre ha estado Nuria aportando conocimiento, empatía y seriedad en un proyecto que se intentó copiar en otras ciudades y que, a pesar de la falta de recursos, ha sobrevivido más de una década.

Nuria Fraile es desde 2022 consejera general por Reino Unido en el Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior sin tener detrás el apoyo de ningún partido político y sin abanderar ninguna posición más allá de la ayuda a la emigración, preocupándose sobre todo por los sectores de la diáspora que están en situaciones más vulnerables.

Salió elegida con votos de las tres demarcaciones en Reino Unido ya que muchos ya conocían a Nuria por su labor en la organización Acción Coronavirus que formaron varias organizaciones en Reino Unido.

Su esfuerzo y trabajo se dirige en el Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior en dos direcciones: la comisión de Mujeres y Juventud, que dirige la igualmente maravillosa Mery Ballester, y la comisión de trabajo de normativa que Nuria dirige y que está intentando cimentar la normativa y reglamentos varios para ayudar que el CGCEE siga progresando.

Estas condecoraciones propuestas por los embajadores normalmente van a las solapas de aquellos que frecuentemente salen en todas las fotos de las fiestas y eventos en las embajadas y suelen mostrar un quién es quién del sector económico y financiero o por otro lado de hispanistas, artistas o diplomáticos (todo se queda en casa).

Las condecoraciones de mayor rango como el Collar o la Gran Cruz suelen otorgarse a presidentes, ministros, príncipes o primeras damas y en Reino Unido se hizo una excepción con la Gran Cruz otorgada a Ignacio Echeverría Miralles de Imperial (a título póstumo), asesinado al intentar ayudar a un agente de policía en el atentado perpetrado en Londres el 3 de junio de 2017.

La condecoración a Nuria Fraile, aparte de ser un reconocimiento justo, es un empujón al trabajo voluntario y altruista. Esta condecoración aplaude la labor de la oficina precaria que ha mejorado vidas, y todas las voluntarias que han pasado por esta organización seguramente compartan el orgullo de trabajar o haber trabajado con una luchadora como Nuria.

Noelia Martínez Castellanos, periodista y coordinadora de Citizens Rights Project desde Edimburgo y ante el anuncio de la condecoración, dice:

Me entero de que le van a conceder la Orden al Mérito Civil a mi amiga y compañera de lucha incansable, Nuria Fraile, y lo primero que pienso es que, si alguien se lo merece, es ella. Puede parecer una frase muy manida, pero es la puñetera realidad.

Compañera, antes de que el síndrome de la impostora se apodere de ti, déjame que te diga que ni por un segundo pienses que esto no es para ti. Si para alguien son ese tipo de reconocimientos es para personas como tú que han sabido utilizar la vida en el barrio, el orgullo de clase obrera, el conocimiento académico, y tus experiencias personales como mujer inmigrante y como madre soltera, las buenas y las malas, para parir proyectos de apoyo a personas en situación de vulnerabilidad a pesar de la falta de recursos, de las pandemias, de las crisis financieras y en la mayoría de las ocasiones, a pesar de la falta de apoyos institucionales.

Nuria es un gran ejemplo de cómo la lucha colectiva puede transformar vidas a pesar de los obstáculos, de las largas horas de trabajo no remunerado y de la falta de financiación. Nuria ha remado (y sigue remando) contra viento y marea para que su gran proyecto, la Oficina Precaria de Escocia, siga pudiendo ayudar a inmigrantes castellanoparlantes residentes en Escocia en situaciones muy precarias.

Las precarias, con Nuria a la cabeza, han asesorado y representado en tribunales de empleo de manera voluntaria a miles de inmigrantes españoles en el Reino Unido ante la inactividad, la mirada impasible y la falta de reacción de las autoridades locales, del gobierno Escocia, del gobierno del Reino Unido y del Gobierno de España. 

Así que estoy segura de que Nuria estará conmigo cuando digo que seguramente ella no quiera que su carrera como activista sea un ejemplo para nadie. Porque entonces, las instituciones seguirían lavándose las manos y dejando en manos de personas como ella y de organizaciones como la Oficina Precaria de Escocia, labores y servicios de los que deberían encargarse los gobiernos. A pesar de esto y de tener que lidiar con sus propios problemas y quebraderos de cabeza, de lo que también estoy segura es de que el día después de recoger este reconocimiento, Nuria se levantará como cada día con la agenda repleta de planes y la cabeza llena de ideas para mejorar la vida de las personas en situaciones más precarias que la de ella.

¡Enhorabuena, compañera! Take it all in ¡te lo mereces!”.

Marisa Garcia, madrileña como Nuria y secretaria del Consejo de Residentes en el Norte UK (demarcación consular de Edimburgo) que Nuria preside, ha comentado:

Nuria Fraile, o la amas o la odias. Verdad Nuri? Todos estos años de lucha feminista y por los derechos de los más desfavorecidos parece que se han visto reflejados en esta condecoración, reconociendo su trabajo.

Nuria siempre ha dicho que realiza su labor para que ninguna sea tratada como una emigrante maleante, o como ella se sintió tratada... pues, bonita mía, recompensa. Eres un orgullo para tu CRE, tus amigas, tu familia y la gente que se ha cruzado en tu camino.  Nunca te rindas. Seguimos aquí”.

La presidenta del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior, Violeta Peláez Alonso, también ha querido comentar esta condecoración: “Es una gran alegría ver que reconozca el mérito indudable a una mujer que durante tantos años ha estado comprometida con el apoyo y asesoramiento a la población más vulnerable. Nuria siempre ha estado de forma totalmente voluntaria y desinteresada luchando por defender los derechos de los migrantes unas condiciones de vida dignas”.

Cuando el cónsul general en Edimburgo, en nombre del embajador en Londres, anunció a Nuria la buena noticia, lo hizo con estas palabras: “Sé que muchos españoles y españolas compartirán mi alegría por este más que merecido reconocimiento a tu labor de tantos años, centrada en asistir a la parte más vulnerable de nuestra colonia, hacer valer sus derechos y reivindicar su dignidad”.

Nuria ha dejado su huella en mucha gente y su humildad probablemente no le permite ver el impacto positivo de su trabajo constante, pero son muchas y muchos los que aplaudimos esta condecoración por parte del embajador y solo puedo añadir que yo de mayor quiero ser como Nuria y me gustaría que en nuestra sociedad tuviéramos a muchas más Nurias Frailes trabajando por un presente y futuro mejor.