Joaquín Calvo, presidente del PP de Bélgica: “Con Vox hay que hablar para facilitar el regreso de quienes votaban antes al PP”
Los representantes del Partido Popular en Europa ven con agrado la decisión adoptada por el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, de presentarse como candidato a presidir el partido a nivel nacional. A la buena acogida expresada tras el anuncio por el representante en Suiza, José Gil Doval, se une el presidente en Bélgica, el madrileño Joaquín Calvo, quien lo califica como “un político con mucha experiencia” que, a lo largo de los años, “ha demostrado ser una persona sensata”, y así ha quedado también “de manifiesto en sus declaraciones tras la Junta Directiva”, aseguró.
Feijóo ha mostrado su intención de “acceder a la presidencia del PP con mesura, con la vista puesta en el futuro y en que las cosas salgan bien” y, en ese sentido, “mi impresión es muy favorable”, añadió Calvo, quien destaca la alusión del candidato a Vox en esas declaraciones, recordando que muchos de sus integrantes lo fueron antes del PP y que hay que gobernar para que puedan volver a la casa común.
“Yo no puedo tener mejores sensaciones tras esta intervención y espero que sea capaz de afrontar el reto que tenemos en estos dos años para alcanzar el gobierno”, porque “está perfectamente cualificado para hacerlo”.
Natural de Madrid y funcionario de la Unión Europea en Bélgica, Joaquín Calvo apuesta porque “haya una renovación” en el partido y “discutir sobre las cuestiones de ideología”. Porque “no podemos volver a una organización de partido como la que hemos tenido en el pasado y que ha generado estas situaciones lamentables”, dijo, en alusión al último episodio entre Casado y Ayuso, que acabó con la actual cúpula del PP.
“Hay que reflexionar en la reorganización del partido, por un lado, y, por otro, definir el marco intelectual e ideológico en el que se tiene que mover”, y eso es “lo que yo le pediría a Feijóo” como presidente, porque con Vox tenemos “algunos puntos en común”, y con ese partido “hay que hablar”, pero eso “será más fácil hacerlo cuando se defina la visión política del partido”, para ver “qué puntos de contacto hay y atraer a la gente”.
Respecto a lo que la aspiración de Feijóo de llegar a La Moncloa puede ofrecer al colectivo emigrante, Calvo, quien tiene previsto acudir al congreso extraordinario, ya que es compromisario nato, destacó el hecho de que ni el actual presidente de la Xunta ni gente de su equipo “ha faltado nunca a las reuniones del partido en el exterior”, porque una de las características del PP de Galicia y de Feijóo “es el contacto con la emigración”.
No obstante, habrá que plantear “otros temas que ya vienen del pasado, como el voto rogado y otro tipo de aspiraciones que tenemos los que vivimos fuera de España”, como los asuntos que tienen que ver con la fiscalidad, que “estando Feijóo, las va a escuchar con más simpatía y con ganas de resolver el problema”.
Después de 35 años en Bélgica, Calvo se atreve a realizar una sinopsis de la idea que los europeos tienen de España y asegura que, al respecto, se da una dicotomía entre los que visitan el país y aquellos que se quedan con la idea aprendida. A todos los que vienen, “España les gusta y les gustan los españoles”, asegura. Es más, “dicen que es un país bien organizado, con ciudades limpias, con servicios y respeto del medio ambiente”, y si lo comparan con el suyo “dicen que España está mejor”. Luego está “la visión histórica”, que, asegura, “es distinta”, ya que “sigue existiendo la idea de la España negra, clerical”. Esa idea “se da en toda Europa”, no solo en Bélgica, pero los que vienen dicen “que tiene mucha variedad y se sorprenden de las ciudades que hay en España”, comenta, y concluye: “Eso no lo sabemos porque estamos siempre criticándonos, pero la experiencia de mucha gente es que es un buen país”.
