La marcha de Perea se vincula con una falta de entendimiento con el ministro Escrivá

Isabel Castro, miembro del Govern balear, sustituirá a Jesús Perea al frente de la Secretaría de Estado de Migraciones

Isabel Castro, miembro del Govern balear e inspectora de Trabajo, será la nueva secretaria de Estado de Migraciones, en sustitución de Jesús Perea, según ha publicado ‘El País’ y han confirmado distintos medios de comunicación. Uno de los últimos actos oficiales de Perea en su cargo ha sido la asistencia al Pleno del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior. Los representantes de los españoles en el exterior estarán ahora pendientes de si los compromisos realizados por Perea en ese foro siguen firmes con la llegada de la nueva secretaria de Estado.
Isabel Castro, miembro del Govern balear, sustituirá a Jesús Perea al frente de la Secretaría de Estado de Migraciones
Isabel Castro-toma posesion 2019
Isabel Castro, en su toma de posesión como consejera balear de Administraciones Públicas y Modernización, en 2019.

Jesús Perea abandona el cargo tras 14 meses de su llegada a la Secretaría. El Ministerio de Seguridad Social, Migraciones e Inclusión no se ha pronunciado sobre el relevo, que varias fuentes gubernamentales confirman que se producirá en próximos consejos de ministros y que vinculan con una falta de entendimiento con el ministro desde hace tiempo.

Jesús Perea fue designado para ejercer tales responsabilidades a comienzos de abril de 2021 en lugar de Hana Jalloul, quien entonces abandonó la Secretaría para presentarse como número dos en la candidatura del PSOE a las elecciones a la Comunidad de Madrid. Nacido en Cuenca en 1976 y licenciado en derecho por la Universidad de Castilla-La Mancha, Perea se había desempeñado como diputado en el Congreso entre 2000 y 2004. Posteriormente ejerció como director general de Administración Local de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha (2004-2011).

Isabel Castro, hasta ahora directora general de Coordinación, Relaciones con el Parlament, Derechos y Diversidad del Gobierno balear, se convertirá en la tercera secretaria de Estado bajo el mandato de José Luis Escrivá, en una Secretaría de Estado que ha sufrido constantes cambios en dos años y medio. La salida de Perea es la quinta baja que se produce en lo que va de legislatura en el departamento de Migraciones. La primera fue la socialista Hana Jalloul, que abandonó el cargo para concurrir como número dos de la candidatura de Ángel Gabilondo en las elecciones madrileñas de mayo de 2021.

La futura secretaria de Estado, de claro perfil laboral, tiene sobre la mesa la tramitación de la reforma del reglamento de Extranjería con la que Escrivá pretende introducir en el mercado de trabajo a miles de trabajadores extranjeros. Su antecesor ha estado a cargo de la elaboración del borrador del texto normativo, que está siendo analizado por los distintos ministerios. 

Isabel Castro es licenciada en Derecho y Administración de Empresas por la Universidad Carlos III de Madrid. Ingresó en el Cuerpo Superior de Inspectores de Trabajo en 2008, donde ejerció durante estos años, entre otras funciones, las relacionadas con la vigilancia y el cumplimiento de la normativa en materia laboral, de Seguridad Social, de prevención de riesgos laborales y de extranjería, explican desde el Govern balear. 

Entre 2015 a 2019, Castro fue directora general de Trabajo, Economía Social y Salud Laboral del Gobierno de las Islas Baleares. Actualmente, es directora general de Coordinación, Relaciones con el Parlamento, Derechos y Diversidad en la ejecución autonómica desde la que realiza “tareas de coordinación e impulso de las políticas de las once consejerías del Gobierno”. 

Fuentes gubernamentales señalan que el “carácter” de Escrivá está detrás de los numerosos cambios en su departamento. En las últimas semanas, además, se ha incrementado el malestar en las filas socialistas por las complejas negociaciones sobre pensiones que han hecho peligrar algunas medidas. Una de las críticas que llegan desde sus compañeros del ala socialista es que el ministro carece de perfil político y va por libre en algunas de esas negociaciones.