La colectividad del exterior ni se menciona en el documento de compromisos

La emigración, fuera de la agenda política del Gobierno

El pasado 13 de enero se cumplía un año desde que José Luis Escrivá tomó posesión de su cargo como ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Desde entonces, la emigración desapareció de la agenda política del Gobierno y, por eso, en el documento que da cuenta del cumplimiento de los “principales compromisos” del departamento para 2020 no se menciona ni una sola vez a los más de 2,5 millones de españoles que residen en el exterior.

La emigración, fuera de la agenda política del Gobierno
Escriva en el Congreso copia
El ministro Escrivá, durante una de sus comparecencias parlamentarias.

El pasado 13 de enero se cumplía un año desde que José Luis Escrivá tomó posesión de su cargo como ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Desde entonces, la emigración desapareció de la agenda política del Gobierno y, por eso, en el documento que da cuenta del cumplimiento de los “principales compromisos” del departamento para 2020 no se menciona ni una sola vez a los más de 2,5 millones de españoles que residen en el exterior.

En esa valoración de un año de Gobierno se hace referencia a la política migratoria y se habla del refuerzo de los sistemas de atención humanitaria para atender a los inmigrantes, pero nada dice de los españoles que lo están pasando mal en diferentes países de acogida con sistemas sanitarios deficientes que complican todavía más la gestión de la pandemia ni tampoco de las instituciones que agrupan a la colectividad, cuya falta de ingresos al permanecer cerradas amenaza su supervivencia.

La emigración nunca ha estado en la agenda política del Gobierno. A su llegada al Ministerio, Escrivá manifestaba su intención, tal y como adelantaba ‘Crónicas de la emigración’, de suprimir algunos programas importantes para la emigración como los de Asociaciones y Centros. Al día siguiente de que este medio diera a conocer sus intenciones, el ministro, durante su comparecencia en la Comisión del Parlamento, matizaba que la intención era analizar “si las prioridades estaban bien fijadas” para ver “si estamos ayudando a los que lo necesitan y de la manera que lo necesitan”.

A pesar de esto, cinco meses después, el director general de Migraciones, Santiago Yerga, confirmaba que los programas de Centros y el programa de Comunicación no se iban a convocar “por razones de orden organizativo” derivadas de la crisis sanitaria y aseguraba que estaban teniendo muchas dificultades para sacar adelante los programas ya convocados.

Este año todavía no se han convocado los diferentes programas para los españoles en el exterior y las entidades que los agrupan. Si anteriores gobiernos, de diferentes signos políticos, hablaban de la importancia de convocar los programas cuanto antes por la compleja tramitación que suponen algunas de las entidades del exterior, este año todavía deberían convocarse con mayor celeridad teniendo en cuenta las restricciones a la movilidad que hay en la mayoría de países del mundo.

El silencio de los altos cargos del Ministerio respecto a los temas de emigración es clamoroso y una constante de la llegada de Escrivá al Ministerio. De todas las notas de prensa que ha emitido desde su llegada, sólo dos hacen referencia a la emigración, lo que supone menos del 1% del total. 

Ausencia de Plenos del CGCEE

Los representantes de la emigración también se han quejado, una y otra vez, de que el Gobierno desoía sus demandas y no se les tenía en cuenta. En una reciente entrevista concedida a ‘Crónicas de la emigración’, el presidente del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior (CGCEE), Eduardo Dizy, aseguraba que el Gobierno no tenía “empatía” con la emigración y “no se toman en cuenta algunos acuerdos importantes tomados en la Comisión Permanente”. El último desacuerdo entre el Gobierno y la Comisión Permanente del CGCEE viene dado por el hecho de que la Administración decretó la finalización del mandato para el próximo mes de junio y la convocatoria de elecciones al CRE (Consejo de Residentes Españoles) para el mes de mayo.

Los representantes de los españoles en el exterior pedían que el mandato se extendiese dos años, argumentando que en 2019, por estar el Gobierno en funciones, y en 2020, por la crisis sanitaria, no se celebró el Pleno tal y como manda la legislación.

Esta polémica también hace que muchos de los españoles del exterior se cuestionen el actual reparto de competencias, ya que el CGCEE depende del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, mientras que los CRE dependen del Ministerio de Exteriores, Unión Europea y Cooperación. Esta dualidad hace imposible contar con un único interlocutor.

Celebración del Día del Migrante

El 18 de diciembre se celebra el Día del Migrante, una fecha en la que en esta ocasión no ha tendido hueco la emigración española, ya que los actos se centraron en los inmigrantes que llegan cada día a España. De hecho, la secretaria de Estado de Migraciones, Hana Jalloul, visitó durante esa jornada un centro de refugiados para el colectivo LGTBI.

La única actividad que se llevó a cabo fue la inauguración, tres días antes, de la exposición ‘Reflexiones desde mi balcón: Cuando el tiempo no pasa’, una muestra cedida por la Asociación Hispano Belga de Bruselas y que reflexiona sobre la pandemia y el confinamiento.

Las mujeres emigrantes

La sensibilidad que ha demostrado el Gobierno hacia las mujeres no ha tenido su correspondencia con las mujeres emigrantes. En los últimos años, diferentes colectivos estaban dando pasos para visibilizar a las mujeres emigrantes que, en muchas ocasiones, sufrieron las peores condiciones en su emigración.

Con motivo de la celebración del Día de la Mujer, la Secretaría de Estado de Migraciones organizó la jornada ‘Migración resilente: La historia la cuentan ellas’, en la que contó con colectivos y testimonios de mujeres inmigrantes, pero no con representantes de las mujeres emigrantes o retornadas.